Solo Una Apuesta Más

CAP 15: Papá

CAPITULO 15: Papá

AUSTIN PROUM:

—Te ves cansado —Karam palmea hombro antes de trotar hacia el balón y patearlo con esa gracia de siempre— ¿Cómo te fue en la inauguración del restaurante de tu tío?

—Termine consolando a mi primo —Suelto un bostezo. Ahora es mi turno de correr a la pelota y darle. Al contrario de Karam, yo pego con mucho impacto—, creo que dormí como tres horas nada más.

—Pero eso es bueno ¿No?

El entrenador da por terminada la serie de ejercicios y ambos caminamos a la zona de hidratación, allí dos personas del equipo de trabajo nos entregan dos toallas con el logo del equipo y de la hielera sacan dos botellas de electrolitos.

—¿Por qué lo dices?

—Bueno, antes no podías ni voltear a ver a Alan, ahora lo cuidas.

—Si, es algo bueno —Susurro

No puedo evitar sentirme avergonzado por ello. Mi primo no tiene la culpa de absolutamente nada y yo le hui como mi mayor enemigo con mucha envidia por el gran chico que es y que yo no soy, (Por lo menos yo tengo una razón) pero en realidad, la única culpable es mi madre.

"Los miedos que te causa alguien no puede crear juicios contra otros"

Papá tiene mucha razón con cada consejo. Aunque debo aceptar que Emma es una gran influyente en eso, supongo que puedo llamarlo el mayor acto de amor que he hecho, dejando mi rencor o envidia de lado e ir pidiendo ayuda a mi primo o simplemente un descarado en totalidad, sea lo que sea, mi cariño por mi primo nunca se fue, aunque mi mamá me haya envenenado.

—Por cierto —Karam es realmente grande y musculoso, por ende, me veo obligado en alzar la cabeza—, gracias por cuidar a Jack.

Odio dejar a Jackson solo, pero por un lado mi tío me invito especialmente a la apertura de su restaurante y por otro, quería ver a Emma, luego de nuestra cita no nos habíamos visto en casi dos semanas y eso para mí fue una tortura. Estoy perdida por ella.

—Lo que sea por ese niño, es tan educado —Mi amigo pone sus manos en sus mejillas enternecido con la imagen en su mente de mi hijo. Si, puede parecer hércules, pero por dentro tiene un corazón hecho de algodón de azúcar—. Eres un buen padre

—Gracias.

Mis piernas me gritan que tome asiento en las gradas del campo de entrenamiento y la atenta mirada de los múltiples entrenadores y preparadores físicos me lo prohíben.

—Me dijeron que te tomaras unos días libres.

—Si, mis padres vienen de Arabia, quiero pasar tiempo con ellos.

Cuando conocí a Karam, apenas se estaba independizando. El nació en la ciudad, sin embargo, luego de muchos años, sus padres decidieron volver a su lugar de origen, una ciudad en Arabia y a pesar de que el chico no nació por aquello lares, sus rasgos asiáticos se mantienen intactos desde niños.

—Ahora necesitare otro defensa

Examino al equipo por un segundo pensando en las nuevas posiciones para el próximo partido.

—Pon a Robert, es tan grande como yo

El chico, que parece mas jugador de basquetbol que de futbol, pasa por nuestro lado serpenteando la pelota sin tocar ningún cono.

—¿Y el delantero? Debo pasarle los pases a alguien.

—Yo creo saber quién —Susurra— ¡Genial, Simpson! ¡Eso fue un gran gol! —Jeremith alza su pulgar hacia Kai como un agradecimiento y esa es la respuesta a mi duda—. Parece mentira ¿Verdad?