21- Tú y yo

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NICK

Cuando menos me lo espero, Taylor me ha empujado a un rincón que estaba apartado de la habitación. Una pequeña habitación que estaba dividida de la otra. Una más alejada y en donde estaba completamente seguro de que nadie podría escucharnos. Y que por supuesto, iba a cumplir todo lo que me había dicho hace un momento.

Me mira. Sonríe con picardia y desliza sus manos hasta el botón de mi pantalón. Yo suspiro cuando veo que baja la mirada y quita el botón. Le sigue la cremallera que la baja lentamente. Robándose un suspiro por mi parte. Me vuelve a mirar y ahora se muerde los labios. Esos labios que con gusto morderia yo mismo.

- ¿Te he dicho alguna vez... - desliza sus manos por mi torso desnudo - lo cachondo que me pones?

Niego. Incapaz de articular palabra.

- Pues me pones. Y mucho. Desde el primer jodido día en el que te conocí.

Se deshace de mi camisa, tirándola a cualquier lado de la habitación. Y cuando veo que acerca su boca a mi pecho; siento morir.

Comienza un camino de besos por mi pecho. Baja por mi abdomen y con la punta de su lengua, vuelve a subir. Hasta quedar de nuevo frente a mi. Agarra mis manos y las sube hasta la altura de mi cabeza; encarcelandome entre su cuerpo y la pared.

- ¿Sabes cuantas veces he soñado con tenerte así? - murmura contra mi boca - con poder tocarte - pasa una de sus manos por mi abdomen - con hacerte temblar como lo estoy haciendo ahora. He soñado tantas veces con este momento que parece un sueño.

- No lo es. Es algo real. Muy real.

- ¿Te ha gustado provocarme durante todo el día? - acerca mi cadera a la suya haciendo que suelte un jadeo - no has dejado de hacerlo, cariño.

Y a mí ese cariño va directo a mi entrepierna.

- Por favor... - suplico con voz desesperada - te necesito, amor.

Suelta mis manos que no tardan en ir por todo su cuerpo. Acerco mi boca a la suya. Esa boca tan exquisita que me volvía loco. Roza sus labios con los míos, dejando un beso en la comisura de mis labios. Provocando en todo momento. Sabía jugar. Y lo estaba haciendo genial.

- Joder Taylor, deja de jugar maldita sea.

Pongo mis manos en su pecho y lo empujo hasta el sofá más cercano que había. Me subo encima de su cuerpo y sin previo aviso, comienzo a quitar su camiseta de una sola vez. Les siguen mis pantalones que los quito desesperadamente. De un momento a otro, Taylor y yo estábamos únicamente en bóxer.

Llevo mi mano detrás de su nuca. Enredo mis dedos en sus rizos y me quedo sentado prácticamente encima de su notable erección. Acerco mi boca a la suya. Taylor se tira a devorar mi boca. Incia un beso rudo. Salvaje. E incluso sucio y excitante. Sus labios se mueven contra los míos. Su lengua se cuela en mi boca para jugar con la mía. Mueve sus caderas y a mi ese simple roce me excita y me duele. Me duele porque solo nos separa una puta fina prenda que estaba deseando quitar con mis propios dientes.

- Joder...espera - pone sus manos en mi cintura para que pare los movimientos - si sigues haciendo eso soy capaz de correrme encima. Y quiero follarte. No sabes cuantas ganas tengo.

- ¿Lo vamos hacer? ¿Estás seguro?

- Tan seguro como lo que siento por ti, Nick. Quiero esto. Y te quiero a ti. Aquí y ahora.

Con nuestros ojos sin poder dejar de mirarnos; bajo sus bóxer y quito los míos rápidamente. Busca un preservativo en la mesita de al lado y Taylor se lo acaba poniendo.

BATALLA DE BANDAS || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR Y NICK GALITZINE ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora