Nunca Jamás

41 5 0
                                    

(Contado desde la perspectiva de Giacommo)
-No permitas que te vean- Prosigue mi padre- Mata a cualquiera que establezca contacto visual contigo, a menos que sea a Sarah, en cuyo caso, inmovilízala y avísame.
-Que sí- Contesto aburrido- Se cuidarme solito, aparte, no tengo tanto interés en luchar en vuestra mier...
-¡No sigas!- Me riñe mi padre- No es tan simple como eso, es una guerra ancestral, tómatelo enserio.
-Oh Patrón,- Comienzo- Me lo tomo en serio- Arquea una ceja- Pero lo justo- Susurro- No como otros.
-¡Giacommo!- Exclama- ¿Qué te pasa? ¿Arriesgarás tu vida, y con ello, la constante lucha de tus Patrones?
-Sí creo.
Sus ojos se tornan rojos y sus mechas rubias se transforman en un negro carbón.
-¡No vuelvas a decir eso!- Grita él- ¡O tendré que matarte!
-¡Atrévete a tocarme viejo!
-¡Jovencito! ¡Infernos!- Los guardas entran y me llevan a rastras a la pequeña y vieja, MUY vieja, celda.
-¡Te mataré VIEJO!
-Silencio- Dice un primer guardia. Es rubio de ojos marrones.
-No compliques más nuestra ya costosa tarea!- Dice el segundo. Este tiene el pelo grisáceo cual ceniza y ojos verde jade.
-¡Soltadme y hijos de put*!- Digo mientras le arreo una patada al primer guardia.
Este exclama y, claramente sorprendido, intenta atraparme de nuevo, sin suerte.
Soy demasiado rápido.

El Ángel de los SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora