*Dos años más tarde*
-¡Es que no es posible! Lleva casi dos horas ahí metida. ¿Amor?-Tú, tío. ¡Déjala! -Se escuchaba la discusión de Samuel y Guillermo a las afuera del baño.
-Chicos, saldrá cuando se sienta segura de informarnos o no...
-Claro, como tú no eres la que luego dará a luz.
-Samuel, estas siendo demaciado exagerado. Déjala tranquila. -Solo se escuchaban sus griterios por toda nuestra casa.
Si, nuestra casa. Hace un año, Samuel y yo nos casamos. Nos hemos venido a vivir juntos, y con Guillermo. Sonará raro, pero es un muy buen amigo de nosotros como también Emily, su novia.
-¿Cómo quieres que la deje tranquila? Estas loco, Guillermo.
-La pondrás más nerviosa. -Se escuchaba todo tipo de golpe. Salí del baño con el test de embarazo en mis manos y mi cabeza gacha.
Era un silencio incómodo, ninguno de nosotros nos atreviamos a romperlo. Samuel tenía las esperanzas en sus ojos, así como Guillermo también. Mire el test y una lágrima rodó por mi mejilla, se lo acerqué a Samuel para que viera, "positivo". Me tomó por la cintura para besarme, mientras Guillermo gritaba de emoción como nosotros.
Se acercó a mi y acarició mi estómago, las lágrimas rodaban por sus mejillas, así como también por las mías. Guillermo comenzó a llamar a Marcela y a mi madre para que vinieran y darles la noticia.
Emily y yo, decidimos preparar la cena antes de lo previsto. Todos estarían aquí, será un duro trabajo. Cada segundo que pasaba me tocaba el estómago, podría llevar unas 24 horas embarzada, pero es como si llevara ya unos meses.
Al sonar el timbre, me acerqué para poder abrir y ver a ese chico que era otro brillo en mis ojos. Miguel había sido operado, sus piernas están bien y ha vuelto a caminar. Estaba abrazado de Marcela. Era como mi otro hijo.
-Pasen al living, en un rato estará la cena. Tengo muchas cosas que contar... -Marcela me miró extrañada, pero no dijo nada.
En la cocina se encontraba Emily, Guillermo y Samuel jugando con trocitos de galletas que quedaban sobre la mesa. Me miraron y siguieron haciendo sus cosas, pero no me detube y me les uní.
Pasaron unas horas y estábamos todos en la mesa, Guillermo propuso un brindis por estar todos juntos, y ahí fue cuando hablo.
-Familia, desde que ____ y yo comenzamos nuestra relación no fue fácil, hemos tenido nuestros altos y bajos. Pero hoy nos hemos demostrado que nuestro amor es puro. Es sano. Y para hacerlo demostrar ante todos ustedes, podemos informaros que... ¡¡ESTAMOS EMBARAZADOS!!
Al principio lo miraron extrañados, como si todo fuese una broma, pero luego me miraron a mi, mientras tocaba mi estómago. Marcela y mi madre se me acercaron y abrazaron. Miguel fue dónde Samuel y lo abrazo. Mi padre se levantó y con la copa en alto, hiso el brindis final para conmemorar dicha cena.
A los días siguientes, estábamos con Samuel en la habitación, deje mi móvil a un lado.
-¿Y como le llamaremos? -Me miró pícaro, y se sentó para vernos mejor.
-¿Cómo quieres llamarle? Yo quiero un chico... Samuel junior. -Lo miré graciosa.
-Esmeralda, porque sería como mi piedra preciosa... -Sonreí, pero me interrumpió.
-¡O Jade! -Sus caras me mataban, para cada palabra hacia un gesto diferente. Me reí.
-Si es un chico será Samuel Junior, pero si es chica será Esmeralda...
-Nuestra piedra preciosa... -Continuo él.
Unimos nuestros labios en un hermoso beso y nos recostamos sobre la cama, para caer en profundo sueño...
FIN.
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Sera difícil despedirme de esta novela, ya que fue la primera. Aquí el último, ahora si que si, capitulo de "Entrenador personal". Espero les haya gustado está novela, como a mi me gusto adaptarla y traerosla. Si teneis ideas para alguna otra novela con Samuel, dejenla en los comentarios, sería un honor saber que otros temas les gustaría. Las amo❤
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ENTRENADOR PERSONAL; Vegetta777 -ADAPTACIÓN-
Fanfiction____, de veinte años, está cansada de que el Instituto Elite Hillcrest le haga la vida imposible porque no es una talla dos. Este verano, ella contratara a un entrenador personal para ayudarle a perder peso. ____ no esperaba que su entrenador fuera...