UN AMOR ENTRE MAFIOSOS. (kookmin).

CAPITULO XL

En lo más alto del oscuro cielo la luna iluminaba la oscuridad de la noche, las estrellas le hacían compañía a la gran esfera formando así un hermoso cielo.

Yoongi y hoseok llegaron a casa luego de pasar su tranquilo día fuera de esta.

Hoseok miro el hermoso monumento frente a ellos, en ese momento pensó en la chica herida que había adentro, sintió tristeza temiendo a sus pensamientos, dudas y otro montón de cosas que pasaban por su cerebro.

Yoongi noto la inquietud de hoseok y con cuidado de no asustarlo, le acaricio la mejilla y lo hizo que lo mirara.

---¿crees que esa chica se comportaría de esta manera si sus planes fueran otros? ---pregunto yoongi.

---no se que creer. Continuamente nos topamos con traiciones, con los años desarrollamos un mecanismo de defensa ---hoseok lo miro fijamente a los ojos.

---no pienses demasiado. Todo tiene una explicación, estoy seguro de que sus acciones con reales ---yoongi apago el auto que aunque se había detenido, seguía encendido. ---no te atormentes.

Ambos bajaron del auto y caminaron a la casa sintiendo el viento frío en sus cuerpos.

Antes de entrar se quedaron de pie frente a la puerta. Yoongi recostó a hoseok en el marco de la puerta y lo acorralo con sus brazos.

Sus miradas se mantenían en sus labios y sus corazones se aceleraban a gran velocidad, ¿quien daría el primer paso?.

Yoongi siguió sus impulsos y unió sus labios con los ajenos en un beso suave, hoseok no puso resistencia y siguió con el beso.

El calor corporal aumentaba y una adrenalina comenzaba a recorrer su cuerpo haciendo que el beso se intensificará.

No habían segundas intenciones, solo querían disfrutar el proceso.

Yoongi cargo a hoseok y lo agarro fuerte de la cintura, hoseok paso sus manos por el cuello ajeno disfrutando cada segundo que pasaba.

El frío dejó de hacer efecto en sus cuerpos, pero la falta de aire los obligó a separarse.

---debemos entrar ---susurro hoseok sobre los labios ajenos.

---bien, entremos ---yoongi sonrió y luego bajo a hoseok.

Antes de entrar organizaron sus prendas de vestir y su cabello, luego abrieron la puerta y entraron.

Por instinto caminaron directo a la sala y allí encontraron a los habitantes de la casa.

---¿se divirtieron? ---pregunto namjoon.

Ambos quedaron de pie en su lugar y asintieron con la cabeza.

---tenemos la noche libre, vamos a ver películas ---anunció hyun ki emocionada.

---esta bien, pero primero veré a ji seok ---hoseok se dispuso a caminar hacia la habitación de su protegida.

---voy con él ---yoongi siguió detrás de él.

Se detuvo en la puerta de la habitación, no sabía qué pasaría luego de esto y tampoco sabía que saldría de los labios de Ji seok.

Para él era como devolver el tiempo atrás, cuando hace un año le rompieron el corazón. Cuando tomo una decisión que transformaría su ser.

---sin importar que pase detrás de esta puerta, todo tiene un motivo ---yoongi puso su mano en el hombro de hoseok.

---si me traiciona la mato ---hoseok abrió la puerta y se adentro con una sonrisa.

Yoongi sonrió feliz, y no porque pensara matar a la chica si había traición, si no porque él diría lo mismo si estuviera en su posición.

---¿como estas? ---pregunto con una sonrisa a la chica.

---mucho mejor ---hablo suave.

El temor recorrió su cuerpo cuando vio la figura de yoongi entrar a la habitación con su típica mirada fría y su porte de empresario prestigioso.

Hoseok noto su temor, lo que activo su instinto protector.

---él es yoongi, es un socio y ...¿amigo? ---hoseok miro a yoongi y este solo supo sonreír.

---mucho gusto ---yoongi hizo una reverencia.

---mucho... gusto ---hablo la chica con temor.

---¿te sientes mejor? ---hoseok se sentó en la orilla de la gran cama.

---si... gracias a ustedes ---sus ojos se cristalizaron al recordar que tenía familia y que nisiquiera se preocupan por ella.

---ji seok, ¿puedo preguntarte algo?, pero promete no alterarte ---hoseok sonrió amplio.

Su mente vacilo unos minutos, pero tal vez hablar con hoseok le haría sentir mejor.

---si ---susurro.

---¿conoces a un tipo llamado touji? ---pregunto con cuidado.

---escuche ese nombre en casa, pero mis padres no quisieron decir quién era... lo único que me dijeron es que estaba haciendo negocios con él y que yo debía portarme bien ---la suavidad de su voz delataba lo mucho que se sentía triste.

Hoseok analizo lo dicho por la chica y lo dejo a la deriva, ahora tenía otra pregunta.

---¿como llegaste al callejón? ---pregunto hoseok con cuidado, mientras yoongi se sentaba a su lado.

---estaba en casa con mis padre...

Tres días atrás.

---ji seok, arréglate, alguien vendrá por ti ---hablo su madre mientras entraba a la habitación de la chica.

---¿a donde iré?... y ...¿con quien? ---estaba desconcertada.

---no hagas preguntas y organízate ---la seriedad en su rostro acompanada de la frialdad en su mirada erisaban su cuerpo.

No siguió preguntando, solo se dirigió al baño e hizo lo que su madre dijo.

Minutos después se encontraba en la sala junto a sus padres, estaba lista esperando nerviosa.

Un hombre llego en un auto muy lujoso y entro a la casa, sus padres lo saludaron y este miro a la chica con una sonrisa ladida.

---la traeré mañana temprano ---el hombre camino fuera de la casa y la madre de Ji seok le indico que lo siguiera.

Tenía miedo y estaba nerviosa, no sabía qué pasaría, no sabía a dónde iría.

Luego de su viaje en auto con aquel hombre se detuvieron en una gran casa. Habían muchos hombres cuidando el lugar y ella analizaba todo el lugar.

El día se escondía y la noche surgía.

Al entrar a la casa los nervios la invadieron, ¿que iba a pasar?.

Aquel hombre subió a un segundo piso y entró a una habitación; ji seok lo siguió en todo momento.

---nos divertiremos mucho ---una sonrisa surco en su rostro.

Sus labios comenzaron a recorrer su cuello, los nervios se apoderadon de su cuerpo y instinto de supervivencia se activo.

Incrustó sus uñas en el cuello de aquel hombre y las enterró lo más que pudo.un grito de dolor se escucho en la habitación.

Ji seok salió corriendo lo más rápido que pudo, pero un guardia la detuvo en la puerta.

Escondió su mano sangrienta y atendió al hombre lo más rápido posible.

---el señor me ordenó irme ---áviso, el hombre la dejo ir.

Corrió lo más rápido que pudo hasta que se detuvo en aquel callejón para tomar aliento.

Para su sorpresa el hombre llegó en un auto, al parecer la había seguido.

---¡no¡, ¡no lo hagas¡ ---gritaba aquella chica sintiendo como su mundo se hacía pedazos.

Aquel hombre no escucho sus súplicas.