Capitulo 16: Inseguridad

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Habla Violeta

10:54 a.m

El desayuno se resume a: Los demás preguntándonos a Chiara y a mí sobre nuestra "relación".

Claro está que nosotras seguimos con la mentira, todo sea porque Cris no le haga nada a Chiara, eso es lo más importante.

Ahora estamos haciendo la famosa sobremesa, esa que tanto nos gusta. Estamos hablando de cómo creemos que serán nuestras vidas una vez que salgamos de aquí.

- Pues yo me voy de viaje por el mundo. - Comenta Ruslana que se ha cambiado de mesa para hablar con nosotros, concretamente al lado izquierdo de Chiara. - Y escribo una canción inspirada en cada sitio.

- Ostias pues eso está guay, en verdad. - Añade Álvaro, que al estar Ruslana en su sitio, él se encuentra sentado en los muslos de Bea.

- ¿Tú Violeta? - Me pregunta Denna, ya que Chiara y yo somos las únicas que no hemos hablado.

- Pues no lo sé, la verdad. Probablemente siga con todo lo del reportaje y tal, pero también quiero escribir un libro. - Al decir esto último, capto la atención de cierta guiri que, acto seguido me mira.

- ¿Y tú Kiki? - Le pregunta Ruslana a mi supuesta novia.

- Si no me muero antes, escribiré canciones para cantantes y ya está. - Dice Chiara y todos nos giramos a verla extrañados.

- ¿Cómo que para cantantes? - Pregunto yo.

- Kiki si tú eres cantante. - Añade Bea.

- Además, si tus canciones cantadas por ti son la ostia. - Finaliza Denna antes de ser interrumpida.

- Nah, me he dado cuenta de que no sirvo para esto. - Dice Kiki.

- ¿Por qué dices eso, Chiara? - Cuestiona Martin, que se levanta y se pone de cuclillas a su lado.

- No sé, os veo a todos y luego me veo a mí y es como, joder... - En su voz se puede notar un claro complejo, una inseguridad, pero también un nudo en su garganta que poco a poco se empieza a formar.

Con tan solo conocer a Kiki durante 1 semana, puedes leerla con claridad, es muy expresiva, pero nunca acepta sus sentimientos.

Puede estar fatal y seguir diciendo que está bien y que no pasa nada.

Pero si te paras un segundo y te esfuerzas por conocerla bien, sabrás reconocer sus facetas, lo que le pasa en cada momento y por qué.

- Y no me refiero vocalmente solo. - Añade la protagonista de este revuelo.

- Chiara, eso no lo digas ni para las bromas. - Le dice Ruslana pillando ya por dónde quiere ir Chiara, esta vez hablándole con tono serio.

Toda la gente, al notar que Chiara está verdaderamente mal, se levanta de sus sitios y se pone a su alrededor en forma de semicírculo.

- Chiara, amor... - Ruslana le acaricia el brazo brindándole todo su apoyo y cariño. - Estás muy saturada, y es normal, pero deberías soltarlo todo. - Le aconseja.

Chiara, ya con unas lágrimas rebeldes cayendo por sus mejillas, niega ante el consejo de nuestra amiga ucraniana.

- Kiki, tienes que soltarlo. - Añade Álvaro a toda la conversación.

- Dejadla, si no quiere hablar, dejadla sola, aquí todos lo vamos a pasar mal. - Dice Salma comiendo de su plato y con tono de pasotismo.

Ruedo los ojos ante su comentario, es muy amiga mía, pero ella siempre quiere ser el centro de atención, y cuando no lo es, hace estas cosas: Infravalorar los problemas de los demás.

- ¿Vamos a la ducha, Kiki? - Pregunto en un tono suave y acariciando el otro brazo libre de Chiara.

- Por favor. - Es lo único que puede verbalizar Chiara antes de levantarse y darme la mano para dirigirnos juntas a las duchas.

Caminamos en silencio hasta llegar a nuestro destino, una vez ahí, ambas entramos, yo después de Chiara.

Según cierro la puerta y me giro, puedo verla con la espalda apoyada en la pared, con las manos cubriéndose el rostro y de sus más adentros, se le escapan pequeños sollozos.

No lo dudo ni una milésima de segundo más y me acerco a ella. Nos fundimos en un abrazo lleno de sentimientos y emociones.

Abrazo en el que yo le intento demostrar que estoy aquí para ella, que puede expresar sus sentimientos, que aquí nadie le va a juzgar.

- ¿Qué te pasa? - Me atrevo a preguntar aún en el abrazo y acariciando su pelo de forma cariñosa.

- Lo que dije antes. - Responde antes de separarse y quedarnos a escasos centímetros.

- Dame una respuesta más amplia, creo que la merezco, ¿no? - Chiara asiente en compañía de una pequeña risa.

- Es que, me siento inferior a los demás, en todos los sentidos. - Confiesa con un tono de vergüenza en su voz.

- Eso no es verdad, Kiki. - Opongo llevando una mano a su mejilla y acariciando esta misma con delicadeza.

Chiara baja la cabeza y noto cómo duda sobre lo que le digo, su mente ahora mismo tiene que ser una lavadora que está dándole vueltas y vueltas al mismo tema.

Alcanzo mi otra mano a su mentón y lo elevo para que me mire a los ojos.

- ¿Te fías de mí? - Cuestiono suavemente intentando que mi tono de voz le trasmita tranquilidad y confianza.

- Pues claro. - Responde

- Pues hazme caso, eres perfecta. - Sentencio mirándole a los ojos.

Puedo sentir cómo el verde de sus ojos tiene un brillo especial, un brillo que me encanta y por el que pagaría para ver día y noche.

Es ese brillo especial que solo le sale conmigo.

Nos miramos a los ojos mientras cada vez acortamos poco a poco los centímetros que nos separan, justo ahí es cuando lo siento.

Siento un montón de mariposas en mi estómago revoloteando eufóricas de un lado para otro.

- Si algún día tienes pensamientos intrusivos sobre ti, ven conmigo y te enseño que te equivocas. - Le susurro a apenas centímetros de su boca.

Chiara asiente y pega más su cuerpo al mío. Suspiro y niego con una risa queriendo escaparse de mis labios.

- Kiki, ¿te da vergüenza besarme? - Pregunto irónicamente.

Ella responde elevando sus hombros burlonamente.

- O sea que siempre tendré que dar el primer paso yo, ¿no? - Vuelvo a cuestionar.

Chiara se limita a asentir nuevamente con la mirada fija en mis labios, lo que hace que una sonrisa salga de mis más adentros.

No lo dudo un segundo más y nos fundo en un beso.

Nuestras bocas empiezan una batalla que luchan por ganar, se fusionan de una manera magnética.

No es un beso sutil, pero tampoco un beso subido de tono, es un beso necesitado en el que nos transmitimos todo nuestro amor, respeto y cariño.

Hoy Y Siempre // Kivi OT 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora