Durante las clases de Taller los chicos de básquet se pueden dar cierta libertad, para ellos es como un segundo receso y disfrutan de hacer bromas y molestarse entre sí.
—Está de la verga todo ésto del calor.— Comenta Ricardo sudoroso. —Los pinches perros pendejos que están en gastronomía la deben estar pasando de huevos.—
—Esa boquita...— El entrenador Valdés regaña a los que dicen groserías. —Las malas palabras son formas tan tontas de expresión que siempre llevan a conflictos, no les veo utilidad.—
Los chicos lo ignoran mientras siguen en lo suyo, Adrián comienza a explicar cómo fué su primera vez teniendo relaciones sexuales.
—Valla, quisiera ver alguna foto de las tetas de esa chica.— Comenta Aarón intrigado por la historia.
—No era una chica.— Responde Adrián causando desinterés en los chicos que escuchaba.
—¿No te dolió el ano?— Pregunta Paiza.
—Bueno, era difícil sentarse en un principio... ¡No tengo por qué dar explicaciones!—
Adrián regresa a su taller de cocina junto a Limón, Carlos también está ahí saludando a los chicos de básquet.
—Ya me decidí chicos, lo haré.— Dice Carlos planeando algo que tiene pensado hacer con Sol.
—Suerte, recuerda que los carteles y la presión social nunca fallan.— Responde Marban apoyando a Carlos.
—Gracias, pero ya tengo todo planeado.— Carlos se dirige rápido con los de su taller mientras Paiza observa a Carlos con sospecha.
Durante los entrenamientos los chicos se lastimaban y tenían lesiones, cada vez que algo así sucede suelen expresar su dolor y molestia con groserías que poco a poco van estresando al profesor Valdés que sin darse cuenta poco a poco se va hinchando, los adolescentes siguen con sus palabras obscenas e insinuaciones.
"Tu mamá se baña con jabón para perros." "Ah sí, pues tú mamá se baña conmigo." "Bájale de huevo pendejo." "Huevos los que tú hermana me limpió."
—... ¡Por lo menos tengo huevos!...— Exclama Carlos quien siempre tiene una respuesta para todo menos para los exámenes.
—¡Vuelve a tu taller!— Grita Valdés corriendo a Carlos.
Al terminar las clases el profesor Valdés se recuesta en su silla para pensar en todos los insultos y obscenidades que los chicos dicen, piensa sin parar hasta que finalmente haya una solución para que nadie diga groserías; el profesor Valdés llega hasta un barranco con un hoyo muy profundo, decide bajar mientras el escenario se va borrando, deja de ser un plano dibujado a sólo bocetos en blanco que contiene personajes, tramas e ideas desechadas.
—¡Quiero ser canon!— Grita Dulce, el boceto de un personaje que se eliminó de la historia.
El profesor baja hasta ver un brillo peculiar...
MUNDO ALTERNO:
SEBAS: Si intentas romper la cuarta pared, te digo que no es muy original.
VALDÉS: ¿Tienen un lápiz que me presten?
El profesor se propone tachar cada grosería de cada diálogo de cada personaje.
MONTY: No debimos aceptar los dulces del tipo extraño que nos habló en la mañana.
CÓMIC:
A la mañana siguiente el día parece avanzar con normalidad, todo ocurre tan natural para los protagonistas sin saber que algo está sucediendo en el ambiente, Huevo se encuentra caminando con normalidad hasta caer y lastimarse.
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Cómic
HumorPaiza es un chico común de secundaria, solo se preocupa por cosas simples de la pubertad como enamorarse o tener amigos, pero sin darse cuenta se meterá en aventuras absurdas y extrañas, tan irreales como si se tratara de una historia de ficción.