Amor a prueba de balas

Capítulo 8: El secuestro

Mateo se encontraba en rehabilitación con un paciente mientras conversaba con él. Desde hacía Seis años que se dedicaba a ese tipo de actividades,a su ex nunca le gustó que trabajara de eso porque le ocupaba mucho el tiempo, luego por alguna extraña razón aceptó que el no lo dejaría, y muy tarde comprendió por qué. Luego de que la relación se hubiera roto Mateo hacia sus consultas y terapias en la Mañana y en la tarde sin tener que rendirle cuentas a nadie. Estar soltero tenía su ventaja, nadie que te molestara, nadie que se quejara de lo que hacías mal, que vida tan tranquila - pensó.

-'¿Y cómo te fué con el abogado?-Preguntó Daniel que se encontraba de intruso metido en el consultorio mientra Mateo despedía su último paciente.

-Bien.- dijo Mateo-¿A qué no adivinas quién es mi abogado?- preguntó Mateo sabiendo cómo le caería la respuesta.

-No sé,¿ tu dime quién?-dijo el ignorándolo, concentrado en sus mensajes de texto.

-Nada más y nada menos que Lucía Catillo.

-¿Quién es esa?

-La odia hombres, la lesbiana, la arriesgada, la tipa del aerpuerto.- Daniel se acordó de quién hablaba.

-No puede ser.

-Si puede ser.

-¿Pero qué dijo, preguntó por mi?- hizo la última pregunta en broma.

-Ya quisieras tú Daniel, pero no era eso a lo que iba.

-Ah, esa mujer es un hueso duro de roer. ¿Pero qué te dijo con respecto a mi sobrina?

-Me dijo que hay una pequeña posiblidad que obtenga la mitad de la custodia.

Daniel aplaudió en el aire comi si quisiera matar a un mosquito.

- Me alegra hermano- celebró Daniel, sabía muy bien como su hermano sufría por su hija- asegúrate de que quedarte a esa mujer.

-No lo creo.

-¿Por qué?. Si no es para mí te la cedo. Además es ideal para ti.

-Sabes que tiene novio.

-Si tu sufriste-Daniel se encogió de hombros-que sufra él también.

-No es lo justo- rebatió Mateo.

-¿Quién dijo que la vida era justa?

-Vamos a dejar ese tema en el aire, lo que menos estoy buscando ahora es una relación, y menos que sea sentimental.

-Puede ser una pero con beneficios-dijo Daniel subiendo y bajando ambas cejas.

-Voy a hacer como que no dijiste eso-Daniel no pudo más y soltó una carcajada.

-Ay hermano, vas a ver que tan equivocado estabas, cuando la tengas en tu cama.

-Daniel, una mujer no es un objeto, tienes que entenderlo de una buena vez- lo regañó Mateo.

-Hay muchas mujeres que te muestran una versión de la mujer perfercta-se sentó en la camilla frustrado- y no son más que pura farsa. Así que te aconsejo que si es cuestión de que la disfrutes hazlo y luego dejala.

-Lucía no es así-la defendió, eso alertó a Daniel.

-¿Y cómo lo sabes?.

-Porque estudié con ella.-Daniel abrió la boca, no sabía esa parte de la historia - y se que no es mujer actriz.

-Eso no lo sabía.

-Si estudié con ella durante dos años. Tenía mucho carácter, y si algo aprendí es que es muy correcta.