El amanecer rompía suavemente a través de las cortinas, iluminando la habitación con una luz tenue y acogedora. Faye fue la primera en despertar, su cuerpo aún cansado por la agitada noche anterior. Se estiró despacio, recordando con una sonrisa lo tarde que habían terminado.
Miró a su lado y vio a Yoko dormida plácidamente, su delicado cuerpo desnudo cubierto apenas por la sábana. Su respiración era lenta y tranquila, y su cuello aún mostraba las marcas de la pasión de la noche anterior. Faye no pudo evitar sonreír al verla tan en paz, sabiendo que había sido una noche especial para ambas.
Sin querer despertarla aún, Faye se levantó en silencio y se dirigió a la cocina para preparar el desayuno. Optó por algo ligero: tostadas con frutas frescas y un par de tazas de café, el desayuno ideal para comenzar un día lleno de responsabilidades. A pesar del cansancio, Faye se sintió satisfecha al poder cuidar de Yoko incluso en esos pequeños detalles.
Cuando terminó, regresó a la habitación y, con una suave sonrisa, se inclinó hacia Yoko para despertarla.
—Princesa, despierta —murmuró suavemente—. Te traje el desayuno, vamos.
Yoko se removió bajo las sábanas, despertando lentamente. Hacía pequeños sonidos tiernos mientras se desperezaba, su rostro mostrando una expresión somnolienta pero contenta. Al abrir los ojos, su mirada se encontró con la de Faye, y una sonrisa soñolienta apareció en sus labios.
Después de disfrutar juntas del desayuno en la cama, compartiendo pequeños momentos de complicidad, cada una se dispuso a comenzar su día. Yoko tenía grabaciones pendientes para su podcast, mientras que Faye debía volver a su rutina de entrenamientos y reuniones con su equipo de tenis.
A pesar de las obligaciones que les esperaban, ambas sabían que al final del día se tendrían la una a la otra, y ese pensamiento las acompañaría durante todo el día, dándoles fuerzas para enfrentar cualquier desafío.
ESTÁS LEYENDO
AMOR EN EL JUEGO Y EN EL AIRE
FanfictionFaye Peraya, una tenista profesional de 29 años, ha dedicado toda su vida a la competición, alcanzando la cima de su carrera con determinación y disciplina. Sin embargo, su vida personal siempre ha quedado en segundo plano. Todo cambia cuando Yoko A...