JongIn estaba feliz el día de su boda. Creía que se casaba con el Alfa perfecto, pero el destino le tenía una desagradable sorpresa. Minutos antes de la ceremonia, encontró a su prometido,"el amor de su vida " en la cama con su hermano menor.
Jong...
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Los meses transcurrieron tan rápido. JongIn ya mostraba una barriga de 7 meses, no era muy grande pero no podía ya pasar desapercibido su embarazo. Y tampoco es que fuera su deseo que eso sucediera, él estaba muy feliz con la espera de su cachorro.
Durante la consulta obstétrica, el doctor estuvo apunto de decirles el sexo del bebé, pero JongIn pidió que lo mantuviera en secreto ya que deseaban que fuera una sorpresa.
De camino a casa, JongIn le pidió a su amado esposo que compraran pollo frito, tenía el antojo y últimamente comía el doble de lo normal, pero sabía que estaba comiendo por dos, así que no se preocupaba por eso.
Al llegar a su residencia, Sehun y Wonho ya los esperaban en su guardia habitual. JongIn le sonrió a ambos y ayudaron a meter las bolsas de comida.
Sehun había sido liberado hace un mes, pasó tiempo con sus sobrinos y por petición de JongIn, regresó a su trabajo como guardia de seguridad, aunque Chanyeol no estaba del todo de acuerdo, siempre era convencido por su omega. Sehun prometió ser fiel a su trabajo y a sus jefes, y estaba agradecido por esa nueva oportunidad.
AeRi tenía lista la cena pero al ver las bolsas de comida, entendió que debía guardarla para el día siguiente.
- Creí que estaría pesando el doble... No se a donde va toda la comida que consumo- comentaba a Chanyeol mientras devoraba una pierna de pollo.
- El bebé está recibiendo todo el alimento, por eso no aumentas de peso, además... Así te ves delicioso, tus caderas anchas me vuelven loco...
- Tranquilo alfa - lo detuvo JongIn - estamos comiendo y no es momento de pensar en eso.
- Está bien... Come tranquilo, iré a realizar una llamada urgente del trabajo - se levantó y caminó por el pasillo de mármol hasta su oficina privada.
JongIn seguía comiendo su pollo, como si no hubiera probado alimento en todo el día. Aunque estaban sus guardias, él se sintió solo. Las hormonas del embarazo lo mantenían sensible la mayoría del tiempo.
- ¿Se molestó?- cuestionó a Sehun, que era quien estaba más cerca de él.
- No lo creo, señor Park - respondió el alfa.
- No me digas señor... - puso un puchero prominente - además, ese alfa seguro fue a hablar con otro Omega... Tal vez ya no me quiere porque estoy gordo...- sus ojos se cristalizaron por la lágrimas apunto de salir.
- Definitivamente lo dudo - respondió rápidamente Wonho. Todos los guardias de seguridad sabían del amor y devoción que sentía el alfa por su esposo.
- ¿Ustedes que saben? Lo han visto hablando con alguien más bonito que yo... Tal vez una mujer o... Algún Omega más... adorable...?
- No... No lo hace... No debería preocuparse por eso- Sehun trataba de manejar la situación, sabían que podía formarse una tormenta en un vaso de agua, debido al estado del Omega.
