Quince

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Tenía al hombre en el suelo; lo golpeaba mientras que Lester, Ari y Luisa me veían preocupados, el tipo aun cargaba el arma; dio unos disparos, que cuando traté de quitárselos, no me di cuenta de a quién le cayó una bala hasta escuchar unos gritos. 

— ¡Lester! —todo se puso como en cámara lenta al escuchar a Ari y Luisa—. ¡Hermano! —, y fue ahí cuando lo vi sangrando de la pierna y mi corazón se detuvo por un instante; el hombre sólo reía. Y repentinamente me entró una rabia mientras ellas atendían a Lester casi llorando; llamaron a una ambulancia. 

— ¡Desgraciado, ahora si me las vas a pagar! —grité furiosa y me le lancé tanto que tipo se asustó—. ¡Ahora si te vas a arrepentir de haber hecho esto! —, lo agarré con todas mis fuerzas; lo tiré al suelo y ahí me puse sobre él y lo empecé a golpear en la cara hasta que le sangró.

Ari tuvo que alejarme del hombre porque le había dejado la cara desfigurada y lo dejé débil; yo parecía una loca que quería verlo muerto por lo que le había hecho a Lester. Todo pasó tan rápido que la policía se acercó y casi me llevaban a la cárcel, pero Ari les explicó que yo era guardaespaldas de Lester. 

La ambulancia llegó, los reporteros, fotógrafos y más llegaron para ver el escándalo que se había formado. Leonel, Zacarías, Henry y Nicolás también llegaron alarmados a ver lo sucedido e incluso estaban las fans llorando por la vida de Lester. Turistas y otras personas en medio de ello también. Y yo veía las escenas tan despacio; comencé a llorar de la rabia porque era mi culpa; yo debía protegerlo más, mas no lo hice. 

La prensa y la policía me hablaban, sin embargo, yo no tenía cabeza más que saber el bienestar de Lester. 

—Gracias; ahí estaremos para testificar lo sucedido, pero por favor les pido que lo dejen porque él está asustado —fue lo único que escuché de Ari, después sólo supe que ella alejaba a la prensa de mí. 

— ¿Quién se irá con el paciente? —preguntó uno de los enfermeros. 

—Yo soy su hermana —Luisa respondió llorando. 

—Yo soy su guardaespaldas —respondí, tenía que ir con él. No podía dejarlo solo.

—Lo lamento, pero sólo puede ir uno y ella es su hermana —advirtió y yo me estaba sintiendo mal; por alguna razón me estaba sintiendo mareada. 

—¡Adán, estás sangrando! —gritó Ari asustada y el enfermero notó que al costado de mi brazo me había rozado una bala. 

—Se irá conmigo en la parte de adelante, tienen que atenderle esa herida —comentó otro enfermero. 

Y así nos fuimos; Ari indicó que se iría con los chicos para ir al hospital. Pasé todo el camino sufriendo y no por la herida que tenía. Cuando llegamos al lugar, se llevaron de emergencias a Lester; dijeron que estaba inconsciente y si no le sacaban la bala podía perder la pierna, yo ya no aguantaba las ganas de llorar.

Algunos doctores me llevaron a otra sala para verme la herida, yo quería estar junto a Lester, mas no se podía.

Entré a una pequeña habitación. Me atendió un doctor llamado David. Yo hacía de todo sin pensar, me senté en la camilla y esperaba que terminaran rápido para poder ver a mi chico de los ojos celestes.

—Quítate la camisa —me ordenó el médico. 

Eso me hizo reaccionar. 

— ¿Perdón? —lo dije casi en mi voz real. 

—Necesito que te quites la camisa para que pueda curarte la herida —tragué saliva, debido a que podía causarme otro conflicto.

—No es... necesario... Yo me puedo arremangar la camisa —le dije nerviosa. 

Ella Es Adán| Una Locura Por Amor [Volumen 1]| DISPONIBLE EN AMAZON #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora