Capitulo 52

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El amor a veces duele.
Capitulo 52.

No se que y como han hecho para convencernos pero ya estamos aquí en el aeropuerto. Fue algo difícil convencer a nuestros padres pero al fin y al cabo nos dejaron. Dijeron que este viaje nos ayudaría a independizarnos un poco más.
Dos semanas de diversión, lo admito, dos semanas con mis amigos, la pasaremos genial, y estaré todo el tiempo con Justin.
Una voz que provenía del parlante que estaba a poca distancia de nosotros, nos daba aviso para entrar al avión.
Ahora si, trece horas de viaje. Es algo aburrido pero sin darme cuenta después de tanto conversar con mi novio el sueño fue atrapándome poco a poco así hasta quedarme dormida en los brazos de Justin.

Narra Justin:

_____ se quedo dormida en mis brazos, bese su mejilla y ella hizo un gesto algo gracioso que me hizo reír. Me acomode mejor y decidí dormir, ya que estaba algo cansado y tenía un largo viaje.
Desperté por unos suaves besos sobre mis mejillas, abrí un poco los ojos y mi novia era la causante de eso. Sonreí y bese sus labios.

Tú: Llegamos dormilón - Beso mi frente.
Justin: ¿Y los chicos? - Mire por todos lados ya que no estaban.
Tú: Nos están esperando abajo - Rió.
Justin: Bueno - Dije levantándome.- Voy por las maletas y bajamos.
Tú: Yo te ayudo - Dijo siguiéndome, ella agarro su maleta y yo la mía y bajamos los dos juntos, fuimos hacía donde estaban los chicos. El coordinador había alquilado un autobús para llegar al hotel donde nos hospedaríamos. Fueron solo 15 minutos de viaje, bajamos nuestras maletas y cada apartamento era para ocho personas. Obviamente íbamos a estar todos juntos, abrí la puerta y no podía creer la belleza que tenía delante de mis ojos, eran cuatro habitaciones, la cocina, el comedor, un pequeño living, dos baños, y un balcón que tenía una vista grandiosa.

Tú: Wow, es hermoso - Dijo mirando asombrada.
Justin: Creo que tendremos que dormir de a dos, mira - Dije apuntando las camas matrimoniales que había en las cuatro habitaciones.
Tú: ¿Camas matrimoniales? es raro - Rió ella.
Justin: Por nosotros no es problema - Bese su mejilla.
Tú: Claro que no, para Danie y Chris tampoco - Sonreí.
Justin: Y creo que para Annie y Chaz no será problema, suelen dormir juntos siempre - Rió.
Tú: Ajam, el problema es... Eli y Ryan - Hizo una mueca.
Justin: Ya hablaremos con ellos, a ver como dormirán, porque nosotros, si dormiremos juntos - Me miro pícaro.
Tú: Pervertido - Rió.
Justin: Tu eres la que mal piensa - Se defendió.
Tú: Bueno - Dijo sonrojada - Vamos a hablar con los chicos - Tomo mi mano y nos dirigimos a ellos.

Narras tu:

Con los chicos habíamos arreglado todo. Cada uno dormirá con su pareja y Elizabeth y Ryan también dormirán juntos. No fue muy difícil convencerlos. Decidimos almorzar, ya que no habíamos comido en todo el viaje, pedimos pizzas. Con Danie pusimos la mesa, y los chicos fueron a comprar algo para beber. Tocaron el timbre y era el repartidor de pizza, le pague, le di una propina y entre. Deje las pizzas en la mesa y justo llegaron los chicos, habían traído Coca cola, y unas latas de cerveza.

Danie: ¿Ustedes piensan embriagarse? - Levanto una ceja.
Chris: Claro que no, una cerveza no hace mal, amor - Rió.
Tú: Solo una Justin - Le advertí, no me gustaba que beba así porque si.
Justin: Si amor, tranquila - Rió y me beso en la mejilla.
Annie: La cena ya esta servida, así que coman ahora antes de que se enfríe - Nos llamo a todos.

Comenzamos a comer y platicábamos sobre las cosas que íbamos a hacer durante estos días. Los chicos nos han dicho que para hoy a la noche organizaron una fiesta. Eso significa que con las chicas tendremos que ir de compras. Al terminar limpiamos la mesa y tiramos las cajas en el tacho. Con las chicas optamos para ir al centro de los Ángeles, a comprar algo para la noche. Y los chicos decidieron ir a jugar fútbol, con sus compañeros.

Tú: Bueno déjame, me tengo que ir amor - Reí entre besos.
Justin: ¿Y si te quedas conmigo? aquí los dos solos, haciendo cosas no debidas - Dijo abrazándome por la cintura y depositando varios besos por mi cuello.
Tú: No, no y no - Dije separándome de el, aunque no tenía muchas ganas de hacerlo- Las chicas me esperan - Lo bese- Te amo. - Dije antes de salir por la puerta.

Después de una larga búsqueda de vestidos, encontramos el vestido perfecto para cada una. Yo había elegido el mío con ayuda de ellas, creo que Justin me matara cuando me lo vea puesto, pero a mi me gusto y eso es lo que importa, al diablo el y sus celos.
Luego de comprar, fuimos a Starbucks. Danie y yo nos compramos un Frapuccino de doble chocolate chip y Annie y Eli, dos Frapuccino java chip. Nos sentamos en una de las mesas de allí. Mientras hablábamos de cosas.

Danie: ¿Que vamos a comer en la noche? - Pregunto dándole un sorbo a su frapuccino.
Tú: No lo se, creo que tenemos que ir de compras - Reí.
Annie: Vamos ahora, después de aquí.
Eli: Y hagamos la cena temprano, así tenemos más tiempo de prepararnos - Era una buena idea.
Tú: Buen punto - Reí y seguí disfrutando de mi frapuccino.

Quince minutos después nos fuimos de allí, nos dirigimos al supermercado que estaba en el mismo centro comercial. Compramos varias cosas, como galletas, postres, pastas, quesos, mantequilla, nutella, pan, salsa de tomate, carne para asar, patys, entre otros. También compramos artículos de limpieza, y lo necesario. Salimos del super llenas de bolsas y así nos dirigimos al apartamento. Al llegar acomodamos todo en su lugar. Mire el reloj de la sala y marcaban las 7:30 de la tarde.
Con las chicas nos pusimos los delantales y empezamos a cocinar, haríamos Carne asada con papas al horno. Era divertido cocinar con ellas, reíamos por los comentarios estúpidos que decía alguna. Si nuestras madres nos vieran así, simplemente no lo creerían.
Annie termino de cortar las papas, lavo sus manos y se dirigió al living, abrió las ventanas para que corra el aire y se valla un poco el olor a ambiente cerrado. Yo puse las papás al horno, Eli, al terminar de condimentar la carne, se lavo las manos y opto por preparar la mesa. Danie estaba asando la carne y fijándose cada tanto para que no se le dore demasiado. Al rato llegaron los chicos todos sudados.

Tú: No, ni se te ocurra abrazarme, estoy cocinando - Reí.
Justin: Solo un besito - Rió y beso mis labios.
Tú: Ve a bañarte, mírate estas sudando - Reí.
Justin: Esta bien - Rió y se marcho, pero al rato volvió - ¿Un último beso? - Encorvo su labio inferior.
Tú: Okey - Sonreí y bese sus labios - Ahora si, a bañarte - Reí. Y dicho esto, el se encerró en el baño.

El amor a veces duele. (ADAPTADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora