-¿Qué te pasa, Martin? Estás como en otro planeta- me pregunta Denna, cuando la canción termina.
Llevamos ya algunas semanas quedando algunas tardes para bailar. La verdad es que me ha ayudado bastante a mejorar mi técnica de baile, pues el año pasado apenas pude practicar entre clase y clase, pues además no tenía un lugar donde hacerlo cómodamente. Mi habitación no era siquiera una opción. Pero por fin este año puedo bailar libremente.
Pero es verdad que esa tarde estoy bastante diperso, pues solo puedo pensar en una persona en concreto, preguntándome como se encontrará, si habrá dormido bien, si ya habrá ido al hospital, que habrá dicho Ruslana. A pesar de ser lunes, hoy no ha venido a clase en toda la mañana, o eso creo, porque no se ha pasado por clase para hacer el proyecto. Incluso Abril me a preguntado si estaba bien, y yo le he tenido que poner la primera excusa que se me ha venido a la cabeza.
Aunque supongo que se habrá quedado en su casa descansando, tampoco tenía muchas esperanzas de que viniera está mañana. Y tampoco creo que venga en unos días, pues se tiene que recuperar. Demasiado bien estaba el ayer.
-Sí, sí. Perdona, solo estoy algo cansado de finde.
-Uyyyy, ¿Y eso? ¿Con quien lo has pasado?- me pregunta, levantando y bajando las cejas, divertida.
No puedo enviar que las mejillas se me pongan rojas.
-Con nadie- miento descaradamente. Pero se que me ha calado en cuanto las palabras han salido disparasxde mi boca como dos balas.
-Mentira- me pone un dedo en el pecho, acusatoriamente, mirándome desde bajos con ojos entrecerrados- Tú lo has pasado muy bien con alguien.
A ver, parte de razón tiene. Lo he pasado con alguien, pero bien, bien, a lo que se refiere con bien, pues no la verdad.
-Que dices, que no, que yo no- empiezo a soltar estupideces por la boca al ponerme nervioso- que yo lo he pasado solo viendo películas- ese había sido mi plan inicial.
-Bueno- rueda los ojos- lo que tú digas. Pero que sepas que no te creo, pero te dejo en paz porque soy súper buena amiga.
Comienza a recoger todo, aunque me parece extraño porque es más pronto de lo normal. De todos modos, yo la copio.
-No es por ser aguafiestas, pero he quedado con Alex (su novio) y no quiero llegar tarde. Ya nos vemos otro día y me cuentas quién es ese chico misterioso.
Dejamos la conversación ahí porque enseguida sale por la puerta prácticamente corriendo.
Yo en cambio, me tomo mi tiempo para ducharme, secarme y vestirme. Luego me dirijo hacia casa, pensando en si pasarme por casa de Ruslana para ver cómo está el lisiado. Pero decido que no, tampoco quiero agobiarle si ya le vi ayer. Seguro que se piensa que soy un psicópata o algo por el estilo. Aunque... Lo que si podría es enviarle un mensaje, así simple, tipo "qué tal estás" o algo así. Eso no es molestarle, ¿No? Solo un sutil mensaje. Seguro que no. Además, si no quiere contestarme, no tiene por qué hacerlo.
Martin: como te encuentras hoy?
Guardo el móvil en el bolsillo tras enviarle el mensaje, no queriendo petarle. En cambio, me pongo los cascos y voy escuchando música tranquilamente de vuelta a casa.
Y una vez allí, me pongo a adelantar el trabajo con Juanjo, que llevamos como el culo, pero bueno además de otras cosas más.
Y no me responde en toda la tarde. Ni al día siguiente, ni al otro. Y es entonces cuando me empiezo a preocupar. ¿Y si se ha quedado inconsciente en medio de su habitación y nadie lo sabe? No, imposible . Ruslana no permitiría que eso pasará, la conozco y se a va a estar atenta de él en todo momento. Que no le va a dejar solo en prácticamente ningún minuto del día.
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Entrevistándote a besos - Juantin
RomanceMartin comienza su segundo año de periodismo con la misma ilusión que el anterior. A eso se le suma que sus padres, finalmente, le han dejado ir a la escuela de baile de sus sueños. Lo que no se espera es reencontrarse con su amor platónico de la in...