Capitulo 96

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El amor a veces duele.
Capítulo 96.
Últimos capítulos.
—Arroro pedazo de mi corazón. Este niño mío, se quiere dormir— volvió a hablar con dificultad. Jared disminuía su llanto. Mis ojos se aguaron, ella estaba hablando. Recosté a Jared a su lado. Su llanto era más tranquilo —Y el pícaro sueño no quiere venir— sonreí al escucharla de nuevo— Este niño lindo, se quiere dormir. Cierra los ojitos y los vuelve a abrir— observe a Jared que había detenido su llanto y miraba a ____. —Justin, ya logré calmarlo— habló ella y una sonrisa se poso en sus labios. Sequé mis lagrimas —Te amo, Justin— dijo ella y lentamente abrió sus ojos y me miró entre dormida.
—Amor— dije mientras besaba su mejilla. Extrañaba escuchar su voz —Yo también te amo. ____ no me vuelvas a asustar así nunca más— la reprendí. Ella rió pero se quejo al hacerlo —No hagas esfuerzo, cariño— hablé yo y acaricié su mejilla. Ella me miraba.
—Perdóname— dijo, yo fruncí el ceño.
—¿Que debería perdonarte, ___?
—Por haberte dejado solo durante todos estos días. Gracias por venir a visitarme siempre, por cuidar de mi. Enserio eres lo mejor que me ha pasado, quería hablarte mientras estaba dormida pero no podía, estaba muy débil, Justin. Quería decirte que estaba bien y que te amaba más que nada en el mundo, que...— la interrumpí, el hecho de que hable tanto, me preocupaba. Acababa de salir de un coma.
—¿No estoy viviendo un sueño, no?— pregunté mientras sonreía.
—No, Justin. ¿Estás drogado o qué?— me preguntó ella. Y me dio una felicidad inmensa. ¡____, estaba aquí!
—Insúltame— le pedí.
—¿Qué?— preguntó desconcertada.
—Hace mucho no te enojas conmigo, extraño eso— dije mientras besaba la palma de su mano.
—¿Es enserio, Bieber?— enarcó una ceja —¿Estás diciendo que soy una estúpida que se enoja por nada? ¡Valla idiota eres!— me miró. —En vez de decirme "Mi amor, extrañé tus besos" no, el señorito "Extraña que me enoje con él" osea que pedo contigo, Bieber— me miró y solté una carcajada. Eso quería, a mi ____ devuelta.
—¿Sabes que eres lo mejor que me ha pasado en la vida, no?— pregunté.
—Supongo que lo soy— me respondió.
—Supongo las pelotas, eres lo mejor que me ha pasado en la vida. Claro que ahora también Jared lo es, pero sin ti no habría ningún bebé y...— ella me interrumpió.
—Cuéntame de mi bebé. Quiero saber todo, Justin. Cada pequeño detalle, quiero saberlo— dijo ella mientras miraba a Jad y le daba un beso sobre su mejilla. Lo cargó y lo recostó sobre su pecho —Extrañaba sentirlo. Sentir su respiración con la mía— dijo ella y sentí como la voz se le quebraba —¿Y si el no siente que yo soy su madre?— me miró con temor —Estuve tantos días en este hospital que, no lo sé, es mi hijo me he perdido bastante de él, yo no quise que las cosas fueran así— vi como dos lagrimas caían de sus ojos. Me acerqué a ella y la abracé, di un beso sobre su frente y sequé esas lagrimas.
—Cuéntame de mi bebé. Quiero saber todo, Justin. Cada pequeño detalle, quiero saberlo— dijo ella mientras miraba a Jad y le daba un beso sobre su mejilla. Lo cargó y lo recostó sobre su pecho —Extrañaba sentirlo. Sentir su respiración con la mía— dijo ella y sentí como la voz se le quebraba —¿Y si el no siente que yo soy su madre?— me miró con temor —Estuve tantos días en este hospital que, no lo sé, es mi hijo me he perdido bastante de él, yo no quise que las cosas fueran así— vi como dos lagrimas caían de sus ojos. Me acerqué a ella y la abracé, di un beso sobre su frente y sequé esas lagrimas.
—Deja de decir tantas estupideces juntas, hermosa— dije mientras reía negando con la cabeza. Ella me miró seriamente. No le había gustado para nada mi comentario, o mejor dicho, mi risa negadora.
—No sé donde mierda le ves lo gracioso a todo esto— dijo seria. Dios amaba verla enojada ¿Lo notaron? —Hablo enserio, Justin.
—____, no pienses cosas que no tienen sentido alguno. ¿Sabes qué? Jared te extrañaba, extrañaba tu calidez ____. Y ya tienes un claro ejemplo para eso...— dije mientras la miraba.
—¿Qué ejemplo?— preguntó.
—Recién, él estaba llorando como si alguien le hubiese pegado una gran bofetada por el trasero. Quise calmarlo, hice lo que siempre hago y nunca me fallaban mis tácticas, pero él por una extraña razón, no lograba calmarse, y así de la nada, despiertas tú cantándole la canción que siempre solías cantarle y al escucharte se relajó totalmente, amor. Así que... No le veo sentido a lo que dices, porque Jared te ama más a que nada y te necesita tanto para vivir, así como yo, nos quitas el oxigeno a ambos si te vas de nuestras vidas, ___.— la miré y ella tenía sus ojos acuosos. Oh mi dios, había despertado muy llorona. La amo.
—Dios ___ eres tan jodidamente perfecta— dije mientras le robaba un sonoro beso de sus labios. Dios se siente tan malditamente bien besarla. Extrañaba esto como a nada en el mundo. Pero ese beso fue interrumpido por la extraña separación desesperada de mi querida futura y hermosa esposa. —¿Qué sucede, amor?
—Oh, Justin. ¡Joder, he hecho trizas tu auto! ¿Quieres tirarme de un quinto piso, cierto? ¡Juro que lo siento! en verdad... Biebs. De todo corazón, siento haber chocado tu auto con quien sabe que clase de medio de transporte, pero lo remediaré, lo juro— dijo rápidamente, y me eche a reír. ¿Que se le dio por pensar en eso?
—___, amor, ni importa mi preciado ex auto, cielo— dije mirándola, y aunque no quería decírselo, me dolía en el alma haber perdido a mi único novio. Sí chicas, por él solo me hice gay. Pero solo ___, lo sabe.
—Ay dios, que no te salte el lado gay, Justin. Yo quiero a un hombre, porque cuando tengamos sexo, no quiero reacciones de homosexual, porque la que tiene que chillar soy yo, no tú ¿Oíste?— dijo ella y reí con más ganas.
—¿Amor, qué clase de droga te han estado dando estos doctores, eh?— reí. —¡Dios, ___! te amo, y me encanta estás reacciones incoherente que tienes. Y no te preocupes hermosa, te daré tan duro que no te quedará ninguna duda que soy todo un hombre en la cama, mi amor— dije mientras depositaba un beso sobre mano.
—Oh, mierda— dijo mientras se tapaba la cara avergonzada por lo que dijo anteriormente. Yo negué con la cabeza divertido —Estos medicamentos me han subido las hormonas y me han echo toda una sexopata— volvió a decir mientras miraba a un punto fijo de la habitación. Pero luego volteó mirarme alarmada —Oh, no, Jared pensará que somos actores pornos profesionales, dios, mi bebé, perdona a estos padres cochinotes que tienes, tú solo duerme y sueña cosas bonitas.
La miré mientras seguía diciendo otras par de tonterías más. Dios, ¿Puede caber tanto amor en mi corazón para aquella mujer? la amo, la amo y nunca me cansaré de decirlo. La amo así de histérica, caprichosa, loca. La amo, sin maquillaje, despeinada, en piyama, amo cuando se pone histérica al no saber que ropa ponerse, amo cuando despierta malhumorada y quiere pegarle a todo el mundo, también amo sus ataques cariñosos cuando me llena de besos y me dice muchas cosas tiernas a su manera. La amo y la amaré toda mi vida. Porque me hace feliz, con sus actitudes de vieja loca, de inmadura, de pervertida cuando se le da la gana, amo sus cursilerías, y por sobre todo esos sabrosos besos que suele darme siempre. Amo a ____ Holly Bennett y estoy cien por ciento seguro, que lo haré para toda la vida. Joder, es tan jodidamente hermosa, y tan mía. ¿Quien diría que terminaría tan dominado por una chica? es simple, estoy locamente enamorado de ella.

El amor a veces duele. (ADAPTADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora