Amor a prueba de balas

Capítulo 26: Me arrepiento

Los días habían pasado y ya faltaba poco para que Mateo regresara. Lucía estaba pletórica de alegría, por fin empezarían con sus planes de boda, además de pensar también sobre el bautizo de Abril. El día anterior la había llamado para decirle que regresaría al día siguiente y que ya no aguantaba más tiempo estando lejos de ellas.

Lucía intentaba concentrarse en su trabajo para no pensar tanto en el regreso de Mateo, las emociones la colmaban y estaba a punto de dejar todo para salir corriendo, pero no, tenía que seguir trabajando, así que se concentró en los papeles como pudo y continuó.

Toc toc...

Lucía dió permiso para que pasara quien quiera que fuera y entró Danna con ganas de conversar.

-¿Qué haces aquí?- preguntó Danna- deberías estar arreglándote para la llegada de Mateo.

-Tengo trabajo- respondió cortante.

-Ah si trabajo, ¿qué importa eso cuando tu prometido está a punto de llegar?

Lucía la  miró con cara de pocos amigos.

-Ah no- respondió Danna ante su mirada- no me mires así, yo que tu ya estuviera buscando lo mejor para esta noche, no todos los días un novio regresa después de tres meses fuera con ganas de muchas cosas.

Lucía se rió ante el descaro de su amiga- Me voy en un rato- confesó- pero déjame trabajar...

El teléfono de Lucía sonó en algún lugar de su escritorio.

-Diga.

-Tengo información de Raúl- contestó Gavilán.

Lucía se levantó y caminó hasta una esquina de la habitación

-Suéltalo.

-Está viviendo con un amigo si es que se puede decir así, ha estado de icógnito con respecto a las drogas pero digamos que ha estado viendo a mujeres de la clase fácil- Lucía entornó los ojos- ¿qué quieres que hagamos?

Quería tener a Raúl en su manos que no volviera a intentar nada, el problema era ¿cómo hacer eso? y por más que pensó en eso solo encontró una alternativa.

-Entréga un currículo falso de mi parte, y si me contratan mejor.

-¿Sabes qué es un club de mujeres de la vida fácil no?

-Si lo sé, pero nadie habló de hacer eso, lo único que quiero es hacer de las mías, conseguir lo que quiero y luego plantear la evidencia, yo te aseguro que no me voy a echar para atrás ante una denuncia de esas.

-Si pero es peligroso...

-No es la primera vez que hago algo parecido.

-Voy a ver que puedo hacer, pero si no entras por las buenas buscaremos otra alternativa y no es precisamente secuestrándolo.

-Está bien- accedió.

-¿Otra misión?- le preguntó Danna.

-Si pero esta vez es personal.

-Dime que no se trata de Raúl- al ver la cara de Lucía solo corroboró su teoría- oh por favor Lucía.

-Es solo esta vez, no lo quiero cerca de Alina, de Mateo o de Jéssica, ese hombre es peligroso, además es a última vez que hago esto.

-¿Vas a dejar tus misiones encubiertas?- preguntó Danna sorprendida.

Lucía asintió- Si, creo que es lo mejor, ya he reunido suficiente dinero, además añadiéndole a eso el juicio de Velásquez es dentro de poco y no quiero que usen eso a su favor.