CAP 29: Captura sin camara

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Soundtrack: TIMØ - Quédate

CAPITULO 29: Captura sin cámaras.

AUSTIN PROUM:

Me apoyo en uno de los costado de la enorme entrada del hotel, observando el cielo tan despejado de Santorini y suelto un suspiro con una sonrisa, no se si de enamorado, pero sí de alivio.

La charla con Emma me habia dejado debilitado en un buen sentido de ver cuanto amor puede haber si dos personas se lo proponen, impresionado por la gran persona que ella es y relajado de por fin haber sacado ese gran secreto de mi conciencia. Una vez escuche que cuando algo mas miedo te da, es porque mejor es el resultado y por eso debía arriesgar.

—Te van a salir corazones en los ojos, Proum —Me giro encontrándome a Jeremith. Desde que ingreso al equipo tomamos la costumbre de llamarnos por nuestros apellidos—. Mas te vale cuidar a mi mejor amiga o te mostrare que a veces se me quita lo razonable.

A pesar de que sus palabras son firmes y su mirada directa, el tono de su voz es igual de amable que siempre. Desvió la mirada con una sonrisa que no logro contener, al fin y al cabo, me están relacionando con Emma de esa manera.

—Creí que la temperamental era Martina —Reímos los dos.

—Lo es —Él se me queda mirando—. Debería tomarte una foto y mandársela a Alan.

—No es necesario, creo que cuando vuelva seguiré con la misma cara de enamorado.

Jeremith abre sus ojos sorprendido no solo por mis palabras, sino también porque seguramente tengo las mejillas rojas. Por muy confiado que sea, el amor verdadero acelera el corazón y sonroja.

—¡Austin Proum! —Exclama una voz detrás de nosotros—. Dime que esa sonrisa es por la hermosa Emma.

—Esta sonrisa es por la hermosa Emma —Le contesto, imitando su acción de batir las pestañas.

Martina toma del brazo a Jeremith y suelta un chillido que me aturde, pero Simpson sigue con la cara de tonto enamorado que siempre. Ruedo mis ojos y les hago un ademan para que me dejen en paz, Martina niega con sus ojos achinados y traviesos.

Nos quedamos en silencio un rato y de pronto, su amenaza me recuerda a la que me dio mi primo hace algunos meses atrás cuando recién empezaba a hablar con la pelirroja.

—Oye, Simpson —El rubio arruga su nariz con intriga—. ¿Desde cuándo conoces a Emma?

—Desde el primer año de Secundaria. Ella era la vestuarista de la obra de teatro en la que participábamos Alan y yo, y aunque lo primero que hicieron ellos fue pelear, Alan fue quien la defendió de los niños que se burlaban de ella —El recordó todo, pues profiere una de sus extrañas risas ahogadas—. Desde ahí estamos juntos.

—Me parece terrible que tu no hayas ido a proteger a Emma de esos maleantes —Bromeo.

—Primero esos "Maleantes" tenían doce años—Hace comillas con sus dedos— y segundo, todo me daba vergüenza, a duras penas pedía permiso para ir al baño y por eso sufrí de una infección urinaria.

Frunzo mi ceño y Martina le da llamaditas de apoyo en su espalda. De lejos una risa me hace voltear, es Emma enganchada del brazo con Miley.

—Ese día lo llevaron al hospital, lo visitamos y para que no se sintiera avergonzado, mi papá lo llevo en la patrulla —Jeremith se pone rojo y aprieta sus labios—. Desde ese momento Alan y yo le preguntábamos si quería ir al baño.

Oww —Miley hizo un puchero—. La unión que ocasiona un infección urinaria es increíble.

Todos nos echamos a reír y sin mas empezamos a caminar lejos del hotel, ese día habíamos decidido ir a turistear por algunos lugares, comer Gelato y comprar recuerdo para nuestras familias sin el resto de los invitados que vinieron a la espectacular fiesta de Martina.

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