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Después de cuatro días desde que comenzaron las clases, Youngsoon se encontraba en su habitación, con el teléfono en una mano y una taza de té en la otra. Estaba hablando con su madre, una mujer fuerte que había criado a Youngsoon sola desde que su padre las abandonó cuando ella tenía solo cuatro años. La ausencia de su padre siempre había sido un tema doloroso, pero con el tiempo, madre e hija habían aprendido a apoyarse mutuamente, creando un fuerte vínculo.

-Amá, te tengo una noticia-dijo Youngsoon con una sonrisa mientras se acomodaba en su cama.

 A través de la línea, podía imaginarse a su madre, siempre ocupada pero siempre atenta, deteniéndose un momento para escucharla.

-¿Qué pasó, mi niña?-respondió su madre, con ese tono cariñoso que hacía que Youngsoon se sintiera inmediatamente reconfortada.

-Conocí a unas chicas nuevas en la universidad, bueno mejor dicho, en el aeropuerto.Son geniales, y me invitaron a una carrera de autos a las afueras de Seoul esta noche,como es viernes no cae en horario escolar-explicó con entusiasmo-Pensaba que sería divertido ir, ¿qué te parece?

Hubo un breve silencio en la línea, y Youngsoon pudo escuchar el leve suspiro de su madre. Sabía que, aunque su madre siempre la había apoyado en todo, el hecho de que Youngsoon se aventurara en algo nuevo la llenaba de una mezcla de orgullo y preocupación.

-Me alegra mucho que estés haciendo nuevas amigas-respondió su madre finalmente, con una calidez que Youngsoon siempre había apreciado-Es importante que te rodees de personas que te hagan sentir bien. Pero cuídate, ¿sí? Las carreras pueden ser peligrosas.

Youngsoon sonrió, sintiendo un alivio al saber que su madre estaba de acuerdo.

-Lo sé, mamá. Tendré cuidado, te lo prometo. Además, Eunmin y Soojin son responsables. Será solo para ver, no voy a correr ni nada.

Su madre soltó una pequeña risa.

-Eso espero. Y ya que tienes planes, ¿por qué no pasas por alguna tienda y te compras algo bonito para la ocasión? Hace tiempo que no te das un gusto, y te lo mereces.

Youngsoon no pudo evitar que su sonrisa se hiciera más grande.

-¿De verdad? ¡Gracias, mamá!

Cuando Youngsoon se dispuso a levantarse para coger su bolso y salir a coger el autobús, su teléfono vibró inesperadamente en la mesa de noche. Miró la pantalla y vio una notificación que la sorprendió. 

Un nuevo grupo de chat había sido creado, titulado "Las Samuráis", con diez miembros, todas chicas. El grupo había sido creado por el número +654892121, lo que le hizo sonreír.

-¿Pasa algo, corazón?-preguntó Miriam, su madre, quien aún continuaba en la llamada que no había colgado su hija.

Youngsoon lmiró al teléfono fijo donde estaba en llamada con su madre.

-Tranquila, mamá. Son solo mis nuevas amigas. Han creado un grupo.

Miriam asintió con una sonrisa maternal.

-Bueno, ten cuidado, ¿vale?-dijo con un tono protector, aunque estaba visiblemente contenta de que Youngsoon estuviera socializando. 

Youngsoon desbloqueó el móvil para ver que tenía 123 mensajes nuevos en el grupo. Sus amigas, estaban sumergidas en una discusión animada sobre qué conjuntos llevar para la carrera de por la noche.

El grupo estaba alborotado:

[Soojin 🐯]: Chicas, ¿están listas para el fin de semana? ¡La carrera nos espera!

WOULD YOU KISS MEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora