rivales ✧ jikook

Capítulo 27

Jungkook POV

─¿Qué haces?

Miro desde el espejo que estaba usando para anudarme la corbata hasta donde Jimin está de pie en mi puerta vestido con... Vaqueros.

Maldita sea.

─Cambiándome, claro─, murmuro, me quito la corbata del cuello y agarro unos vaqueros y una camiseta térmica del armario. Lo único peor que ir mal vestido para una ocasión es ir demasiado arreglado.

─¿Ropa de vestir solo para ir a cenar? ─ reflexiona Jimin, entrando en mi habitación y cerrando la puerta tras de sí.

─¿Te has olvidado del mundo del que vengo? ─ Le miro por encima del hombro mientras me desabrocho la camisa y la vuelvo a colgar─. Cuando era pequeño, llevaba traje y corbata para cenar.

Su nariz se arruga como a mí me gusta. ─ Suena jodidamente terrible.

No estaba tan mal. Al menos no la parte de la ropa. A veces es bueno vestirse de punta en blanco. Era la compañía de la que podría haber prescindido.

─¿Cómo entraste aquí? ─, pregunto, cambiando de tema mientras me despojo de mis calzoncillos. Siento la mirada penetrante de Jimin en cada centímetro de piel visible, lo que me pone la piel de gallina.

─Eunwoo─, es todo lo que dice, y cuando levanto la vista, lo encuentro cruzando la habitación y tomando asiento en mi cama. Tiene una mirada pensativa antes de añadir: ─ La verdad es que no parecía muy sorprendido de verme.

Este es el momento que he estado temiendo, y no tiene nada que ver con la ansiedad de encontrarme con su familia para cenar.

─Probablemente, porque... Lo sabe.

La reacción de Jimin no es la que esperaba. Estaba casi seguro de que se enfadaría y cancelaría todo. Que es exactamente lo último que quiero en el mundo, de ahí mi retraso en decírselo.

Pero no se enfada. De hecho, sonríe un poco y niega con la cabeza. ─Se ha dado cuenta, ¿verdad?

Asiento con la cabeza y me pongo unos vaqueros oscuros. ─ Nunca le mencioné nada, obviamente, sin embargo, últimamente te ha visto mucho por aquí. Supongo que de algún modo sumó dos más dos. Dijo que, si vamos a seguir follando como animales salvajes a todas horas de la noche, tenemos que llevar la fiesta a tu casa de vez en cuando.

Omito la parte en la que Eunwoo nos pilló besándonos hace unas semanas, lo que se confirmó cuando mencionó que sabía que Jimin y yo nos acostábamos. Y la única razón por la que no había dicho nada era porque quería que yo le dijera algo primero.

Pero entonces le impedimos dormir decentemente demasiadas veces, y no pudo callarse más.

Una risa aguda e incrédula sale de Minnie. ─ Maldita sea.

Me meto los brazos en una camisa nueva y me la tiro por la cabeza. ─ ¿No te importa que lo sepa?

Si soy sincero conmigo mismo, me alegro de que alguien lo sepa. Lo hace un poco más real. Aunque sé lo que piensa Jimin de que esto quede en privado, entre nosotros.

Por eso el movimiento de su cabeza me pilla por sorpresa.

─Nos engañábamos pensando que absolutamente nadie se enteraría. Y si confías en que se lo guardará, por mí está bien. ─ Hace una pausa, agarrando la snapbacK apoyada hacia atrás sobre su cabeza ─. Es mejor que todos mis compañeros de piso se enteren, ¿sabes?

Sí, estoy seguro de que a Jackson en particular le encantaría saber que su mejor amigo se está tirando a mí de siete maneras hasta el domingo.

Me retuerzo los dedos mientras vuelvo a arreglarme el pelo en el espejo, sintiendo una ligera irritación. Claro que tendría que cambiar lo que llevo puesto y estropearlo cuando acabo de conseguir que quede como a mí me gusta.