WOULD YOU KISS ME

14

El reloj marcaba las 8:00 de la mañana, y la luz suave del amanecer se colaba por los ventanales de la escuela, iluminando los pasillos mientras los alumnos recogían sus maletas y preparaban su regreso a casa tras la fiesta de pijamas del fin de semana. Las voces eran una mezcla de risas, conversaciones animadas y el sonido de maletas rodando por el suelo. 

Jihyun caminaba al lado de Youngsoon, con la mente aún perdida en los eventos de la noche anterior. La tensión entre ella y Niki seguía fresca en su memoria, esa mezcla de nerviosismo y deseo que la había invadido.

-¿Tienes todo?-preguntó Youngsoon, acomodando su mochila en el hombro.

-Sí, creo que sí-respondió Jihyun, mirando hacia el frente mientras cruzaban el pasillo. Pero algo llamó su atención. 

Un murmullo inusual empezó a propagarse entre los alumnos que pasaban. Se escuchaban risitas disimuladas y miradas furtivas dirigidas hacia ella. Jihyun frunció el ceño, confusa.

-¿Qué pasa?-preguntó inquieta, mientras sentía que más miradas se clavaban en su dirección. Era como si todos supieran algo que ella no.

Youngsoon, preocupada por el repentino cambio de ambiente, sacó su teléfono, revisando rápidamente las redes sociales. 

Un nudo en el estómago se formó cuando vio una historia en Instagram que decía: "Cayó en la trampa", acompañada de una foto que mostraba claramente a Jihyun y Niki besándose la noche anterior en las escaleras de emergencia. La imagen estaba acompañada de un emoji burlón, y parecía que ya todos los alumnos lo habían visto.

-Mira esto-dijo Youngsoon, girando la pantalla del móvil hacia Jihyun.

Jihyun sintió como si el mundo se desmoronara a su alrededor. Se quedó paralizada al ver la foto, sus ojos se agrandaron y su respiración se hizo más pesada. Su corazón latía rápidamente mientras se llevaba una mano a la boca, incapaz de contener las lágrimas que se acumulaban en sus ojos. El nudo en su garganta hacía que cada respiración fuera un esfuerzo doloroso.

-No... no puede ser-murmuró con la voz entrecortada-No había nadie esa noche.

Los murmullos crecían a su alrededor, como una tormenta inminente. Las risas ahogadas, los susurros, todos señalándola como si fuese el chiste del día.

 Jihyun, desbordada por la vergüenza y la humillación, intentó contener el llanto, pero sus ojos se llenaban de lágrimas. Sentía como su confianza, ya frágil, se rompía en mil pedazos.

Youngsoon, furiosa al ver a su amiga destrozada, apretó los dientes y su mirada se oscureció de inmediato. Se giró en busca de la fuente de todo esto, y no tardó en encontrar a Jake y su grupo, riéndose descaradamente cerca de las taquillas, satisfechos con su "broma".

-Quédate aquí, Jihyun. Yo me encargo-dijo con determinación, mientras dejaba su mochila en el suelo y avanzaba con paso firme hacia ellos. 

Los alumnos, al ver su furia, empezaron a seguirla, expectantes de lo que iba a suceder.

Jake y Niki estaban juntos, rodeados por su grupo de amigos, cuando Youngsoon llegó hasta ellos. Sin mediar palabra, levantó la mano y le dio una bofetada a Jake, tan fuerte que el sonido resonó en todo el pasillo. Jake quedó atónito, llevándose una mano a la mejilla enrojecida, sin comprender del todo lo que acababa de pasar.

Niki, quien estaba justo al lado, también recibió una bofetada, aunque la suya fue más simbólica, como un golpe de advertencia.

 Sus ojos se encontraron brevemente con los de Youngsoon, y por un segundo, pareció que estaba a punto de decir algo, pero el aura de ira que desprendía Youngsoon lo hizo callar.