En realidad no tenía idea de lo que estaba haciendo, pero le correspondí después de unos cuantos segundos, jalé el poco cabello que tenía hacía atrás, se deshizo de mi saco y los botones de mi camisa salieron volando mientras yo regresaba a sus labios y los mordía, Zayn se separó un segundo y volvió a chocar nuestros labios pero ahora nuestros dientes también lo hicieron, no llegó más allá de encenderme más, traía la furia dentro y esto era una buena idea para hacerle pagar, así que me deshice de sus pantalones, jalandolos con brusquedad, Zayn gimió y me jaló el pelo hasta él para volver a unir nuestros labios, chupó y mordió el inferior mientras yo gemía y lo empujaba sin ningún cuidado a la cama, jalé los boxers hacia bajo y Zayn se encargó de lanzarlos lejos a cualquier parte de la habitació, me subí a él, mis rodillas cada una a un lado de sus caderas desnudas, tomé sus manos por encima de su cabeza y comencé a pasear mis labios por sus hombros y pecho desnudo, mordisqueando y chupando.
-I-diota... No quiero ma-marcas. -se quejó
-Muy tarde -sonreí- esto es por agredirme. -volví a su cuello pero sólo le dí un pequeño mordisco, no debían quedar marcas en ningún lugar visible, Zayn gimió.
-Suéltame. -y así lo hice, se apoyó en mis hombros y dió una vuelta estratégica para que yo quedara abajo, sacó mis pantalones y mis boxers de un sólo tirón, volvió a mi cuello dejando ligeros mordiscos que me sacaban alguno que otro gemido, que intentaba evitar, pero Zayn se acercó a la parte en la que tengo mi marca de nacimiento, y chupó y mordisqueo sin importarle dejarme marca, me sacó los gemidos que trataba de contener.
-No es tan fácil... Contenerse, ¿cierto? -dijo, se restregó contra mi.
Lo admito, era mi primera vez con un hombre, y no sabía como todo esto iba a ocurrir pero se sentía jodidamente bien.
Así que simplemente me levanté con él sobre mi.
-¿lubricante y condones?
-Primer cajón. -metí la mano al cajón, a penas toqué el sobre del condón y la botella de lubricante eché a Zayn en la cama, puse un poco en mis dedos y estuve a punto de meterlos
-No voy a ser el jodido. -me miró serio, su piel brillaba contra la luz de la luna en su ventana.
-¿A no?, porque yo tampoco voy a hacerlo. -Zayn echó su cabeza hacia atrás y entonces asintió
-Pero me la voy a cobrar. -enredé sus piernas en mis caderas, y metí un dedo, Zayn gimió pero de dolor, aunque era lo que quería que sintiera no quería llegar a dañarlo ahí.
-¿Está bien?
-¿Qué jodidos importa?, anda, anda. -se echó para atrás metiendo más mi dedo índice dentro de él, así que me encogí de hombros y metí un segundo y un tercero, me puse el condón y encima de él sólo un poco más de lubricante y sin aviso me hundí en él, no estoy seguro si Zayn gimió o gritó, pero sonreí.
Una vez dentro de él comencé a penetrarlo, casi sin piedad, Zayn no dejaba de gemir, se sentía jodidamente bien, sus paredes me apretaban de una manera inexplicable, estaba jodidamente estrecho. Me acerqué y mordisquee de nuevo sus hombros y lamí un poco sus pezones, mientras él me arañaba la espalda, en ese momento no me importaba mucho, hasta que ambos llegamos al clímax y nuestro orgasmo fue, probablemente, el más ruidoso que he escuchado, y no es que no haya escuchado muchos antes.
Me tiré a un lado de él con mi respiración agitada y esperé a que se regularizara, nadie dijo nada en ningún momento, nuestras respiraciones era lo único que se escuchaba, y cuando yo ya estaba recuperado físicamente, mentalmente estaba perdido, ¿qué mierda había hecho?. Me levanté y tomé mi ropa del suelo a tientas.
-Voy a usar tu baño. -no esperé respuesta porque no era una pregunta. Fue un poco difícil cambiarme correctamente en medio de la oscuridad pero lo logré, cuando salí Zayn llevaba su boxer pero no dijo nada, ni yo, así que lo pasé de largo y salí de su cuarto, con tantas cosas en la cabeza que casi me caigo de las escaleras, ¡de verdad había tenido sexo con mi jefe!, ¡y ni siquiera era gay!, ¿qué demonios me había pasado?
____
Me removí en la cama y me quejé, abrí los ojos para encontrarme con el reloj de mi mesa, 6:45 p.m., se me había hecho tarde. Me levanté con rapidez y entré a la regadera tan pronto me pude poner de pie, el agua tocó mi piel, y mi jodida espalda, me quejé, voltee para poder verme en el espejo de mi baño y dejé que mi boca y mis ojos se abrieran, Zayn era un maldito hijo de puta, lineas rojas
se paseaban a lo largo de mi espalda, y ocho marcas de uñas un poco más en mi trasero, no había sentido eso en la noche, pero ahora sólo podía apreciarlas, jodidas marcas, pero sonreí.Llegué a su casa cinco minutos tarde, Kelly ya estaba en el auto, pero Zayn aún no salía.
-¿Pasa algo?
-No tengo idea.
-Pensé que iba a llegar y él iba a empezar a gritarme. -esperé fuera, en la puerta principal, con la camioneta al pie de las escaleras de bienvenida.
La puerta se abrió dejandome verlo, su cara brillaba de energía pero no había ni una pizca de felicidad en su rostro, seguía igual de serio que siempre, me dió la impresión de que no esperaba que yo estubiera ahi.
-¿Tarde otra vez Liam? -se pasó de largo y entró a la camioneta, entré un segundo detrás de él.
-Llegué a tiempo. -dije
-Claro. -sacó un cigarro de su chaqueta y lo puso entre sus labios.
-Iugh, ¿vas a hacerlo tan temprano?
-Como si te importara.
-Oh, sí que lo hace, mi traje huele bien, y entonces a lo único que va a oler cuando salga de aquí va a ser a tu jodido cigarro.
-En realidad, ¿por qué crees que me importaría el olor de tu estúpido traje?
-A ti no, por supuesto. -dije frunciendo el ceño y cruzandome de brazos.
Todo el camino me la pasé observando la ventana a lado de mi, nadie dijo nada más.
-Hoy es el segundo concierto, y espero que no te detengas a leer carteles ridículos Zayn. -se encogió de hombros
-Dile al de la cámara que no los enfoque.
-Él ya lo tiene claro. -Paul se quedó callado y nos miró a ambos
-¿Qué? -dijimos al unísono
-Guau, no he escuchado ninguna palabra agresiva entre ustedes dos, ¿qué pasa?, no es normal.
-Sólo estoy cansado de hacerlo, pero no parece que acaben de todos modos. -volvió a encogerse de hombros y se dió la vuelta saliendo del cuarto, Paul se acercó a mi e hizo una mueca.
-No pensé que fumaras.
Apreté los puños.
No era que yo fuera el más sano o el más legal, pero lo que sí detestaba era el cigarro, era algo que no podía soportar, el olor me producía nauseas y hacía que me pusiera de mal humor, por supuesto que no me gustaba andarlo cargando sobre mí todo el día, me gustaba oler bien y estar presentable, cosas que al parecer a Zayn le valían un soberano cacahuate, e iniciar mi día con ese olor había hecho que el día completo comenzara a ser un desastre, porque estaba tan de buen humor y Zayn lo había echado a perder, como siempre.
En la camioneta de camino al estadio Zayn volvió a encender un cigarro, me mordí la lengua para no gritarle, hasta que Zayn sonrió en mi dirección haciendome saber que lo estaba haciendo al propósito.
-Eres un maldito inmaduro.
Zayn sacó el humo de su boca echándomelo a mi, apreté mis puños.
-No te escuché.
Rodé los ojos y me mantuve callado.