36. Sinceridad al poder

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Llego tarde, ¡llego tarde!

Chris y yo hemos quedado en su... bueno, ya nuestro lugar secreto.

¡sigo llegando tarde!

Acelero la moto.

Llegue.

Justo veo a chris sentado en una roca.

Esta muy guapo, lleva puesto unos pantalones cortos color piedra y una camisa azul claro.

Muy simple.

¡Pero le queda tan bien!

Le intento saludar pero se acerca a mi rápidamente y me besa. Un beso largo.

Me coge de la mano y entramos en el camino que nos lleva a "nuestro lugar"

-Bueno, ¿que?

Pregunto.

-¿mmm?

-a ver, ¿que me tenias que contar?

Se vuelve a poner pálido y algo rojo.

Cada vez me preocupa más.

-¿es importante?

-Para mi si...

-entonces para mi también

Me sonríe agradecido.

-Llegamos.

Cruzamos las ramas, ya soy experta en saltarlas.

Me saco la ropa y me quedo con el bikini que traía debajo. Chris hace lo mismo.

-¿quieres que te cuente?

-Sí

-¿segura?

-Sí

-¿de verdad?

-¡que si, pesado!

Se ríe y me da un codazo. Lo está haciendo o por molestar o por ganar tiempo.

-Bueno, te cuento. ¿segura?

-¡Sí!

Digo a grito pelado

-Vale, vale. No te pongas así mujer.

Me rio y le saco la lengua. Después le apremio para que me cuente.

-Vale, a ver... es una historia un poco larga...

-Te escucho.

-Mira es que tengo un problema.
Se pone cada vez más nervioso.

Por favor que no vomite.

-No voy a vomitar.

-¿me has leído la mente?

-No, pero tu cara lo dice todo

Dice riéndose

-Bueno, va... es que me da vergüenza.

-No te preocupes. Sabes que puedes contar conmigo

-Lo se.

-Bien.

-¿me prometes que no me dejas?

Pongo los ojos en blanco.

-¡Obvio!

-Vale ahí va.

-¡Empieza!

-a ver... resulta que... ¡me hacían bulliyng!

-¡¿como?! ¡¿cuando?! ¡¿quien?!

Me enfado monton. No con el, sino con los (...) que le hicieron eso.

la fórmula de la felicidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora