Liam asintió lentamente, como si estuviera procesando la información, aunque Amber sabía que no se conformaba con tan poco.
-Mi madre ha coincidido con Virginia Shirley en algunas ocasiones. De hecho, es quien se encargó de diseñar el interior de nuestra casa.-comentó Liam intentando hacer algún acercamiento.- Sin embargo, no había tenido el honor de escucharla hablar sobre ti ¿Son muy cercanas?
-Bastante. Sin embargo, nuestra cercanía se limita a los fines de semana. El resto de días vivo en la Residencia Estudiantil de la Academia de Taes. No me dedico activamente a la vida social en la nobleza. Tal vez por eso no hemos coincidido.
Él sonrió, satisfecho de alguna manera que Amber no lograba comprender del todo. Había algo en su mirada que la ponía alerta, pero no era miedo lo que sentía, sino un incómodo cosquilleo, como si Liam disfrutara desestabilizando a la gente solo para ver cómo reaccionaba.
-Interesante-fue todo lo que dijo, con un tono demasiado casual, como si hubiera conseguido justo lo que quería.
-¿Tienes alguna otra consulta, Liam? Tenemos que prepararnos para el informe de esta noche. Más ahora después de tus desalentadoras noticias sobre el humor de mi hermano.- la princesa se puso de pie y dejó a un lado la almohada pero sin dejar de intentar esconder aquellos papeles que había agarrado antes en el pecho de su camisón.
Liam no pudo evitar que su mirada vagara por el cuerpo de la princesa, deteniéndose un momento en su cabello castaño antes de que sus ojos se deslizaron hacia los documentos que intentaba esconder. Su sonrisa se ensanchó, esa sonrisa ladina que siempre parecía esconder una segunda intención.
-Nada más, su alteza. Disculpe por haber irrumpido de esta manera pero, tengo una petición más.-El militar volvió a posar su mirada en los ojos de Ariadne.
-¿De qué se trata?
-¿Podría Amber acompañarme para cotejar cierta información respecto a los informes? Como la veo tan empapada del tema, me sería de gran ayuda. Los informes de ambos deben ser coherentes, y no quisiera empeorar el humor de su hermano. Después de todo, este tipo de escritos no es mi especialidad
Ariadne lo pensó por unos segundos, evaluando las intenciones de Liam. No quería comprometer a Amber sin su consentimiento.
-Si ella desea, puede ir.-concedió Ariadne, intentando mantener la calma.
Sabía que debía mantener una relación más cercana a la amistad con Amber frente a los demás, y no una de mera autoridad.
Amber, captando la situación, asintió con un aire despreocupado mientras se ponía de pie.
-No tengo ningún problema, si eso ayuda les ayuda.
Liam asintió y se dió la vuelta.
-Estaré en mi habitación.
El militar salió a pasos lentos del cuarto de Ariadne y la princesa pudo por fin respirar.
-Ten cuidado.-le advirtió.
-Yo diría que tiene que tener cuidado el.- río Amber.- Si encuentro algo fuera de lugar en su habitación, te lo haré saber.
-Sería de ayuda.-agradeció Ariadne aun notablemente nerviosa.
-¿Crees que sospecha de algo?.-quiso saber Amber antes de meterse a la boca del lobo.
Ariadne negó con la cabeza, aunque sus manos temblaban ligeramente.
-No lo creo. Suele tener ese tipo de conductas misteriosas solo para sacarme de quicio. De haber sospechado de algo, ya le habría notificado a mi hermano o al general.
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Sirey
Science FictionEn las sombras de la misteriosa desaparición del venerado rey de Sirey, el reino se sumerge en una vorágine de incertidumbre. Edgar, el primogénito destinado a heredar el trono, se enfrenta a la desafiante tarea de mantener la cohesión del parlament...