Capítulo 13. Encanto Asesino

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Su cabello azabache se movía acorde la brisa que pasaba en ese momento, mientras yo lo observaba sentado bajo el árbol en donde siempre nos sentamos con Han y Derek. Allen se veía tan lindo con el uniforme apoyado despreocupadamente en la pared...

-Lau, detente- interrumpió mis pensamientos la voz de Derek y yo lo miré ruborizado.

-¿Qué... que hice?

-Mirar a Allen como si fuera un delicioso pastel- el castaño me observo divertido mientras mis mejillas se encendían aún más.-... Aunque yo me lo comería si fuera uno.

Han y yo miramos a Derek, bastante malhumorados. Generalmente era gracioso que actuara como la persona más coqueta del mundo, pero cuando su coquetería se dirigía a Allen ya no era chistoso. Aunque, en el fondo sabía que era una simple broma, no podía evitar molestarme un poco.

-¿Saben? Entiendo porque a Lau le molesta que yo diga estás cosas, pero...- dijo Derek enseñándome la lengua de forma burlesca-No comprendo tu enojo Hani.

-No estoy enojado- respondió Han, secamente- Y, ya te lo he dicho, no me digas Hani.

-¿No estás enojado? ¿Qué acaso no sabes diferenciar las emociones? Hani- el castaño puso real énfasis en la última palabra mientras yo me reía por lo bajo. Amo las peleas de estos dos.- Pobre chica la que guste de ti... Si tu cara de felicidad es esta, no me quiero imaginar la de enamorado.

El semblante de Han se volvió oscuro al instante y bajo la mirada lentamente. ¿Estaba dolido? Quizás Derek se había pasado un poco con sus palabras, pero Han no era alguien muy sentimental, su comportamiento era extraño.

Me apoye en el árbol mientras seguía escuchando a Derek relatar la triste historia de la novia que le había inventado a Han. Aunque no era una chica real, empezaba a darme pena su historia.

-Y entonces la chica y Han, no pudieron ser felices porque él es insensible, fin-el chico se recostó en el árbol y se quedó callado unos segundos- Como sea... ahí está tu pastelito hablando con la chica tímida. Es bastante linda ¿No creen?

-No.- respondí rápidamente mirando como Allen y Emi... Ana... ¿Mima?, como se llame, hablaban.

-En absoluto- dijo luego el pelirrojo, levantándose del pasto lentamente. Cuando ya estaba de pie, tomo todas sus cosas y se despidió con una mano de nosotros.-Me voy. Gracias a Derek ahora tengo la necesidad de tratar bien a muchas chicas y disculparme con ellas por haber sido insensible en alguna ocasión.

-¡No puedes hacer eso! No comprendes la psiquis femenina, caerán rendidas a tus pies si te comportas como un ser humano de repente.- Derek se levantó también y lo comenzó a seguir.

-No le veo lo malo...- contesto el pelirrojo ¿Sonriendo?

-¡Es malo!

Cuando ya iban por el pasillo, Han muy contento y Derek colgado de su brazo intentando detenerlo, deje de observarlos y cambie de dirección hacía donde estaba Allen. Ya no estaba con la chica rubia, ahora hablaba por teléfono muy efusivamente, seguramente hablaba con alguien no muy agradable. Unos minutos más tarde llego a mi lado algo decaído, y se recostó junto a mí suspirando.

-¿Paso algo?

-Lau... Sabes que nunca te haría daño ¿no?- dijo Allen algo afligido y al verlo de ese modo solo pude asentir con la cabeza. Yo sabía que Allen no sería capaz de hacerme daño nunca, como yo tampoco a él. Sonrió con dificultad al ver mi respuesta y apoyo su cabeza en mi hombro.-Mi padre... me ha estado presionando para que haga algo, y si no me doy prisa terminara el haciéndolo, y yo no quiero eso...

Love & MurderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora