Capítulo 19

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En fotografía Ana
P.D. Quiero que quede claro que Ana es una año mayor que Gris y por lo tanto dos más que Ela

Richard

En efecto, no entiendo a las mujeres; primero Lucy no quiere escucharme y se porta indiferente conmigo, luego se acerca a preguntarme sobre mi salida con Gris, y ahora me dice que olvidemos eso y que nada será como antes.

Las mujeres son complicadas- y esta es una de las pocas veces en las que estoy de acuerdo con mi mente. Aunque, pensándolo bien no son complicadas, solo quiza...no a quién engaño; si son MUY COMPLICADAS.

Hoy Lucy invitó a dos amigas suyas. Espiaba por las escaleras y vi que entraron dos chicas quizá de mi misma edad; una de cabello castaño y ojos negros y la otra de cabellera rubia y ojos azules... esos ojos azul cielo, no pude averlos olvidado y enseguida los reconocí. Esa chica es Ela. Aunque quizá no lo sea pero si es ella a cambiado mucho-no tanto como Gris- es aún mas linda de lo que recuerdo, su cabello no es muy largo y a simple vista se ve que es muy cedoso, sus fracciones son mas finas y ...¡VAYA QUE TIENE UN BUEN CUERPO! sus curvas son increíbles. Ambas chicas siguen a Lucy a la cocina y seguro se quedarán horas hablando con Rosa así que  decido volver a mi habitación.

Ambas son muy hermosas-me refiero a las amigas de Lucy- pero hay algo en la rubia que no puedo dejar de pensar en la probabilidad de que es Ela, pero que absurdo ¿no? estoy pensando en que la primera chica rubia de ojos azules que veo es la misma chica rubia de ojos azules con la que he estado obsesionado durante todos éstos años. Estúpido, lo sé. Creo que necesito ayuda con esto, he de estar enloqueciendo. Sin darme cuenta caigo en un profundo sueño.

Despierto pues los rayos del sol que entran por mi ventana me dan en la cara-olvide cerrar las cortinas anoche- , voy al baño, me doy una ducha con agua fría, salgo con una toalla enrollada en mi cintura, me visto, veo el reloj digital que está en uno de mis cajones-8:30 a.m-, como en media hora se desayuna decido bajar a molestar un poco a Rosa.

-Hola Rosie-digo al entrar a la cocina y percatarme de que Lucy tambien se encuentra en la cocina- Hola Lucy

-Hola joven Richard- dice Rosa

-Hola- habla Lucy y después sale de la cocina, por un momento pienso en seguirla pero me quedo inmóvil.

-Deberías arreglar las cosas con ella-me sugiere Rosa ¿Acaso Lucy le contó?

-Lo sabes ¿e? - digo y ella solo se resta a asentir levemente.

-Lo mejor sería que hablaras con ella

-Lo intenté pero me dijo que lo dejáramos asi y que nada sería como el día en que nos conocimos   

-Eso fue lo que ella dijo, pero en realidad necesita que tu des el primer paso

-¿Me estás diciendo que si yo le digo "lo siento"-hice comillas con mis dedos- a Lucy ella entenderá y todo volverá a ser como antes?

-No es lo que quise decir, pero si-solté una pequeña risa y salí de la cocina dirigiéndome a la habitación de Lucy. Toque a la puerta y ella abrió a los pocos segundos.

-¿Qué? -dijo en un tono cortante y frío

-Yo...-pensé unos segundos lo que diría, no quiero equivocarme por segunda vez-lo siento- baje la cabeza

-¿Por...?-sabía lo que hacía; ella queria que le dijera todo y que reconociera mi error

-Por hacerte daño-solte un suspiro y la miré a los ojos- lamento haberte hecho sentir como que eras mi reemplazo de Alice, fui un estúpido y creo que tarde demasiado en pedirte disculpas- di media vuelta dispuesto a irme pero Lucy me tomó del brazo.

-Si, fuiste un estúpido,- suspiró- te perdono pero...-volvió su tono juguetón- tendrás que llevarme a comprar esas botas que me gustaron en el centro comercial-sonreí.

-¿¡Las "Doctor Martin"!?- dije sorprendido, esas botas eran extremadamente costosas

-Si- me empujó y cerró la puerta de su habitación evitando que le pudiera contestar. Adoro a esta chica, es rara pero adorable. Veo mi reloj de muñeca-9:05 - hora de desayunar, bajo al comedor y ya se encuentran mis padres sentados.

-Buenos días- saludo a ambos y me siento.

-Buenos días- responden mis padres al unísono. Entra Lucy.

-Buenos días, perdon por la tardanza- se disculpa,  se sienta a mi lado y me dedica una sonrisa.
-No te preocupes, no hemos empezado-dice mi madre y enseguida entra Rosa con el desayuno. Buñuelos. El resto del desayuno fue en silencio, excepto cuando a Lucy se le atoró el buñuelo en la garganta, casi muere mientras yo estaba estallando en risas.

Terminamos de desayunar, mi padre fue a trabajar en su empresa, mi mamá fue con Rosa al mercado, a Carmen y Pepermint no los he visto en toda la mañana y Lucy y yo salimos al parque Merveilleux. Es uno de los parques más bonitos que hay en Luxemburgo, y como yo estuve mas de 6 años fuera ahora creo que es aun mas hermoso.

No tanto como Lucy- maldito subconsciente, creo que de nuevo empezaremos a tener problemas.

Lucy y yo estuvimos caminando toda la mañana y a la hora de comer fuimos a un restaurante cerca del parque.

-Oye, no tenías que pagar todo tu- dijo Lucy al salir del restaurante

-No, no tenía pero quise

-Bien, pues ya que estas de caballeroso ...vamos por un helado

-Vamos- comenzó a correr y yo la persegui hasta la heladería, al llegar recuperamos el aliento y nos acercamos a pedir; Luz pidió un helado de vainilla- demasiado simple a mi gusto- y yo uno de choco-menta, comíamos el helado mientras caminábamos a la mansión.

-Tienes unos gustos demasiado simples- dije para romper el silencio incómodo

-Bueno, es mi vida ¿no?

-Ja, claro como digas

-Yo no te estoy reclamando que eres demasiado...

-¿Guapo?

-No, tan...

-¿Increíble?

-No, estúpido quise decir

Al llegar a la mansión eran aproximadamente las 9:30 p.m,  Lucy se fue directamente a au habitación y yo me quede en la sala de estar. Sonó el timbre, me levanto del sofá, abro la puerta y....

-¿Tu? ¿Qué haces aquí? -no puedo creer que este aquí. Justo cuando arreglé todo con Lucy.

Canción: All Apologies-Nirvana

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