Yo te tomo. [Soonhui]

[25]

'Kwon Junhui.

—¿Dónde andabas? —pregunta Jeonghan—. ¿Y dónde está el pedazo de mierda de tu hermano?

Aparece un soldado en la puerta.

—No está aquí —dice.

—Encuentra al hijo de puta.

—¿Qué pasa? —pregunto.

Desmonta el arma y cambia su empuñadura para mirarla.
Exhalo, me toco el bolsillo con la mano, agradecido de que mi pasaporte no estuviera debajo de la almohada. Miro a mi alrededor y veo que Cerberus se ha ido.

—¿Qué pasa? —le pregunto de nuevo, cuestionándome si puede oír el pánico en mi voz
—. ¿Dónde está Soonyoung?

Abre la recámara de la pistola y deja caer las balas en la palma de su mano, guardándolas en su bolsillo y metiendo la pistola en la parte de atrás de sus vaqueros antes de volverse hacia mí. Me estudia durante un largo minuto, y necesito todo lo que tengo para no retroceder cuando cierra el espacio entre nosotros.

—¿De dónde sacaste el arma?

—Soonyoung me la dio. Devuélvemela.

Resopla.

—Sí, claro. —Con la palma de su mano contra mi vientre me empuja hacia la pared—. Eres un mentiroso, Wen Junhui. Al igual que el resto de tu familia.

Está a unos centímetros de mí y miro sus ojos unos tonos más oscuros que los de Soonyoung. Mi corazón está acelerado, pero necesito mantener mi rostro impasible, ilegible.

—Dudo que a tu hermano le guste saber cómo me pones las manos encima.

Su expresión cambia, algo triste pasa por sus ojos antes de que se endurezcan de nuevo.

—Soonyoung debería haberte matado el primer día.

—¿Dónde está? —pregunto.

La presión de su mano sobre mi vientre se intensifica.

—No actúes inocente. Eso pudo haber funcionado con mi hermano, pero no funcionará conmigo —dice con la mandíbula apretada. Es más fuerte que yo. Y quiere hacerme daño. Lo veo y necesito tener cuidado con él. Cambia su agarre a mis brazos apretándolos lo suficientemente fuerte como para saber que habrá moretones—. ¿Dónde está tu hermano, Junhui? —escupe mi nombre.

—Estás hiriéndome.

—¿Ah, sí? —Me hace girar, agarra un puñado de mi cabello y lo tira hacia atrás con tanta fuerza que dejo escapar un grito—. ¿Qué te parece esto, entonces? ¿Mejor?

Tengo una mano cerrada alrededor de su antebrazo, pero por la forma en que estoy torcido, no sirve de nada. No puedo moverlo.

—Soy el esposo de tu hermano —le recuerdo—. ¡Déjame ir!

—Él hizo lo que tenía que hacer por la familia. Esa es la única razón por la que eres su esposo. No interpretes mucho el hecho que te haya follado.
Eres un pedazo de culo. Eso es todo lo que eres. Todo lo que alguna vez fuiste. —Toma mi otro brazo y lo tuerce detrás de mi espalda. No creo que se necesite mucho para romper el hueso—. ¿Dónde está tu hermano? ¿A dónde desaparecieron ustedes dos?

—Vas a romperme el brazo. —Duele mucho—. Por favor.

—¿Cómo lo hiciste? —Su voz se quiebra—. ¿Cómo lo engañaste?

Mi corazón cae hasta mi vientre. ¿Quién engañó a quién?

—Jeonghan —Giro la cabeza tanto como puedo—. Por favor, dime dónde está. ¿Dónde está Soonyoung?

—Empecé a pensar que me había equivocado contigo, ¿lo sabías? Empecé a pensar que tal vez realmente te importaba mi hermano. Ese fue mi error.

—Me importa.

Me hace girar y me golpea con tanta fuerza contra la pared que mi visión se vuelve borrosa. Tengo que agarrarme a él para estabilizarme.

—Debería matarte. —Envuelve su mano alrededor de mi garganta.

—¿Dónde está? —pregunto mientras aprieta.

—A la mierda mi promesa. De todos modos, ya no importa. Debería matarte aquí y ahora

—¿Dónde está? —me las arreglo para decir, arañando su antebrazo mientras su agarre se aprieta.

Me levanta por la garganta, obligándome a ponerme de puntillas mientras baja la cabeza para que estemos nariz con nariz.

—¿Dónde está? —me pregunta, escupiendo las palabras. Mis uñas se clavan en su antebrazo, pero es inútil. No puedo respirar suficiente aire—. Está muerto, Junhui. Está jodidamente muerto.