Capítulo 6

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Es tarde, demasiado tarde, el carro ha atropellado a Tamara. Yo estoy en shock, todo paso tan rápido, pero a la misma vez en cámara lenta. Corro hacia ella y me arrodilla a su lado, tomo su muñeca para tomar su pulso y no tiene, su respiración se ha detenido por completo.

Agarro su barbilla y le hago respiración asistida dos veces, luego pongo mis manos en medio de su pecho y comienzo a bombear 15 veces. Gracias a unas clases que rana me hizo tomar se esto. Hago esto varias veces hasta que, finalmente, me doy cuenta que es inútil y que ya no hay oportunidad.

Pongo su cabeza en mis muslos y acaricio su cabello rojizo, mientras as lagrimas bajan por mis mejillas y pequeños sollozos sacuden mi cuerpo violentamente. A mi alrededor se acumulan las personas, comenzando a murmurar, el conductor que atropelló a Tamara se bajo del auto y está hablando por teléfono.

-Por favor, vuelve.- quedo en silencio por unos segundos.- Haré todo lo que tu quieras que haga, incluso tirarme de un puente, pero por favor, no me dejes solo. Tú eres la única que me entiende, por que ni si quiera mis padres me entienden. Yo quiero que seamos mejores amigos hasta que seamos unos viejitos arrugados que se ríen de su pasado, que seas la madrina en mi boda, la tía de mis hijos. Quiero que te levantes de este mugriento suelo y me digas lo capullo que he sido, que me golpees hasta que te quedes sin fuerzas y me protejas entre tus brazos cuando me sienta perdido, por que tú eres la mas fuerte de los dos. No quiero levantarme y saber que no estas aquí por mi culpa.- digo con nuestras frentes juntas.

No se en que momento el cielo ha oscurecido y comenzado a llover, pero no siento nada en este momento. Solo quiero que ella se levante.

A lo lejos oigo la ambulancia llegar, junto a las patrullas. Siento como rana vuelve a respirar.

-Rana?- vuelvo a tomar su pulso y esta bajo, apenas se siente, pero tiene.

-Joven, nos permite hacer nuestro trabajo.- pregunta un paramédico, amable.

-Si, si. Por favor, ayuden la. Tiene el pulso muy bajo, pero respira.- digo desesperado, y dejo que monten a Tamara a la camilla.

- Usted es familiar?- pregunta el otro paramédico.

-No, pero soy su mejor amigo y voy a acompañarla.- le informo.

-Bien.- lo sigo hacia la ambulancia.

***

Llevo varias horas en el hospital, le han hecho varios exámenes y resulta que cayó en estado de coma. Voy camino hacia la habitación asignada, según me informaron que ella esté en coma tiene consecuencias.

Puede que:

Posiblemente, pierda la capacidad de caminar.

Puede perder la memoria.

O incluso, no despertar.

Entro a la habitación y me topo con su cuerpo con varios tubos a su alrededor, esta pálida por la perdida de sangre y su corto cabello rojizo no tiene el mismo brillo que antes. Tiene rapones en la mejilla derecha y en los brazos, yeso en su pierna derecha y una venda en su cabeza. Si no fuera porque tengo la esperanza de que despierte, ahora mismo me estaria tirando del edificio mas alto.

En cuanto su padre se entere de lo que pasó me va a matar, o puede que ella misma cuando se levante. Demonios, su padre.

Marco su numero y contesta al segundo tono.

-Hola?-

Recuerdame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora