Pulsos y besos

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Narra Aria.

Ares se ríe y se pone de pie, solo lleva unos pantalones como los míos, lleva el pecho y sus tatuajes al descubierto, ¿No tiene frío?

–Pero para que si sabes que siempre gano –Dice orgulloso de su fuerza.

–Me la pela, he estado entrenando. –Se levanta la manga y aprieta los músculos del brazo, si, buen brazo 7/10.

Ares se vuelve a reír de su hermano, levanta el brazo y aprieta los músculos del brazo, se le marcan las venas.

1000/10

Hago un sonido bajo de que me gusta lo que veo, pero en ese momento todos se callan y se me escucha de sobra.

Ahora sí se ríen, ahora sí hacen ruido los cabrones.

Ares me mira con una sonrisa ladina.

–Venga me parece bien, Aria es árbitro.

–¿Y por qué ella? –Dice Viktor.

–Porque está claro que va a perder –Me pica Antón.

–Aria juega –Suena la voz amenazante de Ares.

–Yo no he dicho nada –Aqui mi pedazo de opinión, no se está teniendo en cuenta.

–Todos contra todos, el que gane se acuesta con Aria. –Dice Apolo.

Al escuchar esto mi sonrisa se borra.

Ares actúa como un verdadero adulto y agarra a su hermano por el cuello ahogándolo.

–Te mato –Advierte, suelta a su hermano que tose riéndose en el sofá al lado de su padre –El la toque tiene pase gratis al infierno.

Nadie se atreve a decir nada, menos Apolo que ya sabemos que tiene pocas luces.

–Vale, pues un buen morreo.

Ares se va contra su hermano pero este se abraza a su padre.

–¡Pero si vas a ganar tú! –Ares se calma y reflexiona sobre sus actos.

–Bien, con la condición de que si no gano yo no la besa nadie.

–Pero no val... –Interviene Ray, Ares levanta el puño y este se calla de inmediato.

–Aria, ¿Estás de acuerdo? –Me pregunta Ares, me encanta que no tome decisiones sin preguntarme.

–Vale –Digo desconfiada.

–Tranquila que nadie que no sea yo te va a besar.

–Tampoco pensaba permitirlo –Ares que me daba la espalda se gira sonriendo, me agarra de la cintura y me besa.

–Ooo el amor –Se burla Antón.

–Bueno empecemos –Dice Ares.

Se colocan en una mesa, Aron, Viktor y Dante se colocan a mirar el juego mientras cuchichean como abuelitas.

Me acerco y pongo la oreja muy disimuladamente.

Me meto entre ellos y acerco mi cabeza a lo que estaban hablando.

–¿Estáis chismeando?¿Es bueno el chisme?¿Es para mayores o me puedo enterar? –Digo sonriendo.

Los tres se ríen y yo me acerco a los maricones que están ya preparados.

Apolo y Ares se preparan en la mesa.

–Una, dos... Ya. –Ambos tiran a lados contrarios.

A Ares se le tensan los músculos y las venas se empiezan a marcar de manera descomunal y eso que parece que apenas hace fuerza porque mira a su hermano con una sonrisa burlona y está totalmente quieto a diferendo ad emi cuñado que parece que le está dando algo.

Mi Reina (2° libro de la Trilogía Mia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora