A LA SEGUNDA VA LA VENCIDA

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Unos días después, por la tarde, mientras os acomodabais en el sofá, de repente te acordaste. Era día 21
- Pero Ruslana - le hiciste un puchero, fingiendo un enfado - se te ha olvidado?
- Se me ha olvidado? - preguntó riéndose, pero le cambió la cara al darse cuenta - ay amor
- Hacemos cuatro meses y se te olvida? - cruzaste los brazos y le diste la espalda jugando con ella
- A ti también se te había ido eehh - dijo haciéndote cosquillas mientras te aguantabas la risa - felicidades mi amor - te abrazó por detras llenandote de besos
- Pero yo me he acordado antes - respondiste chinchona
- Te has enfadado? - te seguía el juego
- Sí - volviste a cruzar los brazos - ya me lo puedes compensar
- Qué te parece si nos tomamos mañana un día de relax? Algo así como... desconectar de todo. Nada de redes sociales, nada de trabajo, solo nosotras.

Te brillaron los ojos al escucharla. Llevabais semanas inmersas en una vorágine de compromisos, y la idea de tomarse un respiro juntas te parecía casi un sueño.
- Qué tienes en mente? - le preguntaste, intrigada y entusiasmada.

Rus te miró, dejando que una sonrisa pícara se dibujara en su rostro.
- Ya verás. Solo confía en mí.

A la mañana siguiente, Rus te despertó temprano. Te costó levantarte, había sido una noche intensa. Salisteis de casa con mochilas ligeras, sin más indicación que la promesa de un día juntas. Te llevó a un lugar que conocía bien: un bosque en las afueras de Madrid donde solía escapar cuando necesitaba claridad y calma. Sabía que era un sitio perfecto para el plan que tenía en mente
- Un bosque? - preguntaste, divertida - No te imaginaba como una aventurera de la naturaleza.

Rus rió, tomando tu mano mientras te adentraba en el camino.
- Todavía hay muchas cosas de mí que no conoces - respondió, guiñándote un ojo.

Después de una hora de caminata, llegasteis a un claro junto a un pequeño lago. Rus se sentó en la orilla y te hizo señas para que te unieras a ella. La imagen era casi surrealista: el reflejo del agua, el canto de los pájaros y el silencio compartido entre ambas.
- Gracias por esto, Rus. Creo que no lo sabía hasta ahora, pero necesitaba un día así.

Rus te miró, su expresión suave y amorosa.
- Quiero que tengamos más días como este. Que no todo sea caos y carreras, que podamos tener momentos de calma donde solo seamos tú y yo.

Y entonces, sin previo aviso, Rus se levantó y, antes de que pudieras reaccionar, ya estaba metiéndose al lago, salpicándote con el agua.
- Estás loca?! —le gritaste entre risas, retrocediendo instintivamente, pero era demasiado tarde; Rus te había alcanzado y, en un movimiento rápido, te tomó de la mano y te jaló al agua con ella.

Ambas estallaron en carcajadas, chapoteando y esquivando las gotas que lanzabais en pequeñas "batallas". Ese momento de simpleza y diversión era como una bocanada de aire fresco que llenaba cada rincón de su alma.

Después de un buen rato, saliesteis del agua y os tumbasteis en la hierba, mirando el cielo, todavía empapadas y riendo por lo absurdamente perfecta que había sido aquella improvisada "aventura".
- Recuerdas cuándo fue la última vez que tuvimos un momento así? - preguntaste, mirando las nubes mientras te secabas al sol
- Buf! - resopló y os reísteis - Siento que siempre estamos corriendo, y estos momentos se nos escapan

Esa noche, de vuelta al dúplex, Rus te propuso cocinar juntas. Os movíais en la cocina con una naturalidad sorprendente, compartiendo risas y pequeños roces, como si ese espacio os perteneciera solo a vosotras.

Al terminar la cena, os sentasteis en el sofá, agotadas pero felices. Rus apoyó la cabeza en tu hombro, y tú rodeaste sus hombros con un brazo, atrayéndola hacia ti.
- Gracias, Rus. Por todo - murmuraste, sintiendo que las palabras apenas alcanzaban a expresar lo que realmente sentías.

Ella levantó la cabeza y te miró, acariciando suavemente tu mejilla
- No, gracias a ti, por darme un lugar en tu vida, por darme otra oportunidad - dijo, mirándote con intensidad
- Está claro que a la segunda va la vencida
- Sí - se rió - espero que no haya que probar la tercera
- Eso no va a pasar Rusli

RUSLANA Y TN OT2023 | EL DÚO PERFECTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora