Sonaze un amor dimencional

Cap.24 La engaño de Neo Metal Sonic Supremo

Neo Metal Sonic Supremo sabía que Sonic no sería fácil de derrotar físicamente, pero su plan no era simple. Quería destruirlo desde adentro, haciéndole perder toda esperanza. Y ahora, con Blaze, Tails y Marine intentando salvarlo, estaba listo para llevar su plan al siguiente nivel.

Mientras Sonic seguía atrapado en su prisión, Blaze, Tails y Marine habían llegado a la fortaleza de Neo Metal Sonic Supremo, dispuestos a liberar a su amigo. Sin embargo, antes de que pudieran hacer algo, el suelo bajo sus pies comenzó a temblar. Neo Metal Sonic Supremo apareció frente a ellos, su figura metálica irradiando poder y malicia.

—¿Creían que podían detenerme tan fácilmente?—dijo Neo Metal Sonic Supremo con su voz distorsionada y fría—. Es hora de que vean el verdadero poder que controlo.

Blaze, Tails y Marine apenas tuvieron tiempo de reaccionar antes de que un portal se abriera frente a ellos, un remolino de energía oscura que los arrastró sin piedad.

—¡No! ¡No nos llevarás!—gritó Blaze, tratando de resistir el tirón del portal, pero fue en vano. La fuerza del vórtice era demasiado poderosa, y los tres héroes fueron tragados por el portal.

En cuestión de segundos, aparecieron en la dimensión de Blaze, pero algo estaba terriblemente mal. El paisaje estaba completamente distorsionado, envuelto en sombras y energía oscura. Los cielos que alguna vez fueron brillantes estaban ahora cubiertos por nubes negras, y la tierra ardía con un fuego sombrío.

—¿Dónde estamos?—preguntó Marine, mirando a su alrededor con temor.

Blaze reconoció de inmediato el lugar, pero no como lo recordaba. Este era su mundo, pero estaba completamente corrompido por el poder de Neo Metal Sonic Supremo.

—Estamos en mi dimensión...—dijo Blaze en voz baja, apretando los puños—. Pero esto no es como debería ser. Todo está mal.

—Neo Metal Sonic nos trajo aquí a propósito—dijo Tails, ajustando sus gafas mientras analizaba el entorno—. Sabía que estaríamos en desventaja.

Neo Metal Sonic Supremo los observaba desde el otro lado del portal, sonriendo con malicia.

—Bienvenidos a tu propio reino, Blaze—dijo con una risa metálica—. Aquí es donde tu mundo y tu espíritu serán destruidos. Pero antes... quiero que Sonic vea cómo los pierden.

Con un movimiento de su mano, Neo Metal Sonic Supremo creó una grabación falsa. En ella, Blaze, Tails y Marine estaban atrapados en una máquina, siendo lentamente arrastrados hacia una serie de sierras gigantes que amenazaban con cortarlos a la mitad.

Mientras tanto, en su prisión, Sonic seguía encadenado, su mente aún afectada por lo que había visto antes. Su cuerpo temblaba y su corazón latía rápido. Entonces, la nueva grabación apareció frente a él.

—No... no de nuevo...—murmuró Sonic, sus ojos llenándose de terror al ver lo que parecía ser el destino de sus amigos.

Las sierras se acercaban cada vez más a Blaze, Tails y Marine en la grabación, y Sonic sentía su desesperación aumentar con cada segundo. Quería apartar la mirada, pero no podía. Estaba atrapado, viendo cómo sus amigos eran llevados a una muerte brutal.

—¡Sonic, ayúdanos!—gritaba Tails en la grabación.

Blaze intentaba liberarse, pero las cadenas eran demasiado fuertes, y Marine estaba en lágrimas, completamente aterrorizada.

Sonic no podía soportar lo que estaba viendo.

—¡No! ¡No puedo perderlos!—gritó Sonic, sus ojos llenándose de lágrimas.

Neo Metal Sonic Supremo apareció de nuevo, su figura metálica proyectándose sobre Sonic.

—¿Te duele, Sonic?—dijo con una sonrisa cruel—. Eso es lo que quiero. Quiero que sufras... quiero que veas cómo todo lo que amas se desmorona ante ti.

Sonic gritó de dolor emocional, rompiendo en llanto mientras caía de rodillas. No podía hacer nada para detener lo que creía que era la muerte de sus amigos. La desesperación lo había atrapado completamente.

—¿Ves, Sonic?—dijo Neo Metal Sonic Supremo—. He destruido todo lo que amas... y ni siquiera has tenido que levantar un dedo.

En ese momento, las cadenas que mantenían a Sonic prisionero se desvanecieron. Neo Metal Sonic Supremo lo liberó, pero Sonic no tenía fuerzas para escapar. Cayó de rodillas, su mente destrozada por lo que acababa de ver. Las lágrimas corrían por su rostro, y su cuerpo temblaba de dolor.

—Esto no puede estar pasando... no puede ser real...—murmuraba Sonic, su voz apenas audible.

Mientras tanto, en la dimensión de Blaze, Blaze, Tails y Marine seguían atrapados, sin saber que Sonic había sido engañado por la grabación falsa. Sabían que debían encontrar una manera de escapar, pero las cadenas de energía oscura eran demasiado fuertes.

Blaze miró a su alrededor, su corazón lleno de determinación.

—No podemos rendirnos ahora. Sonic nos necesita.

Tails, siempre el cerebro del grupo, intentaba analizar las cadenas con sus dispositivos.

—Si tan solo pudiera encontrar una forma de debilitar estas cadenas...—murmuraba mientras trabajaba rápidamente.

Marine, aunque normalmente optimista, estaba comenzando a sentir el peso de la situación.

—Tenemos que salir de aquí. No podemos dejar que Neo Metal Sonic gane.

Blaze asintió, pero su mente seguía preocupada por Sonic. Sabía que, si no llegaban a tiempo, podrían perderlo para siempre. El portal a su mundo había sido corrompido y sus esperanzas se estaban desvaneciendo.

Neo Metal Sonic Supremo observaba todo con satisfacción. Su plan iba a la perfección, y sabía que Sonic estaba al borde de su destrucción emocional. El siguiente paso sería asegurarse de que Sonic jamás pudiera volver a levantarse.

—El fin se acerca, Sonic—dijo Neo Metal Sonic Supremo, observando desde lejos cómo el héroe erizo estaba completamente destrozado.

Blaze, Tails y Marine aún tenían una oportunidad, pero el tiempo corría en su contra. Si no lograban escapar de la dimensión corrupta y llegar hasta Sonic pronto, podrían perder la batalla, no solo físicamente, sino también emocionalmente.

—Tenemos que encontrar una manera de volver al portal.—dijo Blaze, apretando los dientes—. No podemos dejar que Sonic enfrente esto solo.

Continuara...