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Zoro llego a su oficina, tenía pereza pero no tanto como otros días, esta vez estaba de mal humor, tuvo que tomar un montón se supresores porqué sentía que su celo estaba por llegar, era eso o tener que faltar al trabajo pero esa idea no era una opción, ya que si faltaba tendría a su padre llamándole al celular a cada minuto.

–Zoro, buen día, le traigo estos reportes del día.–dijo su secretaria sonriente mientras tenía en sus manos un montón de papeles.

La mujer meneo sus caderas lentamente lado a lado mientras caminaba hasta el escritorio del peliverde, era una mujer atractiva pero no del gusto de Zoro por lo que sus constantes coqueteos no le llamaban la atención.

–¿que tengo que hacer con esto?–dijo irritado y tratando de verla lo menos posible, solo quería que se fuera.

–Solo tiene que revisarlos y firmarlos.–sonrió.

Zoro no dijo nada más y empezó a leer uno por uno.

–Por cierto, su padre estuvo aquí durante la mañana, usted aún no llegaba por lo que me lo dejó a mi.–saco de sus senos un pequeño cuadro de papel lo que parecía una invitación, Zoro con algo de asco la tomo.–es una invitación a una cena, estará su familia y las familias de los que trabajan aquí, dijo que su presencia es muy importante. –dijo la chica para después guiñarle un ojo en forma de coqueteo e irse dejándolo nuevamente solo en la oficina.

Después de unos minutos de silencio la puerta fue habierta de golpe, por lo que enseguida el ruido llamó su atención y pudo ver que se trataba de Trafalgar Law.

–Crei que nunca volverías aparecer por aquí.–dijo el peliverde.

–Tengo que hablar contigo.

–¿que necesitas?–dijo sin interés.

–Primero déjame decirte que sigo sin creer que me hayas echado así de tu casa y hayas preferido antes a esa prostituta que a tu mejor amigo de toda la vida.

–Ni en mi casa, ni en mi oficina voy a dejar que lo llames así.–Zoro seguía viendo sus papeles, trataba de darle lo menos posible de su atención a Law.

–¿es la verdad no? Es tu prostituta personal, aun que dudo que le saques provecho a eso.

–Trafalgar, te pido que salgas de aquí antes que haga que te saquen.

–Antes de eso, déjame preguntarte algo.

–No me interesa, ya vete.– cerro los puños arrugando los papeles que llevaba sobre sus manos, empezaba a irritarse, necesitaba que Law se callara de una buena vez.

–¿Sabes quien es su padre?–Zoro no contesto a su pregunta, en realidad no le interesaba nada del pasado de Sanji ni nada que tuviera que decir Law sobre el, ademas de que no lo sabia y no estaba seguro de querer saberlo.

–Es hijo de Judge Vinsmoke, creí que solo era un muerto de hambre, pero resultó ser alguien de poder.

–¿Vinsmoke?...

–¿Enserió no sabias? ¿Su rara ceja no te pareció conocida?

–¿cómo sabes eso? Tu no conoces nada de el.

–No pero esta foto lo comprueba.

Law le mostró una foto un poco vieja donde se podía ver a un pequeño Sanji junto a otros niños, suponia que eran sus hermanos y todos se encontraban con Judge el que supuestamente se trataba de su padre.

Para Zoro fue una sorpresa, fue como un balde de agua fria, no esperaba esa información, pero aún seguía tratando de no  darle importancia al pasado de Sanji, si el no se lo había contado antes era por algo.

ENTRE NOSOTROS//OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora