Ela
Primer día de clases y no fue tan malo como yo esperaba; no asistí a la primera clase porque tuve que ir a la dirección a hablar con la directora, en el almuerzo no tuve que ver a Aaron ni a Valerie porque ayudaba a Karla con un problema, sume un punto extra en matemática y Ciencias, ninguno de los profesores dejó tarea por ser la primera semana y con el cambio de look que habia hecho Karla conmigo Aaron no paraba de mirarme; cosa que me era incómodo.
El cambio solo fue que delinee un poco más mis ojos; lo que hacia que resaltaran más, oscurecí un par de tonos mi cabello y usé un labial rojo cereza.
El día de Karla no fue lo mismo que el mío; me contó que la entrada de Valerie y las gemelas Mitchel (Lindy y Celia) fue diferente; pusieron música y entraron moviendo sus caderas tipo diva en cámara lenta, en la primera clase (Química) se llenó de un líquido morado el cabello, a la hora del almuerzo una chica de primer año chocó contra ella y manchó su uniforme con malteada de fresa (el problema con el que la ayudé), luego cerró su taquilla con tanta fuerza que se abrió de nuevo, la golpeó en la cabeza y quedó inconsciente durante todo el resto del día. Y lo peor fue que Valerie la vio pues su taquilla está justo al lado de la de ella.
En este instante Karla está en su cama rodeada de mis apuntes y copiando todo lo de las clases a las que faltó por el golpe típico de la taquilla, digo típico porque esto le ha pasado los últimos tres años el primer día de clases.
Sonó mi celular. Era mi tía.
-Ela- habló mi Lady al otro lado de la línea.
-¿Si?
-Gris, Ana y yo tuvimos que salir de la ciudad por unos asuntos de último minuto, te quedarás con tu amiga una semana- La familia de Karla volvió de vacaciones hace dos semanas y fue lindo de cierto modo tener a mi mejor amiga en las vacaciones.
-Bien pero...- y mi tía cortó la llamada.
-Era tu tía- no parecía una pregunta era más bien una afirmación por parte de mi amiga.
-¿Cómo lo sabes?
-Llamó a mi mamá hace rato y dijo que te quedarás una semana en mi casa- dijo sin parar de escribir en su cuaderno de literatura.
-Oh
-Oye mi venganza va a la perfección
-¿De qué hablas?
-Aaron se está dando cuenta de que fue un idiota al engañarte con tu prima ¿viste cómo te veía?
-Si, con asombro
-No- esta chica es complicada y esta vez no era la excepción- con arrepentimiento, culpa, y...deseo
-¿Deseo?
-Si, deseo
Richard
-Objeción- Lucy susurró justamente cuando mis labios estaban a punto de rozar los suyos. Me sorprendió bastante que decidiera no besarme y sentí una punzada que hizo que me separara de ella rápidamente y entré a la mansión de prisa dejando la puerta abierta. Entré a mi habitación y cerré la puerta haciendo un fuerte ruido al azotarla.
Mi orgullo estaba por los suelo. Si, eso pasó.
Llegó la noche, eran las 7:00 p.m y Lucy tocó a mi puerta y dijo "hora de cenar, Adams". Abrí la puerta y esquivando a Lucy bajé al comedor. Aprecio de cierta forma que Lucy quiera que las cosas sean como antes del casi-beso y yo haré lo mismo pero mañana que mi orgullo no esté tan pisoteado.
La cena ocurrió en silencio y fue cuando comencé a pensar. No había visto a Gris Trymay en la Universidad, fue raro pues solo hay una Universidad en Luxemburgo a no ser que haya decidido dejar de estudiar; aunque no lo creo, lo poco que conozco de ella es que le encantaría estudiar contaduria. Asi que algo pasó.
Al término de la cena llamé al celular de Gris, no contesto y decía que estaba fuera del área de servicio, cosa extraña.
Las horas se me fueron bastante rápido mientras escuchaba Metallica (mi banda de rock favorita) y pensaba sobre la repentina desaparición de Gris, no sé si llamarlo desaparición repentina o abandono temporal de Luxemburgo.
Sin darme cuenta caí rendido en los brazos de morfeo.
La Universidad, el cielo teñido de un color azul tan claro que podría confundirse con el blanco, Lucy y yo en medio de todos los alumnos que no notan nuestra presencia en el centro. Como magia aparecen globos de colores por todo el piso y Lucy drásticamente cambia de ropa por un vestido negro y unas zapatillas rojas, yo uso un traje negro parecido al uniforme de mi antigua escuela. Lucy se acerca a mi, toma mi cuello obligándome a bajar mi cara al nivel de la suya, acerca sus labios a los míos y....
-¡DAME UNA "A", DAME UNA "R", DAME OTRA "R", DAME UNA "I", DAME UNA "B", DAME UNA "A" ¿QUÉ DICE? ARRIBA!- Lucy apareció con unos pompones de porrista que al terminar de gritar agitó en mi cara, otro intento de despertarme y lo peor que fue en el mejor momento del sueño.
-¿Piensas audicionar para porrista?- le pregunté una vez que pude hablar.
-No, solo que me quedé sin ideas para despertarte-reí un poco. Mi orgullo seguía herido pero no tanto como ayer.
-¿Lista para el segundo día?
-Supongo
Subimos al auto, y tras avanzar tres cuadras Lucy puso "Just the way you are" de Bruno Mars. Yo odio a Bruno Mars.
-Hey- exclamó cuando cambie su cancioncita por "One" de Metallica.
-No me digas que no te gusta Metallica- respondí
-Me gusta, pero no tengo ganas de escuchar rock
-Wow, pues es mi auto y si quieres que te siga sirviendo de chofer tendrás que escuchar lo que yo diga cuando lo diga
-No
-Si
-No
-Si
-No
-Si
-Si
-No
-Gracias- enseguida volvió Bruno Mars. No puedo creer que haya caído en esa jodida trampa de niños, aunque creo que de todas formas iba a ceder a lo que Lucy dijera.
Canción: 21 guns- Greenday
#Venganza_de_Karla
#Lo_que_Lucy_diga
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ELA
FanfictionSoy Ela. ¿Estas dispuesto a saber lo que causa una zapatilla de cristal? ¿Si? Pues, te invito a conocer mi historia.