Sanji caminaba por toda la casa, se sentía desesperado pero no sabía por qué, o tal vez si pero no lo diría en voz alta, ya pasaban más de la media noche y Zoro no llegaba, tenía tiempo sin llegar tan tarde y ahora le preocupaba.
-¿Esta bien señor Sanji? Ya es muy tarde para estar despierto.-dijo Tashigi al verlo.
-Zoro no llega.-se podía notar que estaba desesperado.
-Oh así que eso es lo que te preocupa.
-N-no es eso solo que no estoy acostumbrado a que no duerma aquí.-Sanji era muy orgulloso para aceptar en voz alta que estaba preocupado por el peliverde.
-Tranquilo, el no tardara en llegar...
Justo en ese momento se escucho la puerta de la entrada, ambos fueron rápido a ver de quien se trataba.
-¡S-sanji!- y cómo era de esperarse un Zoro ebrio el cual tambaleaba en cada paso que daba pero al tener a Sanji cerca se dejó caer en sus brazos y este cómo pudo lo sujeto.
-¿P-por qué estás ebrio? Y hueles a...fermonas de una chica...
-¿Q-que dices?-preguntó.
-Sabes que, encárgate de tu mierda tu solo.-Sanji lo soltó y Zoro como pudo se mantuvo de pie mientras veía como este se alejaba.
-¡Sanji! Espera.
-Señor Zoro...-dijo Tashigi.
-Ahora no Tashigi, tengo que arreglar algo ¿si?
Trato de alcanzarlo pero la puerta ya había sido cerrada, Sanji no quería escucharlo y menos en ese estado por lo que no insistió, tenía quedarle su espacio.
Tashigi se acercó hasta el y Zoro al notar su precensia la miró.
-Sanji estaba muy preocupado por usted.
-¿de verdad me veo tan mal?-preguntó.
-Creo que eso no es lo importante, si no que, hueles a las fermonas de ella.
-Mierda.
Al día siguiente Zoro despertó con una resaca de esas que hace mucho no había tenido, ya había perdió la resistencia con el alcohol y se sentía cómo un adolescente.
Al bajar a la cocina no se veía nadie por ningún lado, al parecer Tashigi había salido y Sanji...alomejor seguía sin salir de la habitación, por lo que decidió en ir a ver.
Con toda la inseguridad del mundo toco la puerta.
-Sanji, ¿Estas ahí?-preguntó.
Nadie respondió.
-Se que no quieres hablarme pero, quiero que comas.
Seguían sin responder.
Estaba por irse, dio algunos pasos y detrás de él abrieron la puerta.
-¿Me vas a decir de quien son esas fermonas?
-Sanji yo...
-¿Vas a decirlo o no?
-Ayer...salí con unos amigos y...ahí se encontraba una "amiga"...
-¿Tuviste algo que ver con ella?
-N-no, solo nos abrazamos y...fue todo.
-¿tengo que creerte?-cruzo sus brazos.
-Sanji, perdóname.-tuvo la confianza de abrazarlo tal vez saldría golpeado en el proceso pero no fue así, Sanji había correspondido a su abrazo.-Lo que paso, no fue mi intención, no quería hacerlo, es la primera vez que se me salen las cosas de control y es porque tu me haces sentir así, tan a mi limite, me vuelves loco...y no se si eso esta bien.
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ENTRE NOSOTROS//OMEGAVERSE
FanfictionSanji era un Omega sin olor y Zoro un Alfa sin olfato, o eso creían hasta que se conocieron.