𝗠𝗢𝗖𝗞𝗜𝗡𝗚𝗝𝗔𝗬²

xvi.

AL SALIR DE ESA ESTUPIDA PLAYA PUDO RESPIRAR EN PAZ YA QUE ESTABAN FUERA DE PELIGRO por el momento, no aguantaría otra cosa más en esos instantes, extrañaba estar en su hogar libre de todas esas cosas.

-  ¿Además de Enobaria y Brutus quien más queda? - pregunta Katniss

- Quizás Chaff, me sorprende que haya sobrevivido ya tanto - responde

- Los superamos en número, dudo que vayan a atacar otra vez, esta playa es segura - opina Finnick

- ¿Y qué hacemos los cazamos? - cuestiona Johanna

Rodó los ojos y fue cuando escucho un grito, era Peeta suplicando por la ayuda de él y de Katniss así que ambos sin dudarlo corrieron hacia donde creyó estaba la voz de rubio, no, su hermano no podía sufrir, él no.

En un punto perdió a la niña de su vista quedando solo en la jungla, volteo por todos lados buscando algún rastro de Everdenn o de su hermano, pero en cambio escucho otra voz, era una que ya hace años no había escuchado.

- ¿Mamá? - susurra - ¿Mamá? -

Al voltear se asusta cuando al frente suyo estaba una mujer de cabello rubio platinado, ojos azules como su hermano Peeta y una sonrisa amable.

- Hola mi niño - sonrío la mujer

- No - niega con su cabeza - No eres real, tu moriste, yo te vi -

- ¿No somos reales para ti, Xanthos? -

Era idéntico a ella, el cabello castaño ligeramente ondulado, las facciones finas como ojos verdes... Era igual a su abuela Rosemary.

- No - susurra viendo como la mujer castaña se queda al lado de su madre

¿Así que se parece a ambas?

- Para nosotras si - habla su madre - Para nosotras eres lo más preciado que existe en esta vida mi niño -

- Tú eres mi legado querido Xanthos - ahora habla su abuela - Mi sangre, mi querido nieto y realmente estoy tan triste por saber que estas aquí, en estos juegos sacrificando tu vida por tu hermano Peeta, el pequeño sol -

- Alto, dejen de hacer eso - da varios pasos hacia atrás - No son reales, ambas están muertas -

Cuando trato de irse algo parecía detenerlo, era una especie de campo de fuerza donde estaba atrapado con esas dos ilusiones de mujeres que debieron de ser importantes para él, pero se fueron demasiado pronto. Al elevar la mirada pudo notar a todos llegar y quedarse quietos, parece que ellos sí pueden escuchar y él no a menos que griten.

- No para ti - ahora dice la castaña - Estamos muy vivas en tus pensamientos, mi dulce niño -

- ¡Dejen de llamarme así! - grita con ira - ¡No soy un niño pequeño que necesita a su madre o abuela, crecí más rápido que cualquiera porque soy mejor! -

- No eres mejor mi niño, solo eres un niño herido como todos ellos - su madre interrumpe

- Tan parecido a nosotras ¿No crees mi niña? - murmura Rosemary - Pero es idéntico a él -

- No me compares con él - susurra tensando su mandíbula

- Pero lo eres -

- No lo soy -

- Si lo eres, tienes la misma mirada a pesar de tener mis ojos, eres su sangre y siempre correrá esa crueldad en ti -

- ¡No soy Snow! - grita lanzando un cuchillo - ¡Nunca lo seré! Yo nunca mataría a alguien a quien amo, yo moriría antes por todos que asesinar a quienes me importan por algo estoy aquí -

- Eso mismo me decía a mi y mira como termine -

¿Es como Snow acaso? Así de ambicioso fue él como para destruir a quienes amaban esa destrucción.

- ¿Me parezco a él? - murmura

Lo que él no sabía es que dentro de esa trampa había una toxina que podía llegar a desmayar a sus víctimas, eso pasó con él mientras lo último que veía era a su madre como abuela cuidar y hablarle con dulzura mientras pensaba en sus palabras ¿Acaso esa era la razón por la cual Snow lo apreciaba? ¿Por qué le recuerda a él? No, él no quería ser como él, no deseaba ser como su abuelo.

Xanthos había sido marcado por la horrible muerte de su madre, el abandono emocional de su padre, la llegada de una nueva figura femenina que aún no se acostumbraba a necesitar al igual que el rechazo de su distrito en su niñez teniendo solo a su hermano pequeño que era todo para él, lo que vivió en la arena tampoco ayudó y menos saber la verdad sobre su origen, era solo un niño herido que se cubrió con la manta de alguien fuerte hasta llegar a convertirse en ese mismo o al menos eso creyó ya que ver su pasado era tan doloroso que hacia que volviese a ser ese mismo niño que en realidad rogaba por la vida de su madre mientras la veía morir con un gran charco de sangre a su al rededor.

Mientras que en el Capitolio se formaba un gran revuelo, ya todos los ciudadanos de Panem conocían la verdad y esa era que Xanthos Mellark era el nieto del Presidente Snow y parecía que conocía la verdad ¿Qué clase de hombre enviaba a su propia sangre a la arena? Era demasiado cruel y si así era con su propia sangre ¿Qué les esperara a ellos?

En cambio Peeta veía todo cerca de Haymitch... Él era también nieto del Presidente Snow, toda su vida se había basado en una mentira.

En la casa Presidencial padre e hijo peleaban a gritos debido a la situación y es que Cassius era un niño de mamá siempre apegada a ella y sintiéndose solo después de su muerte, ahora lo poco que quedaba de ella era su hija Esme como su sobrino Xanthos que estaba entre los brazos de sus compañeros mientras inconscientemente soltaba lágrimas y desde el principio en cuanto supo que era su sobrino trato de sacarlo de los juegos o algo, pero su padre lo impide al seguir teniendo sospechas, pero era una copia suya y ese era el problema, conocía lo manipular como astuto que era así que su nieto era igual a él, Xanthos era todo lo que alguna vez quiso en un hijo teniendo la apariencia de la única mujer que logró amarlo, pero teniendo sus cualidades y eso era un gran dolor para Xanthos.