Hoy Y Siempre // Kivi OT 2023

Capítulo 46: poder encontrarla

Habla Chiara:

21:21 pm

Dos toques en la puerta con mis nudillos y un "adelante" de la psicóloga hacen que mi cuerpo empiece a temblar de los nervios.

Estoy cagada.

¿Cómo se supone que viniendo con la psicóloga voy a arreglar lo que soy incapaz de hablar con mis amigos porque sé que si lo hago, me derrumbo?

- Hola Chiara, siéntate guapa. - el entusiasmo y la amabilidad en su tono de voz calma cierta parte de mis nervios.

- Hola. - musito antes de sentarme en el sofá gris que hay en la habitación.

Qué irónico, toda la academia está decorada de azul, pero llegas a un sitio en el que deberías alejarte de tus problemas y los colores son tristes. El gris, azul oscuro y negro prevalecen aquí.

- ¿Por qué estás aquí? - cuestiona colocándose las gafas, con la libreta en su regazo y el bolígrafo entre su dedo índice y su dedo corazón, todo muy milimétrico.

Me estresa.

- Quiero aprender a estar bien conmigo misma. - respondo directa, quitándole todo el hierro al asunto. Como si aquello no fuese lo más importante que está pasando.

Ya llevo dos semanas sin Violeta y siento como, cada día, el mundo se me echa más encima. He perdido ya la esperanza en poder recuperarme a mí misma, aunque eso no es lo peor, lo que más me duele de todo es saber que, por mucho que lo intente, mis ganas por recuperar a Violeta también van disminuyendo constantemente.

- ¿Con qué quieres estar bien? - pregunta tras haber anotado algo en su libreta. Intento alongarme para verlo, pero queda en un nulo intento cuando ella me pilla, acerca la libreta a su pecho y me dirige una mirada autoritaria, haciendo que me recoja en mi sitio y entrelace las manos sobre mi regazo, nerviosa.

- Pues conmigo misma. - bajo la mirada a mis manos cuando veo la confusión en su mirada.

Temo no saber expresarme bien y que se enfade conmigo por eso, que pierda la esperanza y la paciencia por no saber cómo contar a la perfección lo que me pasa.

- Quiero acallar mi pasado para que no siga atormentando mi presente y no moleste en mi futuro, ¿me explico bien? - subo la mirada con temor a sus ojos, viendo comprensión en ellos y volviendo a respirar algo más relajada al ver cómo asiente despacio mientras vuelve a anotar algo en su hoja de cuadros.

- ¿Has trabajado ya con él? - cuestiona y vuelve a mirar mis ojos. Me canalizan. Sé que es capaz de entenderme con tan solo una mirada.

- Sí. - respondo con simpleza.

- Si ya lo habías pasado, ¿por qué ha vuelto a atormentar tu presente?

- Por Violeta.

- ¿Qué hizo ella?

¿Que qué hizo? La pregunta es difícil, no es corta, en lo absoluto. Con Violeta he vivido tantas emociones que soy incapaz de expresarlas con palabras, supongo que por eso me las guardo y termina siendo peor.

Me hizo darme cuenta de que puedo volver a amar y que me amen, me hizo sentir de nuevo, me da miedo, y en parte, la odio por eso.

- Pensé que estaba enamorada de mí, o así me lo hizo ver, pero de un día para otro decidió que teníamos que dejar lo que teníamos para "sanar las dos y estar bien juntas." - suelto una carcajada sarcástica al decir esto último y entrecomillo con mis dedos. Siento la rabia apoderarse de mí.

- ¿No crees que tuviera razón? - pregunta ella y yo elevo la mirada, llena de frustración y ofensa.

¿Cómo va a tener razón si siquiera tuvo en cuenta mi opinión?