~Monkie Kid~ 7️⃣

¿Tío?

Espero que les guste~

Nota: Tenía la intención de escribir otra parte de "Melancolía" pero entre más lo intentaba, menos me salía y me termine frustrando, así que decidí dejarlo ahí. Lo siento para quienes querían una pelea o algo así pero no pude obligar a mi cerebro a escribir T-T

Nota-2: En cambio, pude terminar esta petición que me pidieron más de una vez. No sé si es exactamente lo que querían pero de igual manera, espero que puedan disfrutarla ^_^

Petición de: Rand1mikU

-Espera, espera, espera- Mei hizo un gesto algo dramático, con los ojos bien abiertos, y MK no pudo evitar sonreír al verla, casi pudiendo ver los engranajes de la mente de su amiga girar a gran velocidad. -La diosa de la creación inserto una pequeña figura de piedra dentro de otra piedra para que durmiera por miles de años- darse cuenta de que MK no es realmente humano y el rostro al que todos están acostumbrados no es el real aun se siente raro, para todos, aunque ella a veces parece fascinada con esa historia. -La figura de convierte en ti de alguna manera y la piedra...¿Es la misma de la que salió el señor King?- enarco una ceja.

-Eso es lo que ella me mostró- hay un cierto alivio de poder hablar de esto con alguien. -Monkey King es un ser caótico, desde su nacimiento, y el Presagio del Caos tenía que salir de algún lado, así que...- le hubiera gustado poder preguntarle a la diosa ciertas cosas ¿Por qué usar la misma piedra que el dios? ¿No había otra alternativa? ¿Quizás había sido por casualidad? ¿O había sido su plan? Todo lo que vi y aprendió solo encendió más dudas en su mente.

-Vaya, eso es...loco- Mei parpadeo, silbando con ligero asombro, solo para fruncir apenas el ceño en un gesto pensativo mientras algo venía a su mente de repente. -¿Eso no te haría algo así como su hermano?- señaló y MK ladeo la cabeza, mirándola con curiosidad, esperando a que continuará. -Ya sabes. La piedra funcionó como una especie de huevo y ambos salieron de allí, así que...- un repentino silencio se instaló entre ellos, analizando la situación y lo que ella acababa de decir, sin poder creerlo.

-¿Soy su hermano menor?- se miraron entre ambos, un destello dorado rodeando el cuerpo de él y dejándolo ver como un mono.

-Puede ser- asintió, mirándolo fijamente. MK se parecía un poco a Wukong, lo que no era realmente una sorpresa porque los tres monos se parecían bastante, pero las marcas en sus rostros era diferente, vagamente parecidas y Mei creía firmemente que a pesar de ambos tenían los mismo poderes, había mucho más en su amigo de lo que realmente se veía.

Ella tiene mucha curiosidad cual podría ser el máximo potencial de un ser que la diosa creo como Presagio del Caos.

-No sé si eso es bueno o no- se cruzó de brazos con el ceño fruncido.

-¿Bromeas? ¡Es grandioso!- el castaño se iluminó, sonriendo con entusiasmo, la cola agitándose como la de un perro. -¡Ser el hermano menor de Sun Wukong, el gran sabio de la montaña!- agitó las manos en un gesto llena de energía apenas contenido. -¡Eso se siente como algo loco sacado de un fanfic!- rio a carcajadas ante sus propias palabras, recordando vagamente qué Tang había escrito algo parecido.

Lo tendrá que buscar más tarde.

-¿Te recuerdo que ese mono tiene todo un legado de estupidez?- quizás fue un poco brusca pero no puede evitarlo. Aun esta un poco molesta con ese mono. -No solo nos mintió e hizo planes a nuestras espaldas, sino que nos atacó y es tan egoísta que no parece aprender de sus errores- ella vio cuando le dolían las mentiras a MK y eso alimenta un poco su resentimiento. Al diablo, le gustaría poder golpear al dios. -Estoy bastante segura de que aun guarda secretos que no tardarán en explotar en nuestras caras- bufo, sabiendo que solo era cuestión de tiempo para que otro de los errores del pasado de Wukong volvieran y el pobre de MK tuviera que encargarse. -Apenas cumple con el rol de maestro y es un desastre, no quiero imaginar como sería si intentará llenar el papel de hermano mayor-

-...tienes un punto- el castaño se desinflo con un suspiro, haciendo un puchero. Sabía que ella tenía razón en más de una cosa e incluso si adoraba al dios, dolía. Miró de reojo a la chica, cuyo ceño estaba fruncido con molestia notable, y se mordió el labio inferior, enderezándose cuando algo vino a su mente. -¡Mei-Mei!- chillo, logrando que ella lo mirara, dejando de lado su molestia. -¡Se me ocurrió algo super loco!-

-Te escucho- se acomodo, atenta, dispuesta a escuchar lo que sea que cruzara por la alocada mente de su mejor amigo en el mundo.

-Macaque, Monkey King y DBK son hermanos, junto a Azure, Peng y Yellowtusk- ella asintió, haciendo un gesto para que continúe. -Su hermandad con Macaque se rompió cuando Monkey King lo mato- un hecho que había sido un shock para él, le había costado mucho dejar de llorar por la muerte del amigo que aun tenía a su lado y no había podido mirar al dios durante unos cuantos días. Había sido raro. -Azure, Peng y Yellowtusk dieron la hermandad por terminada cuando Monkey King les dio la espalda a favor de proteger al monje...pero nunca se hablo de que la hermandad con DBK se haya terminado, incluso cuando pelearon- los ojos de Mei brillaron cuando algo en su mente hizo click.

-¡Red Son es tu sobrino!- chillo, riendo a carcajadas, llena de diversión y emoción repentina, la punta de su cabello amenazando por unos segundos en convertirse en llamas pequeñas verdosas en una perdida momentánea de control. -¡Eso es tan divertido!- se paso las manos por el cabello, riendo sin poder controlarse realmente y MK sonrió enormemente al verla animarse. -Oh, Red Son estará tan molesto por esto~- saca su teléfono y sus dedos son rápidos en escribir un mensaje que no duda en enviar, sabiendo el efecto que podría causar.

-¿Quieres ir a verlo para molestarlo un poco?- agito apenas la cola, sonriendo hasta mostrar sus colmillos en una sonrisa burlona.

-No es necesario~- hizo un gesto, divertida, y no mucho después, en el pequeño departamento apareció una bola de fuego que parecía emanar del suelo. MK chillo un poco, habiendo olvidado esa rara habilidad del demonio, mientras Mei solo se acomodaba en su lugar con una gran sonrisa en su rostro.

-Estoy aquí, míseros mortales- Red Son hace un gesto, haciendo que el fuego a su alrededor s apagara, sin dejar siquiera marcas en el suelo para alivio del castaño y no pareciendo exactamente feliz de estar allí. MK se pregunto que le había dicho su amiga para que él apareciera así. -¿Qué quieres, niña dragón?- gruño con el ceño fruncido, su cabello convertido en llamas rojizas mientras entrecerraba los ojos hacia ella, en una especie de sospecha y desconfianza ligera.

-MK es tu tío- señalo y el demonio enarco una ceja.

-¿Disculpa?- las llamas de su cabello se apagan un poco por la confusión.

-MK es tu tío- repitió sin mucho problema y MK se muerde la lengua para no reírse ante la expresión del demonio, optando por memorizarla lo mejor que puede para dibujarla más tarde. -MK descubrió que es hermano de Wukong y como este es el hermano jurado de tu papá, eso significa que...-

-¡Cállate!- Red Son luce espantado al entender, volteándose a ver al castaño, quien se endereza un poco en su lugar. -¡No eres mi tío, me niego a aceptarte como tal!-

-¿Así tratas a un familiar?- hizo un puchero, riendo cuando las mejillas ajenas se vuelven rojas, su cabello llameando una vez más.

-¡No eres parte de mi familia, niño de los fideos!- el demonio grita reclamos, mezclados con justificaciones de como el otro no podía ser ningun tipo de pariente suyo o algo así, el par de amigos solo pudiendo reírse de la actitud ajena.

Molestar a Red Son es divertido.