Camino

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Sunoo se iba comiendo las uñas al estar cada vez más cerca la casa de Heeseung.
  
Sunghoon había intentado calmar el ambiente, pero no tenía nada que decir, su vida fue horrible después de Sunoo. No quería ni siquiera pensar en ello.

—Sunoo, necesito que te tranquilices, conseguiré a tu hijo y los llevaré a salvo. No necesitas hacerle daño a tus dedos.
  
—¿Por qué haces esto por mí?—preguntó Sunoo.—Desde que llegaste no he dejado de decirte lo mucho que te odio.     

—Porque te amo y me preocupo por ti. Supongo que era el destino regresar para venir a encontrarnos y tener que sacarte de esto. Muy romántico.

—Demasiado para dos personas que sólo se juntaron por necesidad antes que por amor.

Sunghoon asintió con la cabeza. Era cierto, él necesitaba conocer a alguien lejos de la mafia y poder recuperar esa humanidad que pensó estaba a punto de perder.
  
Desde ese momento nunca ha dejado de ser humano, porque nunca dejó de amar a Sunoo.

Y Sunoo simplemente estaba en la calle, ir con Sunghoon sería bueno para él.

Claramente estaba enamorado de Sunghoon, a pesar de todo lo que hizo nunca dejó de pensar en él y por eso mismo lo odiaba, porque su corazón estaba loco por él. Incluso ahora que su hijo estaba perdido, una parte lloraba por su hijo y otra porque el amor de su vida había regresado como lo había prometido.  

Todo se había quedado en silencio y Sunghoon decidió hablar antes de que Sunoo dijera algo.

—Lamento no haberme comunicado antes, pero Jay, me dijo del cuerpo que estaba en mi departamento y yo pensé que hablaba de ti. No lo describió, pero fue lo primero que pensé y fue horrible imaginar que fueras tú y simplemente te di por muerto.

—Fue un idiota que llegó con una escopeta, tuve que matarlo antes de que intentara tocar a Jungwon—dijo Sunoo recordando esa vez.

Volteó hacia la ventana observando como el carro se detenía de a poco y volteó a ver a Sunghoon al darse cuenta que había frenado en un lugar donde no era.

—¿Por qué..—

—¿Es mío?—interrumpió Sunghoon.

Sunoo abrió los ojos al darse cuenta de su error. Los tiempos coincidían. Sunghoon estaba seguro que era suyo.

Sunoo no sabía qué contestar.

—¿Es como yo?—volvió a preguntar.

Sunoo suspiró rendido ante la emoción en los ojos de Sunghoon.

—Sí lo es y si eras un niño travieso, sí es como tú.

La mirada de Sunghoon se iluminó y en su rostro formó una hermosa sonrisa.

—Soy papá.

—Y dejarás de serlo si no te apresuras.

Sunoo se cruzó de brazos y Sunghoon siguió el camino.

Sunoo mentiría si no le parecía adorable ver una bonita sonrisa en el rostro del amor de su vida.

Cuando Jungwon era un recién nacido, se imaginaba como sería Sunghoon como un padre, estaba seguro que sería muy amoroso, pero con el tiempo dejó de pensar en eso aunque a veces fugazmente le llegaba el pensamiento "¿cómo sería si estuvieras aquí?".

Definitivamente nada de esto hubiera pasado si Sunghoon no se hubiera ido, no hubiera conocido a Heeseung, no sería lastimado por nadie, pero las cosas pasaron y ahora debe afrontarlas.

—¿Cuál fue su primera palabra?

—Papá—dijo Sunoo. Sunghoon suspiró—, pero fue por mí, a mí me dice papá, tampoco creas que él sabe de ti.

—¿Te has acostado con el chico que estaba en tu casa?

—No, es el niñero de Jungwon, pero Jungwon suele hacerle muchas travesuras como si no lo quisiera, él es muy especial con las personas, posiblemente no le caigas bien.

—No me importa, lo abrazaré aunque no quiera—Sunghoon se quedó callado y después carraspeó.—Sólo si me permites hacerlo.

—Sí, es tuyo también—Sunoo miró a la ventana sin querer mirar a Sunghoon.

—Sunoo, lo de hace rato en la fiesta, sé que fue muy pronto, pudimos haber hablado primero antes de hacerlo.

—Lo entiendo—dijo Sunoo—no fue algo que me hubieras obligado a hacer—Sunoo miró a sus pies.—Yo lamento lo que he dicho y hecho antes.

—Sólo dijiste que no era mi hijo y algunas groserías más—dijo Sunghoon.

—No, me refiero a años, una vez dije que sólo me querías coger, además de las cosas que he hecho en todos estos años son horribles. Me doy asco.

—No creo que haya sido la manera correcta, pero gracias a eso has logrado hacer que tu hijo tenga una buena vida. Aunque bueno, ¿quién soy yo para decir cuál es la manera correcta si soy un sicario?

Sunoo sonrió, extrañó mucho a Sunghoon. Siempre sabía cómo hacerlo sentir mejor. Es por eso que estaba enamorado de él.

Sunghoon detuvo el auto y volteó a ver a Sunoo.

—Llegamos, voy a bajar yo y tú te quedas aquí, no debe verte nadie.

—Entendido—dijo Sunoo. Sunghoon se desabrochó el cinturón y Sunoo sujetó su mano. Ambos se miraron a los ojos por unos segundos sin hacer lo que ambos querían hacer.—Traelo con vida por favor—pidió Sunoo.

—No te preocupes.

Sunghoon se retiró y Sunoo se quedó con un sabor amargo en la boca, había algo que no le gustaba y tenía miedo.

Kill Me || SungsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora