Capítulo 24.- ¿Te acuerdas de mí?

152 17 0
                                    

NARRA CHARLES

Salimos de las habitaciones, Max se había quedado a dormir un buen rato, sinceramente no sé dónde había pasado la noche y me sentía culpable por eso, aunque sí estuvo todo el tiempo con Checo, creo que durmió calentito.

Caminamos rumbo al campo deportivo, era lindo caminar del lado de Carlos, era lindo estar con él, de pronto siento el calor de su mano envolver la mía, en un reflejo lo miro y me sonrojo.

Charles: ¿Qué haces? – pregunté.
Carlos: Te tomo la mano… ¿Qué no te gusta? Te suelto entonces.- dijo y se soltó del agarre.
Charles: Carlos “Princesa” Sainz. – dije volviendo a tomar su mano. – creí que aun tenías una reputación que cuidar, es solo eso.
Carlos: Sí, pero aquí nadie nos conoce ¿Si te das cuenta no? – sonrió, como solo él sabe hacerlo, remarcando esos hermosos hoyuelos.

No hablamos más y seguimos caminando agarrados de la mano, llegamos al campo deportivo, pero… al parecer el entrenamiento ya había terminado, ya que todos los jugadores estaban sentados, entre ellos Checo, quien solo hacía ademanes pasando el dedo de su mano por su cuello y señalando a Carlos, creo que quería decir que estaba muerto, de pronto se acercó a nosotros el entrenador y solté su mano.

Charles: Creo que con él si tienes una reputación que cuidar. - dije haciéndome a un lado. – Carlos sonrió y caminó hasta el entrenador.

Pude escuchar cada regaño, cada amenaza, cada palabra hiriente de parte del entrenador hacia el español, en parte me sentía culpable por ello, el entrenador había dado un ultimátum, diciendo que lo sacaría del equipo, conozco perfectamente a Carlos y sé que el equipo era su vida.

Carlos asintió todo lo que el entrenador decía y después le dio la espalda, él solo agachó la cara ante tal acción y caminó hasta mí.

Charles: Lo siento. – dije abrazándolo, el correspondió el abrazo, sin importar que sus compañeros de equipo lo miraran.
Carlos: No es tu culpa, él siempre ha tenido ese carácter contra mí. Creo que nadie me soporta. – dijo y me regaló una sonrisa forzada.
Charles: Tenemos que hablar sobre eso Carlos.

NARRA CARLOS
Sabía que cuando Perceval decía “tenemos que hablar” sería para un tema bastante serio, asentí ante su petición y caminé con él en dirección del hotel nuevamente.

Charles: Quiero hablar sobre dos temas importantes. – dijo deteniéndose en la entrada de un restaurant. – Desayunemos, yo invito, no hemos comido nada desde que llegamos.

Carlos: Ayer te comí a besos y también a tus hijos. – le guiñe un ojo y sonreí, quería quitar un poco de tensión.
Charles: Carlos, esto es serio. – dijo tratando no reír.
Carlos: Esta bien entremos. – dije abriéndole la puerta, ambos entramos y nos sentamos en una mesa junto a la gran ventana de vidrio.

Ambos ordenamos un desayuno sencillo y un par de malteadas, Charles colocó sus brazos sobre la mesa y comenzó a hablar.

Charles: Necesito que me cuentes sobre Jess Hamilton. – dijo sacando el tema que menos quería escuchar en cualquier momento.
Carlos: Estúpido Checo - bufé.
Charles: ¡Hey! No fue Checo, tú mismo fuiste. – dijo mirándome.
Carlos: Nunca te hablé de ella. – dije dudoso ante mi afirmación.

Charles: Anoche que dormías, susurraste su nombre unas 5 veces, iba a despertarte, pero después dejaste de hacerlo y entonces lo dejé pasar. – cerro los ojos. – en realidad no lo dejé pasar, si no, no te estuviera preguntando sobre ella. Tampoco quiero que creas que son celos, aunque sé que estoy en desventaja contra una chica. – dijo todo al mismo tiempo, me di cuenta de lo idiota que soy.
Carlos: No creo que deberías tenerle celos a una chica muerta. – susurré. Él había escuchado, tenía que aprender a susurrar.

Charles: Ou… - expresó.
Carlos: Si, Ou. – repetí su expresión.
Charles: Oye no lo sabía, soy un idiota por sacar el tema, de verdad, dejemos el tema como cerrado ¿Quieres?

Carlos: Yo quiero contártelo sabes, quiero que sepas porque a veces tengo el carácter tan explosivo. Yo quiero que entiendas. – tomé sus manos. Charles sonrió y asintió.

Bien pues, para empezar, quiero que sepas que ella y yo fuimos novios, ella era muy dulce, la relación al inicio fue hermosa, pero después me aburrí. Me porté como un idiota con ella, le era infiel, y ella siempre estuvo ahí para mí, aunque yo no para ella. Supongo que crucé su límite y comenzó a hacer lo mismo que yo hacía, ignorarme, serme infiel, portarse como me portaba yo, como un idiota.

Traté de recuperar a la chica dulce, pero ella… bueno, me dio mi merecido y me trató como la mierda que soy, se volvió muy fría y a veces sus insultos eran insoportables y bastante hirientes, la noche de su muerte, tuvimos una discusión, ella me había llamado basura y estorbo para todos, que era un poco hombre, yo le dije “No tienes derecho de hablarme así en mi casa” así que la obligue a salir, la subí a mi auto y nos fuimos de ahí.

Charles: ¿Tú la mataste? – preguntó viéndome con temor.
Carlos: Claro que no Leclerccito, sería incapaz. Cuando íbamos en el coche, ella seguía reprochándome cosas, así que… bueno la obligué a que bajara del auto, en una carretera en medio de la nada, entonces yo di vuelta y regresé a casa.

Charles: ¿Entonces qué pasó? – pregunta con curiosidad.
Carlos: Al siguiente día la encontraron muerta a unos metros de donde yo la había dejado. Tal vez si ese día no me hubiese enojado con ella, seguiría viva. – dije derramando lágrimas.

Charles: Carlos, no fue tu culpa, además… ella era una perra, sé que yo también te traté de esa manera, así que me disculpo.
Carlos: Tenia muy bien merecido tu trato Perceval.
Charles: Yo nunca te trataré mal, porque Carlos, no sé si ya lo he dicho antes, pero yo siempre he estado enamorado de tí.
Carlos: Que yo recuerde, nunca me lo habías dicho, pero se siente bien escucharlo. – sonreí.
Charles: Tú solo debes dejarte querer y serás muy feliz conmigo.
Carlos: Y bueno, te toca, sé que estas enfermo Leclerc, pero no sé en realidad toda la historia. – dije para comer el primer bocado del desayuno cuando una voz no interrumpió.

******: Hola Carlos Sainz, ¿Me recuerdas?

"Tú Y Yo, Juntos..." Charlos adaptacion.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora