Convivencia peligrosa | Hyunlix

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Los amigos de Felix se encontraban algo preocupados, desde que llegó a la universidad Lee tenía cara de no haber dormido nada, también se notaba en su humor. Mientras caminaban hacia la cafetería, se mantenía en silencio y con el ceño fruncido. Era raro verlo así. Chan se le acercó preocupado, lanzando una mirada de advertencia al grupo.

-Oye, ¿todo bien? -preguntó intentando romper el hielo.

Félix apenas levantó la vista, sus pensamientos aún atrapados en la noche anterior. El constante tira y afloja con Hyunjin, la sensación de que todo estaba al borde del colapso, y sobre todo, las humillaciones.

-Es hyunjin de nuevo, es un idiota nunca me deja en paz.-respondió Félix, evitando la mirada de los chicos mientras se hundía en su silla en la mesa de la cafetería. La verdad era que estaba más que estresado. Su pelea constante con Hyunjin le consumía más energía de la que quería admitir. Cada interacción con él era como un campo minado, y la tensión entre ambos era más palpable que nunca.

Los amigos intercambiaron miradas preocupadas, sabiendo que Félix no diría más. Pero antes de que alguien pudiera insistir, Lee soltó un suspiro.

-Lo que sea que ocurra deberias hablarlo con él, cuando le he hablado siempre es amigable. Sé que si quitan sus diferencia sería igual. No es sano que sigas guardando todo -dijo, dándole una palmada amistosa en el hombro.

Félix asintió, pero no respondió. No iba a hablar sobre lo que pasaba con Hyunjin, ni -Ellos no entenderían. Para ellos, Hyunjin solo era ese compañero de cuarto molesto que Félix no soportaba. Nadie sabía lo que sucedía realmente entre ellos, esa guerra silenciosa que nunca parecía acabar.

La cantidad de veces que le hacía maldades, como quitar el agua caliente, dejar lo sin llaves, apagar el Internet y no darle la clave hasta que le rogaba, comer lo que hacía sin permiso y más. Pero claramente Felix devolvía todas, incluso borrando "sin querer" el plano de una tarea del pelinegro, cambiar las etiquetas de comidas para confundirlo, pisar sus tenis y más, sin contar las veces que se peleaban casi al borde de lo físico.

Mientras intentaba concentrarse en la conversación de sus amigos, el sonido de su teléfono vibrando en su bolsillo lo sacó de sus pensamientos. Lo sacó rápidamente, esperando cualquier cosa menos lo que vio en la pantalla: un mensaje de Hyunjin.

"Imbecil:" ~en línea

• olvidé decirte que dejé algunas cosas tuyas fuera del baño. No las quiero ver en el medio

• ¿ok?

• Por cierto, no estaré unos días en MI departamento apartir de mañana, más te vale que todo esté igual cuando regrese.

• Recordatorio: ¡Deja de ser tan patético!

Hyunjin siempre encontraba la manera de provocarlo, incluso cuando no estaba físicamente cerca. Pero no iba a darle el gusto de una respuesta. Félix metió el teléfono de vuelta en su bolsillo dejándolo en visto y se levantó de la mesa, sintiendo las miradas curiosas de sus amigos.

-Tengo que irme un momento -dijo sin explicar nada más. IN lo observó con una mezcla de confusión, pero no dijo nada. Sabía que Félix hablaba cuando estaba listo, y forzarlo solo lo haría retroceder más.

Félix salió de la cafetería, el aire fresco dándole un respiro de los pensamientos que lo envolvían. Necesitaba tiempo para pensar, para despejarse de todo lo que Hyunjin representaba en su vida. Pero cuanto más intentaba alejarse de esa sombra, más parecía que lo arrastraba de vuelta.

El campus estaba tranquilo a esa hora, con pocos estudiantes deambulando por los caminos. Félix decidió caminar sin rumbo, esperando que el movimiento le ayudara a liberar algo de la presión que sentía en el pecho. Minutos después de estar caminando se recostó en un árbol a respirar pero de repente el sonido de pasos detrás de él le hizo girarse.