¡Holaaaaaa! se que dije que no les traería extras pero se me apeteció escribirles uno, espero lo disfruten.
POV MORGAN
—¿Entonces como es Costa Rica?—pregunto a través del teléfono a Allison, apenas y puedo escucharla por el fuerte ruido a su alrededor, al parecer esta escuchando música.
—¡Precioso! ¡Ojala pudieras verlo Morgan!—grita para que la escuche—, el calor es insoportable pero de allí todo bien ¿Cómo están todos por allá?
Sonrió.
—Estamos bien, muy bien—digo llenando la pequeña calabaza con todo tipo de dulces, Aiden exagero al comprar tantos—, todo por acá es una locura.
—Me imagino que si—la escucho soltar una risita—, me encantaría seguir hablando contigo pero olvide que puse a hervir agua y huelo a que se me esta quemando ¡dale un beso a Chelsea de mi parte!
Y cuelga.
Nuestra llamada no duro ni dos minutos, me siento indignada.
Esa peliazul me tiene olvidadísima pero como culparla si se esta dando la vida grande viajando por todo el mundo, la idea suena tentadora pero por nada cambiaria mi presente y eso lo tengo mas que claro.
Termino de rellenar todo con los dulces y saco unas pequeñas galletas naranjas del horno, huelen deliciosas.
Veo el reloj colgado en la pared, ya durmió mas de dos horas así que llego el momento de despertar a ese pequeño terremoto.
Subo a nuestra habitación ya que sus siestas suele descansarlas en la cama de su padre y yo rodeada de muchas almohadas para que no se caiga. Enciendo la lampara al sentarme en la cama y lo primero que escucho es un gruñido.
—Chelsea...—susurro su nombre mientras doy un pequeño pellizco en sus piernas gorditas—, ya dormiste lo suficiente mi amor.
Mi preciosa hija que duerme con el mero pañal puesto estira sus brazos quejándose.
—No mami, yo mimir mash—dice girándose boca abajo dejando su traserito levantado, aprovecho para palmearlo suave.
—Pero si sigues durmiendo vas a perderte los dulces—jaaaa, al escuchar esa ultima palabra su cuerpecito se remueve sentándose, su rojo cabello rebelde como el de su padre apunta a todas partes mientras sus ojitos verdes se abren lentamente.
—¿Dulches?—pregunta y yo asiento.
—Estas de suerte porque hoy dejare que los comas—me regala una sonrisa soñolienta y me es imposible no tomarla en mis brazos para dejar muchos y muchos besos en sus mejillas llenas de pequitas que me encantan ¿Cómo es posible sentir tanto amor por alguien tan pequeño? aun me parece irreal la forma en la que la amo, sin duda es mi complemento.
—Shi mami, yo quiedo un duche de uva, uno de flesa y uno de limo—dice enumerando sus deditos algo que me parece completamente adorable—, muchos dulches.
Asiento a todo lo que dice.
—¡Ya llegue mujeres de mi vida!—escucho la voz de Aiden entrar a la habitación y casi me voy de culo al suelo con todo y bebe en brazos al verlo. Lleva un traje negro con finas lineas blancas, se ha colocado un bigote falso y una horrenda peluca negra con peinado de nalga haciéndolo ver espantoso—, ¿Listas para Halloween?
Lo veo acercarse aterrada mientras Chelsea lo analiza como descifrando si es su padre o no.
—¿Qué mierdas llevas puesto?—digo mientras toma a Chelsea en brazos que lo mira con un puchero interrogatorio, intenta darme un beso en los labios pero me alejo, no dejare que ese bigote me toque.
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Fingiendo ¿Amor?
RomanceSoy Morgan Adams y sin duda soy la típica chica cliché que no cree en el amor, la idea de enamorarse me parece algo sobrevalorado que lo único que hace es causar disturbios en la paz mental de las personas, es por ello que durante toda mi vida e int...