Pov Morgan
—Morgan necesito que te tranquilices porque me estas preocupando—dice Mason arrodillado frente a mi—, estas demasiado pálida, solo respira ¿si?
Lo escucho pero no logro entender lo que pide.
—Es como si estuviera ida ¿podemos buscar a un doctor?—reconozco la voz de Alvin a mi lado—, podría buscar uno.
—No—los detengo, es la primer palabra que digo en las horas que hemos pasado en este maldito hospital donde no nos han dicho nada de la salud de Aiden, necesito saber como esta—, no.
—Entiende que estamos preocupados por ti, se que lo de Aiden te tiene devastada pero necesito que este cuerda ¿puedes hacer eso por mi?—Mason acaricia mi rostro apartando los mechones que se me han pegado por las lagrimas derramadas—, el estará bien Morgan.
—Aiden es muy fuerte—dice Alvin pasando su brazo por mis hombros, lo veo de reojo—, el se pondrá muy feliz cuando despierte, cuando te vea aqui y vea que viniste a buscarlo.
Inconscientemente sonrió.
Que este bien es lo único que pido.
Veo al entrenador acercarse con un rostro de preocupación, se detiene frente a nosotros.
—Nadie quiere decirme nada, al parecer el esta en cirugía y solo darán respuesta a su familiares—dice un poco molesto.
—Y sus padres...—digo.
—Tranquila que ellos ya vienen en camino, los Donovan son personas con poder así que llegaran pronto a Brasil—nos informa.
—Ese hijo de puta pagara por lo que le hizo a mi amigo —dice Alvin molesto hacia su entrenador.
—Fue un golpe demasiado sucio, lo han hecho a propósito y supongo que los padres de Aiden sabrán que hacer al respecto, yo hare todo lo posible para que esto no se quede así—los 3 asentimos y luego el se aleja.
Los recuerdos vuelven a llegar a mi mente al ver la sangre teñida en mis manos.
Su sangre.
—Joder Morgan vamos a limpiarte, no te hagas ese daño—Mason me levanta de la silla y me lleva hasta un baño donde limpia mis manos y parte de mi camiseta manchada, mi cuerpo se vuelve agua así que término llorando en su hombro pidiéndole a quien sea que tenga que pedirle que por favor este a salvo.
Transcurre como una hora tortuosa donde me mantengo en un rotundo silencio antes de que una pareja aparezcan por los pasillos bastante preocupados, se que son los padres de Aiden al ver el parecido con su padre y el color característico del cabello de la mujer, un rojo tan brillante como el de su hijo.
Llegan hasta nosotros que nos mantenemos sentados junto al entrenador quien se pone de pie al instante en el que los ve.
—¿Cómo esta mi hijo?—pregunta ella, una mujer bastante joven y bien cuidada, destila elegancia por donde sea—, ¿Qué ocurrió? ¡Donde esta!
—Tranquila Aine, debes mantener la calma—le dice el hombre a su lado quien trata de calmar su alteración.
—¿Ustedes son los padres del joven Aiden Donovan?—pregunta una doctora vestida con un traje quirúrgico.
—Si somo nosotros—responde el señor Donovan tomando la mano de su esposa.
—Un placer soy la doctora que recibió a su hijo al llegar al hospital, según los informes y revisiones el joven Donovan llego con mucha perdida de sangre a demás de una severa inflamación luego de recibir un fuerte impacto que abrió una pequeña fisura en el costado de su cabeza—todos la escuchamos atenta, mis manos comienzan a temblar—, su pulso era débil y por un momento creímos que lo perdíamos pero el chico es fuerte y supo dar batalla manteniendo su corazón fuerte para la cirugía, tuvimos que intervenirlo de emergencia para revisar que todo estuviera en orden pero lamentablemente la hemorragia no fue solo externa, internamente comenzó a formarse una hemorragia craneal muy difícil de tratar porque si esta tocaba el cerebro Aiden moriría.
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Fingiendo ¿Amor?
RomanceSoy Morgan Adams y sin duda soy la típica chica cliché que no cree en el amor, la idea de enamorarse me parece algo sobrevalorado que lo único que hace es causar disturbios en la paz mental de las personas, es por ello que durante toda mi vida e int...