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Reese Weasley


Hice una lista de las cosas que podrían salir mal.

1. Jacob jamás me lo perdonaría.
2. Mis primos jamás me lo perdonarían.
3. Bellatrix ganaría.
4. Probablemente muera.

Luego, hice una lista sobre las posibilidades que tendría si mi plan funcionaba, y conseguía la información para matarlos a todos.

1. Sería libre.

Con ello en mi cabeza, repitiéndolo cada segundo, subí las escaleras hasta la puerta principal de la casa Cullen. En cuestión de segundos, Edward ya me había abierto la puerta.

-. Te tardaste.

-. Oh, lo lamento. Olvidé usar mi super velocidad para venir.- Pasé por su lado, ignorando si había comentado algo más. Solo volví a prestar atención cuando todos los Cullen estuvieron frente a mí.

-. Que alegría saber que estas bien, cariño.- Esme se acercó a mí, estrechándome entre sus brazos. Le correspondí el abrazo.

-. Lamento haber desaparecido así. Tenía que advertirles a todos en Londres.

-. No te preocupes.- Rosalie me sonrió brevemente, mientras el fortachón a su lado me guiñaba el ojo a modo de juego.

Saludé al resto de la familia presente, y una vez mis ojos conectaron con los de Alice, ella comenzó a hablar.

-. La visión que vi no era muy detallada.- Comenzó.- Al parecer, una prima nuestra vino hace unos días sin nuestro conocimiento, y vio a Bella con Renesme. Cree que es una niña inmortal, y nos delató con los Volturi.

Observé a Madre e hija, quienes estaban sentadas no muy lejos de mí. Nessie había crecido en estos días sin la poción, luciendo como una pequeña de año y medio. Podía comprender por qué habrá pensado eso aquella mujer, pues a simple vista si luce como un niño inmortal. Pero era cuestión de acercarse a ella para saber que no lo era.

Renesme es un vampiro. Había nacido con un lado humano, por supuesto, pero en menor medida, siendo absorbido con el tiempo por el lado vampiro, hasta volverla completamente inmortal... O hasta que muera.

-. ¿No hay forma de hacerles cambiar de opinión? Quizás podrían pedir una reunión antes de que la situación acabe en una guerra...

-. Aro no viene a conversar.- Interrumpió Edward.- Él solo está usando esto como una excusa para acabar con todos nosotros.

-. Quiere matarme, Reese.- Expresó el doctor.- Y esta es la excusa perfecta para que lo haga, y así obtener a Alice y Edward a la fuerza.

Sabía todo eso. Mas todavía esperaba algo de esperanza con respecto a la guerra que se acerca en nuestra contra.

-. Vendrá con testigos, desconozco cuántos, pero quiere que la condena se exprese en todo el mundo.- Continuó Alice.- Incluso en el mundo mágico.

-. ¿Lo dices por Bellatrix?

-. No está sola, Reese. No se quiénes son las personas que vi en mi visión, pero todos estaban fúricos, y buscaban tu muerte.

Asentí, sabiendo que lo más probable es que fueran mortífagos ocultos. Bellatrix no tenía más aliados, y no cualquier mago se uniría a ella sabiendo lo estrictas que están las leyes ahora en el ministerio.

-. De acuerdo.- Asentí repetidamente.- Un grupo de vampiros sanguinarios y unos magos completamente desquiciados... Nada nuevo, ¿no?

Traté de bromear, más ninguno me siguió el juego. Ni siquiera Emmet.

Fascinated¹ | JACOB BLACKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora