Kill Me || Sungsun

Fiesta y Sorpresas

Aquella cena había seguido tranquila, justo como Heeseung lo había planeado. Sunoo había platicado algo sobre el trabajo, pero Heeseung lo detuvo para que pudiera seguir con lo planeado.    

—Toma cariño—le entregó una invitación para una fiesta de antifaces.

Sunoo miró sorprendido. Sería su primera vez saliendo a una fiesta con un montón de gente rica, habrían muchas cosas que podía robar.

Heeseung observó la reacción de Sunoo detenidamente y le hervía la sangre de ver lo bien que actuaba.

—Es increíble, ¿nuestros antifaces harán juego?

—Por supuesto que lo harán mi vida. Debe notarse que somos una pareja.

Sunoo sonrió y besó los labios de Heeseung.

—¿De qué es esta fiesta? 

—Uno de los empresarios más famosos la ha organizado. No conozco mucho, pero estaremos bien ahí. Quiero que te vayas lo más lindo que puedas, como si fuera tu último día de vida.

Sunoo asintió con una sonrisa.

—Pensé que ya me veía así.

Heeseung sólo se rio y besó a Sunoo.

༺☆༻

Sunghoon, miró los cuchillos por unos segundos y con rabia tiró todo lo de la mesita.

—¡Hey!—le llamó Jay—. ¿Qué mierda haces? Si algo se rompe lo pagarás y el triple.

—Jodete—se dio la vuelta y Jay lo sujetó firme del brazo.

—¿A dónde vas? ¿Olvidas que me perteneces?

—Voy al baño. ¿Ahora debo pedirte permiso para hacerlo?

—Sí y me levantas todo este desastre.

Se fue dejando a Sunghoon solo y él se quedó mirando todo el desastre a su alrededor. Se dio la vuelta también y fue a lavarse la cara.

—¿Qué mierda estoy haciendo?—se preguntó mirando su reflejo.

༺☆༻

—Amo la decoración, es tan linda y todo parece sacado de una película—iba diciendo Sunoo mientras hacían fila para entrar a la mansión. Heeseung no podía esperar para deshacerse de ese mentiroso que tenía a su lado—. Me gustaría casarme así...

Heeseung miró sorprendido a Sunoo, no esperaba que mencionara algo así.

—¿Casarnos?

—¿Tú quieres?—preguntó con una sonrisa y un ligero sonrojo apareció.—Es muy rápido, pero sí lo he pensado, ¿te imaginas a nuestros bebés corriendo por ahí?—Sunoo suspiró.—Me gustarían cinco.

Heeseung parpadeó varias veces y dirigió su mirada hacia enfrente.

—¿Me das mi antifaz? 

Sunoo lo miró confundido.

—Yo no lo traigo.

Heeseung maldijo.

—Regreso en un momento.

Sunoo asintió y vio como Heeseung se alejaba, suspiró aliviado de verlo lejos. Estaba actuando algo extraño y supuso que quizás ya sospechaba de él.

En la mañana le entregó su celular quebrado, diciendo que lo aplastó por error con una maleta al no verlo en el asiento de atrás.

El golpe que traía era de una esquina, así que no le creía.