Distancia.

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Esa noche, después de llegar a casa tras el agotador ensayo, Canny decidió salir al jardín. La noche estaba fresca, y el silencio del lugar la invitaba a perderse en sus pensamientos. Sacó su teléfono y, con un suspiro, decidió escribirle a su mamá Lisa. Le contó sobre la situación con Asa, su confusión, y lo perdida que se sentía.

Lisa respondió casi de inmediato.

Mami: Sé fuerte, mi niña. El amor a veces duele, pero estoy segura de que todo va a mejorar. Muy pronto nos veremos, y hablaremos mejor. Te amo, bebé.

Canny sonrió con nostalgia, agradecida por el apoyo de su madre. Pero el peso en su pecho no desapareció por completo. Guardó su teléfono y cerró los ojos, tratando de ordenar sus pensamientos. De repente, sintió la presencia de alguien a su lado. Abrió los ojos y, al girarse, vio a Ahyeon, quien se había sentado en silencio junto a ella.

Durante unos minutos, ninguna de las dos dijo nada. Solo estaban allí, compartiendo la quietud de la noche. Ahyeon no presionaba, solo ofrecía su compañía, sabiendo que Canny necesitaba tiempo para ordenar sus emociones. Finalmente, Canny rompió el silencio, su voz suave y llena de pesar.

—Perdón por haberte involucrado en todo esto... No era mi intención.

Ahyeon miró a Canny y negó con la cabeza, una sonrisa tranquila asomando en sus labios.

—No tienes que disculparte, Canny. Esto no es tu culpa. Asa cometió un error en dejarte, pero eso no significa que debas cargar con todo el peso. —Se inclinó un poco más hacia ella—. Además, no se trata solo de ustedes dos. Si el director quiere que sigamos con esto del "ship" para los fans... Pues, ¿por qué no divertirnos un poco? Hagámoslos felices, ¿no?

Canny suspiró, dándole vueltas a lo que Ahyeon le decía. Sabía que lo de "Chiyeon" no era más que una estrategia para ganar popularidad, pero la idea de jugar con esos sentimientos frente a los fans le resultaba incómoda. Sin embargo, la ligereza con la que Ahyeon lo proponía le daba un toque diferente.

—No sé si pueda fingir estar bien cuando mi corazón está hecho un desastre —admitió Canny, mirando hacia las estrellas, buscando algún tipo de consuelo.

Ahyeon la miró con dulzura.

—No te estoy pidiendo que lo finjas. Solo que... que disfrutes. Hagamos que todo esto sea divertido para nosotras, y lo demás vendrá por sí solo. Tienes un buen corazón, Canny. Los fans lo ven, lo sienten, y ellos no quieren verte triste. No dejes que esto te consuma.

Canny se quedó en silencio por un momento, asimilando las palabras de su amiga. Al final, se permitió sonreír un poco, aunque fuera solo un gesto leve.

—Supongo que tienes razón... No puedo hacer nada más que intentar pasarlo bien.

Ahyeon le dio un pequeño empujón con el hombro.

—Eso es, bebe. Vamos a hacer que todos los "Chiyeon" shippers enloquezcan con nosotras.

Canny soltó una ligera carcajada. Sentirse tan apoyada por Ahyeon en ese momento le trajo algo de paz. Aunque su corazón seguía dolido, al menos sabía que no estaba sola. Se quedó allí, al lado de Ahyeon, bajo las estrellas, pensando en lo que vendría después.

Después de la charla con Ahyeon en el jardín, Canny decidió que tenía que cerrar otro capítulo de su vida. Se levantó con determinación y se dirigió a la habitación que, hasta hace poco, había compartido con Asa. Había llegado el momento de recoger sus cosas.

Caminó hasta la puerta, con el corazón latiendo fuerte en su pecho, pero su expresión seguía fría. Al llegar, tocó suavemente, pero firme. Asa, desde dentro, respondió con una voz seca.

Te Quiero a Ti (GiP) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora