~My Sexy Maid; Undercover Operation~ |EXO|

Estimulo nocivo

Mansión Park |9: 15 am|

Chanyeol despertó, sus sentidos regresaban a su cuerpo suavemente. Escuchó el murmullo de su despertador y se removió sobre la cama sobándose la cabeza.

—Mierda...— Se sentó.

Esperó a que el mareo pasara y abrió los ojos encontrándose en su habitación. Notó algunas botellas en el suelo. Viró los ojos imaginándose que le había seguido de la fiesta de ayer, al parecer no había sido una gran idea después de todo.

Caminó aun tambaleándose hasta su cuarto de baño, se quejó por el dolor repentino en su cabeza y llevó su mano rápidamente intentando calmar el dolor.

"¿Por qué...?" Observó su mano con una mueca en el rostro.

¿Tenía un chichón?

Bufó exasperado y se metió a la ducha.

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—La, la, la... pero que asqueroso día tendré hoy...— Canturreó Lana empujando un carrito de limpieza por el pasillo. Estaba cargado de ropa y baldes de lata, se veía lo suficiente pesado cómo para una chica común, pero recordemos que no era común o chica.

Suspiró echándose el cabello hacia atrás. La imagen de su mejor amigo desgarrado por el llanto aún no se largaba de su mente. Nunca había visto a Kyungsoo tan hundido como esa noche, no después de la muerte de esa chica...

— ¿Puedes sola con eso... cariño? — Pregunto con burla evidente, Chanyeol.

Lana se dio vuelta encontrándose con el tipo idiota apoyado en la pared continua, de brazos cruzados y sonrisa lasciva.

Levantó las comisuras forzadamente, regalándole así una sonrisa hipócrita.

—Descuide, puedo con esto... Y mucho más. — Murmuró la última parte, poniendo en marcha el carrito.

Chanyeol asintió.

"De eso estoy seguro."

Se impulsó hacia adelante y caminó hasta tenerla enfrente.

—No es adecuado para una mujer. — Susurró detrás de su oreja. Rodeó su cintura para así poder empujar el carrito.

Lana se tensó al instante, al sentir el cuerpo del alto contra el suyo, tan de repente.

— ¡¿Qué estás—?! — Chilló, pero tuvo que cerrar la boca en ese instante, porque Chanyeol le había mordido la oreja. Joder, se había sentido tan bien. Contuvo el jadeo en su garganta y apretó sus manos contra el tubo del manubrio.

—No me hagas obligarte. — Murmuró de forma terrorífica. —Sólo mueve ese lindo trasero, ambos sabemos de lo que hablo.

Baekhyun maldijo el maldito día en que Chanyeol fue engendrado. Sin replicas y mordiéndose la lengua se echó andar con el tipo que menos quería ver detrás suyo, muy cerca.

Jodido día que estaba teniendo.

"¿Qué tramas, bastardo pervertido?"

Se lo había estado preguntando desde la última vez de Lee Baekhyun. Nadie más sabía acerca de su identidad, Nana parecía más concentrada en la comida que en él. Eso era aterrador.

Si ese bastardo no se lo había dicho a nadie... ¿Qué quería a cambio?

Chanyeol desvió la vista del frente para mirar hacia abajo. La chica estaba muy concentrada en sus pensamientos, pero se veía realmente guapa ese día. Observó desde arriba sus facciones perfectas y sus pestañas... sus pómulos también eran bonitos.