Realidad o Sueño.

Lo besé

Sentí pasos que se aproximaban, pero no me importaba estaba con mi ídolo en ese cuarto y no pensaba soltarlo porque alguien se estaba acercando al cuarto.

La persona se aproximaba hasta que sentí que giraron la manija de la puerta y pude ver quien era, era Antonio.

Estaba sorprendida, no esperaba que fuera él. Me miró con la boca abierta muy sorprendido, me preguntó. 

-Bueno, si quieres te dejo a solas.- dijo mirando a  Edward, que ya había dejado de abrazarme, con una cara de rivalidad.

-No, Edward ya se iba.-dije yo.

-El es el de tu libro, ¿Que hace aquí? ¿Por que te abraza ?

-Tranquilo ya me voy.-dijo, volteó a mirarme- no sabía que tenías novio.- me dijo a mí.

-No es mi novio, solo somos amigos.- dije yo.

-Aja- dijo Antonio en voz baja, su gesto daba la impresión de que se acordó lo que paso en el sótano.

-Adiós- me dijo Edward. Se acerco me dio un beso en la mejilla y se alejo un poco, hasta que lo detuve.

Lo detuve porque pensé tal vez que el me podría hacer sentir más confianza en mí para decirle a Antonio todo lo le tenía que decir y además también me podría defender.

-No, Edward, puedes quedarte.

-Como quieras.- dijo él

Se paro junto a mi y le devolvió a Antonio una mirada de victoria.

Luego de recibir la mirada de Edward, Antonio comenzó a hacerme preguntas. Como de donde salio hasta que hacia conmigo a solas en el cuarto. Traté de decirle todo lo que me había dicho Edward, pero creo que no me creyó.

-Bueno, quédate con él ya no me importa.

-Antonio, ya te dije que lo siento.

-Sabes que, mejor me voy no quiero que me sigas haciendo daño y mejor que ya no nos veamos. 

-¿Por que?

-Mira, hoy Edward te abraza y te da un beso, tal vez mañana llegué Peeta y te pida matrimonio.

Con las lágrimas cayendo por mi mejilla y conteniendo la rabia escuchaba todo lo que decía, hasta que no aguanté más. 

Le tiré una cachetada, fue tan fuerte que le comenzó a salir sangre de la boca, Edward me tuvo que sujetar por los brazos para que no le tirara otro golpe. Cuando se levantó estaba furioso, nunca lo había visto así en mi vida.

- Que te pasa loca.

-Loca, loca hubiera sido si no te hubiera mandado a la friendzone y hubiera aceptado la propuesta de ser tu novia, a no espera, si fui una loca, fui una loca porque te di un beso. Ahora yo ya sé lo que quiero y se diferenciar entre tú y algo mucho mejor.

Fue un impulso, no pensé antes de hacerlo, me dirigí hacia Edward y lo besé en los labios enfrente de Antonio. Mientras lo besaba, yo pensaba si Edward me seguiría queriendo como su hija, como dijo él. Pero de algo iba estaba segura, tenía que darle un buen motivo del por cuál me atreví a besarlo.