One- Shot Gay de F1, si!!!

Esas caderas tienen dueño.

Universo Alterno.

Maratón 2 de 2. 

+18

El deporte es una parte importante en la vida cotidiana de la gente, ya sea para mantener su cuerpo en forma o solo disfruten verlo.

Cada persona en el mundo conoce alguno de los miles que ahí. Por eso, existe una federación que los celebran y alaban, a demás, también es una oportunidad para los atletas de sentir su orgullo patrio representado a su país: Los juegos olímpicos.

Cada cuatro años los mejor atletas de cada rincón mundial se enfrentan entre sí por medio de reglas y espíritu deportivo para coronarse como los mejores.

 Max Verstappen era de esos los cuales los disfrutaba en la comodidad de su sofá, hasta que lo conoció en la universidad.  Sergio "checo" Perez hijo del multimillonario Antonio Perez y el distinguido  Anthony  Hamilton era gimnasta profesional. En cuanto lo vio, Verstappen quedó flechazo no por esos hermosos ojos chocolate, ni ese pelo rebelde digno de pasarelas o no, él chico gracias a su deporte tenía un nalgon que uffs.

Al inicio, Max solo planeaba conocer al gimnasta para una salida sexual y ya.

Su sorpresa fue cuando en su primera cita quedó maravillado por su personalidad: era tan alegre como un canguro, brincando por todas partes, su sonrisa iluminaba hasta el rincón más escondido, era hablador, para Emilian, como un perico de feria pero encantador.

El rubio con un sentido del humor bastante cuestionable y carácter temperamental no pudo evitar interesarse por él.

Tanto que llevaban dos años saliendo, siendo esta su primera vez mirando a su novio calificar a los olímpicos.

Sergio en su país natal era un fenómeno sensacional, siendo la primera persona en la historia de la ciudad con una medalla olímpica. Su hombre compitió por primera vez a los catorce años ganando la de plata, a los dieciocho logró la de bronce, este sería su tercer año y estaba esforzándose hasta el límite para traer el oro.

Max lo conocía, podía verlo desde las gradas jugando con sus manos de nervios. Era esencial para su novio ir a los juegos, claro que entendía como se sentía, "Leoncito ¿Qué pasa si no soy tan bueno y no clasificó? ¿Crees que la gente me odie?" El rubio tuvo que calmarlo, su lindo pajarito no merecía abrumarse pero justo ahora en la competencia lo veía colapsar, para su fortuna estaba preparado.

Tomo el enorme cartel para animarlo.

-Chicos, griten.

Los hermanos menores del gimnasta sostuvieron el cartel que decía:

"Vuela, checo, ¡eres el hombre!"

-¡Venga hermano!- le grita emocionada su hermana Paola.

-¡Hermanito, Hermanito!- Antonio no se queda atrás.

-¡Si se puede!- su hermano mayor Lewis le apoya eufórico- 

Sus otros amigos Fernando y Franco hacen sonidos eufóricos.

Su papa Anthony  y Max silban en su honor.

Sergio los saluda animado deteniéndose en la banca vacía al lado de su padre.

¿En serio no fue de nuevo?  Checo bajo su mirada siendo notado por Max.

Siempre la tristeza de su pajarito era por la misma persona: Antonio Perez Garibay. 

No podía entender como ese hombre nunca se daba tiempo para su familia, su amado nunca perdía la fe en verlo en una de sus competencias pero siempre nunca pasaba.

Max y Antonio discutieron por eso: él joven llegó a la oficina del multimillonario reclamándole por no asistir a un evento del gimnasta y hacerlo llorar, las cosas escalaron cuando ambos empezaron a gritar se, el mayor le prohibió ser pareja de su hijo a la cual Emilian se burlo. Para él empresario fue imposible convencer a su cría mayor de dejar al motociclista, si bien, agradecía que amarán a su hijo no le gustaba ser retado.

Y al parecer otra vez discutirán.

-Señor Tony- él nombrado volteo ver al joven alto- está vez ¿Por qué no vino?

-Tenía una junta importante.

-¿Y su hijo no lo es?- arqueo una ceja, el afrodescendiente mayor  volteo a verlo- es increíble que le haga esto...otra vez.

-No pude convencerlo- dice apenado él único padre presente- es muy terco.

El motociclista estaba por reclamar cuando Paola llama su atención- es el turno de Sergio. Si a completa su rutina de salto pasa a los olímpicos .

Max respira tragándose su frustración dirigiendo su vista a su novio- ¡Vamos cariño, tú puedes!-agita el cartel-

Solo le decía pajarito cuando ambos estaban solos, nadie tenía que oír el lindo apodo, además, podía sonar morboso y lo que menos quería era darle a Internet un arma en contra de su novio.

El pelinegro corrió a toda velocidad para impulsarse en el pequeño trampolín colocando sus manos en el caballo, en el aire completo tres giros cayendo exitosamente con ambos pies dando la espalda al público. Lo hizo.

Al girar vio a su familia gritando en su honor.

El resultado fue de ensueño...volvería a los juegos olímpicos.

Después de la cena realizada por su papá Tony, fue al departamento de su novio.

Ambos venían tonteando hasta llegar a la puerta, una vez a dentro, Max le hizo chocar con esta en su espalda.

-Estuviste excelente, como siempre- le besa mordiendo su labio superior-

-Me estabas mirando, no podía fallar-Perez movió su pelvis con la contraria creando fricción- todos ustedes me dan fuerza.

-Eres tan talentoso- el rubio quito la parte superior de ambos cuerpos para poder besarlo en su ancho pecho- toda la grada gritaba tu nombre.

Sergio aprovecho para desnudarles de la parte inferior para poder tomar del trasero al más alto creando una excitante fricción sus penes.

-Que curioso, en este momento soy yo quien desea gritar tu nombre- muerde su oído izquierdo para dejar un camino de saliva con su lengua hasta el cuello y morderlo.

-Eso me gusta- Emilian escupe en su mano para empezar a masturbarlos- vi al idiota de Carlos Sainz gritándote- aumenta el ritmo dando un tirón brusco sacando un pequeño gemido del mirada oscura- pobre imbécil.

Era de conocimiento popular sobre la atracción que sentía el español por el gimnasta.

-¿Celosito?- el tonito seductor del más bajo le gana una mordida en uno de sus pezones.

-Jamás- voltea de forma brusca a su novio, recorriendo con sus manos la suave piel- estas caderas son mías- las toma firmemente- solo mías- se corrige.

Baja su rostro al ano del contrario para comenzar a lamer.

Definitivamente no podía esperar al verlo competir en París, Sergio no podría caminar después de su competencia.

Dedicado a Lia_Mccal, te agradezco infinitamente por unirte a la celebración de dos añitos de nuestro One-Shot. 

Les doy muchas gracias a todas las personas que leen, votan y comentan esta historia. El 15 de Noviembre del 2022 iniciamos con esta aventura y a sido un honor escribir para ustedes.

Les quiero.