"Tú Y Yo, Juntos..." Charlos adaptacion.

Capítulo 11.- Visita médica.

NARRADOR OMNISCIENTE

Leclerc sentía un cosquilleo en su interior, cuando al bajar del auto Carlos había dado una pequeña palmada en su trasero, este rio y escuchó susurrar a Carlos "Debo acostumbrarme a la falta de trasero" a lo que Charles volteo indignado, y respondió "debo acostumbrarme a la falta de chiste buenos".

Leclerc bajó completamente, despidiéndose de Carlos con un choque de puños.

El menor se adentró al colegio y fue directamente a la segunda sección, donde estaban los salones de terceros y cuartos.

Al entrar al salón, pudo ver un asiento libre, que Max estaba apartando, Max quería saberlo todo, eso era más que obvio, la impaciencia se notó en sus acciones al ver al menor acercarse.

Max: Siéntate y cuéntamelo.

Leclerc: Eres bastante metiche, sabías..? - sonrió. Terminó contándole todo lo que había sucedido entre Carlos y él y lo hermoso que había sido todo, el chico aún no se la creía.

Max: Lo traes comiendo de tu mano. - comentó este al escuchar el final de la primera parte de su historia.

Leclerc: Creo que Carlos siente algo por mí. - dijo el menor muy emocionado a su amigo Max.

Max: Pues habrá una fiesta hoy en la noche, hasta donde sé, Carlos ira, creo que deberías ir.

Leclerc: Estaré ahí, solo por él. - sonrió.

Max: No estarás en ninguna fiesta sin antes ir a tu cita al doctor, ¿Lo recuerdas? Es viernes Leclerc.

Leclerc: ¿Para qué seguir yendo a una estúpida cita con un doctor que solo te da el recordatorio de lo poco que te queda de vida? - dijo el chico en una racha de tristeza.

Max: No tengo respuesta para eso, lo siento. - bajó la mirada.

Leclerc: Yo lo siento, es que el solo hecho de pensar que en unas semanas...

Max: No lo digas. - dijo con tristeza en su voz. - No quiero perderte Perceval, haz sido mi amigo de toda la vida. - los ojos del mayor se comenzaron a cristalizar.

Leclerc: Vamos Max, tú no eres así, sé que superarás esto. - dijo tratando de levantar los ánimos de su amigo, regalándole una linda sonrisa.

Max: Pero no puedes morir virgen. - secó sus lágrimas. - si ese Carlos para el fin del mes no te ha tocado ni un pelo, tendrá que entrar Max en acción. - sonrió.

Leclerc: ¡Max! - dijo avergonzado. - No digas esas cosas, no me imagino a ti y a mí en la cama. - bajó su mirada ocultando sus mejillas sonrojadas. Dicho comentario había sido realmente falso, Leclerc se había imaginado mil veces como sería hacerlo con su mejor amigo, después de todo Max no era para nada feo.

El profesor entró, interrumpiendo la conversación que estaban teniendo ambos chicos. Las clases pasaron y Leclerc acompañado de Max, asistió a su visita de cada viernes al médico.

Dr. Horner: Debo decirte que te ves mejor esta semana, pero no te daré falsas ilusiones.

Leclerc: Voy a morir de igual manera, solo está haciendo de mis últimos momentos más cómodos, lo se doctor, es lo que me dice cada vez que vengo aquí.

Dr. Horner: Y aun moribundo tu sarcasmo sigue intacto, creo que vamos bien. - me sonrió. - Charles, trataré que tus últimos momentos sean lo más cómodos posibles, no quiero que termines en un hospital, esos lugares son muy horribles para morir.

Max: No maquille las cosas por favor Doc.

Dr. Horner: Bien Max, quiero que me cuides muy bien a este muchacho y lo que sea que estés haciendo, sigue así, hoy miro un brillo en sus ojos.

Max: Lo haré doctor. - dijo Max en último instante, después se despidieron y salieron de ahí.