El amor a veces duele. (ADAPTADA)

Capitulo 74

El amor a veces duele.
Capitulo 74.



Días después.

Desperté por el sonido de mi celular. Mire la pantalla y era mi madre.

Tú: Hola mamá -Dije luego de un bostezo.
Valeria: Veo que te he despertado -Rió del otro lado- Perdona amor.
Tú: No hay problema -Reí adormilada- Se me hace raro que llames a esta hora de la mañana.
Valeria: Es que Candie quiere armar el árbol de navidad contigo, esta que llora y llora porque quiere que su hermana este aquí para que la ayudes -Dijo con gracia.
Tú: Ow -Dije enternecida- La traviesa me extraña -Reí.
Valeria: Demasiado, siempre pregunta por ti -Suspiré nostálgica sobre el teléfono, extrañaba mi hogar.
Tú: Dile a Candie que ahora voy a armar el árbol de navidad con ella -Dije sonriendo y pude notar como mi madre también. La conocía perfectamente.
Valeria: Esta bien cariño. Y no desayunes, yo te prepararé un delicioso desayuno para ti -Dijo emocionada.
Tú: Gracias mamá, te amo.
Valeria: Yo también te amo, cielo. Nos vemos en un rato -Dicho eso colgué.

Estire mis brazos para sacar un poco el cansancio. Mire al otro costado de la cama y estaba Justin dormido, amo verlo dormir. Besé su mejilla y luego me levante directo al baño.
Luego de esperar a que el agua tome la temperatura exacta, me adentre en la ducha, dejando que el agua se lleve cada rastro de sudor. Treinta minutos después salí de allí y me cambie: {} {La campera aún no} Luego peine mi cabello, lo seque para no salir con el cabello mojado, me agarraría un resfrío si no lo secaba. Deje mi cabello suelto y guarde todo. Me dirigí a la habitación a avisarle a Justin.

Tú: Amor -Susurre sobre su oído. El muy flojo seguía dormido- Amor -Lo moví un poco, ¡Pero dios! no se despertaba- ¡Justin, despiértate! -Grité chillona. Y él cayó al suelo del susto. Empecé a reír a carcajadas.
Justin: ______ no es gracioso -Dijo algo enojado. Yo volví a reír.
Tú: No te enojes -Hice un puchero, el solo sonrió. No puede contra mi.
Justin: Por lo menos dame un beso de disculpa ¿No crees? -Dijo levantandose del suelo y se acercó a mi.
Tú: Buenos días -Sonreí y bese sus labios.
Justin: Buenos días -Dijo entre besos- ¿A donde irás? -Dijo extrañado.
Tú: Ah, para eso te desperté -Reí- Para avisarte que iré a mi casa, Candie quiere que vaya a armar el árbol de navidad con ella.
Justin: La pequeña te extraña -Sonrió.
Tú: Parece que sí, hace días que no la veo, yo también la extraño -Suspire- Bueno, me voy amor -Agarre mi campera, las llaves de mi casa y mi celular- Nos vemos en la noche -Besé sus labios.
Justin: Pasaré por ti ¿Si?
Tú: Bueno -Lo besé nuevamente- Ahora sí me voy -Y dicho eso salí de la casa de Justin.

Al llegar a casa, no sabía si abrir con mis llaves o tocar el timbre. Estaba indecisa. Decidí por abrir con mis llaves, cerré la puerta y en el comedor no había nadie, luego me fije en la cocina, tampoco había nadie. Luego escuche unas voces, más bien risas, que provenían de la sala. Me dirigí a esta y si, había dado en el blanco. Era mi familia, mi madre y mi padre jugando junto con Candie, miraba a mi padre como cargaba a Candie y la hacía 'Volar'. Siempre me lo hacía a mi de pequeña. Sonreí al ver la escena, luego el ruido de mis zapatos hicieron que los tres se percaten de mi presencia.

Valeria: Cariño -Dijo ella sonriente y me abrazó.
Candie: ¡______! -Dijo mi hermanita contenta y salto a mis brazos- Te he extrañado mucho ¿Porque ya no estás en casa? -Dijo algo triste.
Tú: Pequeña, yo también te extrañe mucho -Bese su mejilla. Y evadí su pregunta. Luego mire a mi padre que estaba algo serio. Su cara cambio solo al verme. Moría por tan solo un abrazo suyo- Hola papá -Sonreí a medias, esperando aunque sea una respuesta fría.
Thomas: Hola hija -Dijo algo serio, pero más sereno- ¿Cómo estás? -Pregunto desprevenidamente, realmente esperaba a que me dijera un 'Hola' y fin de la conversación.
Tú: Supongamos que bien -Sonreí a medias- ¿Y tú?
Thomas: Bien -Respondió sin más, sin menos y como siempre: Seco.
Valeria: Bueno -Dijo rompiendo un poco el silencio que se prolongo- Iré a servir el desayuno ¿Me acompañas, hija?
Tú: Claro -Sonreí.