Lindo pasado

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Nana no supo cuánto tiempo tuvo la boca abierta, sus ojos no acreditaban lo que veía. El joven Chanyeol estaba tendido sobre una cantidad indescifrable de toallas de papel, abrazando posesivamente a la nueva «empleada» ambos tenían las frentes juntas, y sus narices rozándose. Y Lana estaba acurrucada sobre el pecho de Chanyeol. Se veían muy tiernos juntos.

Ella estaba estupefacta, Chanyeol desde muy pequeño siempre fue huraño y de mal carácter, pero ahora se veía tan pacifico, tan blando... esa expresión en su rostro, le recordó tanto a...

— ¿Nana? — El dueño de la casa, asomó su cabeza desde su habitación. — ¿Qué haces ahí? —Taekyung camino hasta ella, preocupado.

—No, no, no... usted vuelva a su habitación. — Miro a intervalos la escena de Chanyeol y a Taekyung, y algo en ella decía que debía protegerlos.

—Mmm, no. — Tae entrecerró los ojos, divertido. —Ahora estoy muy curioso por mirar eso que veías con cara de...— E imito chistosamente la expresión de Nana.

Cuando el hombre alto estuvo considerablemente cerca, aun riendo por la cara de Nana, ella sonrió forzadamente, empujando levemente el pecho del Sr. Park, animándolo a volver a su habitación.

Una sonrisita traviesa se dibujó en las comisuras de Taekyung, tomando ambas muñecas de Nana apegándola a su pecho.

— ¿Qué sucede, Nana? — Preguntó con un toque de gracia.

Nana, parpadeo perdido en esa mirada castaña y esa sonrisa de medio lado. —Es, es solo... — Tartamudeo, intentando hilar pensamientos.

"Nana, no es hora de enloquecer, piensa..."

Suspiró, se arrepentiría de esto más tarde.

Se abalanzo sobre el Sr. Park antes de que el pudiera ver lo que ocurría en el cuarto de limpieza, lo abrazo pasando sus brazos y juntándolos tras su nuca, escondiendo su rostro en el hueco del hombro y el cuello. Se sentía muy estúpida, solo esperaba no ser vista por nadie.

A Taekyung la sonrisa se le cayó al suelo, cuando sintió a Nana tan cerca, su cuerpo había quedado inmóvil, torpemente llevo sus manos temblorosas a su cintura afirmando el agarre. Aún seguía sorprendido.

—No lo sabe Sr. Park, era tan peludo y horrible. — Actuó ella. —Era horrible lo juro. — Lloriqueó falsamente en un intentando por distraer Taekyung. —Y, y... bajaba del techo, fue aterrador.

El castaño asintió a cada palabra, acariciando su cabello.

Había sido mucho tiempo desde que había tenido a Nana entre sus brazos, tanto tiempo...

[Flashback]

Nana llego a la mansión de los Park, a la edad de quince años. Los señores de la casa tenían un pequeño hijo, Taekyung, y este había quedado a su cargo hasta que sus padres regresaran de sus continuos viajes de trabajo.

En un principio fue imposible lidiar con ese niño de no más de nueve años, pero cuando el tiempo pasó, Taekyung se hizo más amable con ella, y con las otras empleadas. Pero Tae, se había hecho mucho más cercano a Nana, creando así una linda relación: «amo» «empleada.»

Recordaba lo lindo que era Taekyung, en realidad era un niño con mucho aeygo, y no dudaba en utilizarlo cuando quería algo. Pero era también muy bondadoso, él le había enseñado a Nana cómo jugar ajedrez, y no se portaba mezquino cuando se trataba de sus libros y juguetes, ya que todos se los ofrecía a Nana, la pequeña empleada los recibía todos con una sonrisa agradecida, pero cuando Tae dormía, ella los acomodaba de nuevo en su lugar.

~My Sexy Maid; Undercover Operation~ |EXO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora