- - Buenos días. ¿Cómo te encuentras? – El saludo de la persona que me había salvado nada más abrir los ojos. Me preguntaba cuánto tiempo debió estar allí esperando a que despertara. Era un chico de piel morena, ojos azules y pelo oscuro y corto, pero no demasiado corto. Llevaba barba de un par de días. Y tenía las facciones marcadas. Tenía una sonrisa cautivadora con unos perfectos dientes blancos y brillantes. No me podía creer que alguien así me hubiera salvado la vida.
- - Bien, creo… - contesté un poco aturdida aún. - ¿Dónde estoy?
- - En mi casa, en una pequeña isla que recientemente ha sido habitada, hasta ahora era casi desconocida. Posiblemente vinieras a visitarla a bordo de un barco que naufragó, ¿no? – Dijo mientras se levantaba a coger un vaso con agua para acercármelo – Toma, bebe un poco. – Era alto y fuerte. Un barco dijo… ¿había cogido yo un barco? No recordaba nada…
- - Gracias…
- - ¿Cómo te llamas? – Preguntó, ahora comenzaría el interrogatorio, pero yo no sabía nada, ¿qué debía responder?
- - No… no lo sé – Comencé a entrar en pánico al darme cuenta, ahora que ya me había recuperado, que no sabía quién era, que no sabía si tenía familia, que no sabía qué hacía allí, no sabía nada de mi propia vida… - No sé qué hago aquí, no recuerdo haber cogido ningún barco, no recuerdo de dónde vengo, no sé quién soy… - Inevitablemente comencé a llorar, no podía soportarlo más. ¿Por qué me sentiría aliviada cuando me rescató? Debía haberme dejado allí, ahora no tenía a dónde ir…
- - Shhh tranquila – me dijo mientras me acariciaba tiernamente la cabeza – no te preocupes, ya recordarás. De hecho, cuando te encontré te llevé al médico dijo que estaba todo bien que si surgía algo que lo llamara. No te alteres, ya verás como acabas recordando. No te muevas que ahora le llamo.
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La chica sin recuerdos
Romance¿Cómo te sentirías si de repente despertaras en la arena sin recordar nada? Ésto le paso a la protagonista de este relato.
